* Se inició el Festival de Cine Iberoamericano, en Huelva


Sexo, pudor y lágrimas, entre las aspirantes al Colón de Oro

* La cinta de Antonio Serrano compite con otras 12 por la presea

Armando G. Tejeda, enviado, Huelva * Ayer iniciaron los festejos por el 25 aniversario del Festival de Cine Iberoamericano de Huelva. Durante ese cuarto de siglo se han sucedido en este pequeño pueblo andaluz, colindante con un hermoso paraje portugués, Punta Ombría, centenares de metros de celuloide realizados por los países de la región.

El origen de este festival, actualmente uno de los referentes del cine en América Latina, es también un ejemplo de la propia magia del llamado séptimo arte: un grupo de cinéfilos, encabezados por JoséLuis Ruiz, se reunieron en torno a un pequeño videoclub para organizar una semana dedicada a la exhibición de películas. Un año después de la primera experiencia, en un arrebato esos aficionados invitaron a Luis Buñuel a la siguiente sesión. El realizador surrealista acudió al festival, que desde entonces ha crecido en calidad cinematográfica, organización y asistencia de los genios del cine iberoamericano. María Félix, Cantinflas, Arturo Ripstein, Edward James Olmos, Pilar Miró son algunas de las personalidades que han asistido en los últimos 25 años.

En esta, su 25 versión, el Festival de Huelva rinde tres homenajes: al director de cine chileno Miguel Littin, quien sufrió la barbarie del régimen dictatorial de Augusto Pinochet; a la actriz española Angela Molina, por su labor profesional, y a Juanita Reina (post-mortem), una actriz andaluza de hondo cariño en esta región de España.

El Festival de Huelva se ha caracterizado en todas sus versiones por tener una firme apuesta por el cine de América Latina, si acaso la piedra angular de las propuestas cinematográficas. La presencia mexicana de este año viene encabezada por la película del director Antonio Serrano, Sexo, pudor y lágrimas. El filme concursa en la llamada sección oficial, conformada por 13 cintas que aspiran a ganar el máximo premio de este certamen, el Colón de Oro, dotado con 5 millones de pesetas (35 mil dólares).

Entre esas producciones están: la argentina Yepeto, dirigida por el realizador Eduardo Calcagno, en la que se cuenta una ''historia de amor, amistad, encuentro y desencuentro de un profesor de literatura y prestigioso escritor en los cincuenta'', dice el realizador sobre su propuesta.

También concursa una película coproducida por Argentina, Cuba y Espanña, Operación Fangio, dirigida por Alberto Lecchi. En esta cinta se aborda el secuestro, en 1958, del corredor de autos Manuel Fangio, por un grupo de revolucionarios cubanos seguidores de Fidel Castro. ''Fangio siempre mantuvo contacto con sus secuestradores, e incluso estuvo con ellos unos días antes de morir'', cuenta el director Lecchi.

Garaje Olimpo, del argentino Marco Bechis, es otra las cintas de la sección oficial; así como Maua o imperado e o rei, del brasileño Sergio Rezende. También la película del colombiano Sebastián Ospina, Soplo de Vida; la chilena El desquite, de Andrés Wood; la cinta ecuatoriana Ratas, ratones, rateros, de Sebastián Cordero; las dos españolas Tierra de cañones, de Antoni Ribas, y Jara, de Manuel Estudillo; la venezolana El valle, de Gustavo Adolfo Balza, y la estadunidense Luminarias, de José Luis Valenzuela.

En esta sección oficial también se encuentra un filme de uno de los grandes directores de cine de este siglo, el portugués Manuel de Oliviera, quien presenta A carta, que narra la trágica historia de Mademoiselle de Chartres.

El jurado estará formado por el productor Pepe Vargas, la actriz española Ruth Gabriel, el directror colombiano Sergio Cabrera, el director español Vicente Aranda, la directora Pilar Tavora, el argentino Enrique Gabriel y el director de Promoción Cultural de Cinematografía de México, Mario Aguiñaga.