* Los rumores sobre mi renuncia, caso cerrado, afirma el mandatario
Si lo que querían era fortalecerme, lo lograron con creces: Albores
* Reconoció la legitimidad del EZLN y dijo que gracias a ese movimiento es gobernador
Andrea Becerril, enviada, y Angeles Mariscal, corresponsal, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 20 de noviembre * Roberto Albores Guillén sostuvo que el intento por hacerlo renunciar lo que logró ''con creces'' fue fortalecerlo, y aseguró asimismo que el presidente Ernesto Zedillo nunca le pidió la renuncia. También rechazó que la convulsión que vivió el estado en las últimas 72 horas haya sido un acto fabricado por él mismo para neutralizar las crecientes demandas de juicio político en su contra.
En entrevista con La Jornada, horas después de que movilizó al aparato estatal a través de bloqueos de carreteras, concentraciones y movilizaciones de autoapoyo, Albores Guillén se mostró conciliador, llamó a la oposición a trabajar con él y aseguró que su gobierno no es contrainsurgente porque reconoce ''la legitimidad'' del movimiento del EZLN.
No quiso precisar el origen de los ''rumores'' impulsados por miembros de su propio partido, sobre lo que se decía era su inminente sustitución; lo importante, agregó, es el ''extraordinario respaldo espontáneo de los chiapanecos a su gobernador, y lo digo no aferrado a una silla''.
Las declaraciones las formuló a La Jornada antes de reunirse en Los Pinos con el presidente Zedillo, a donde fue citado la noche del viernes, pero después de que la mayoría priísta en el Congreso del estado formulara una declaración pública para respaldarlo. Esta mañana, ya ni siquiera quiso referirse a lo tratado con el Ejecutivo federal.
-En la entrevista que sostuvo con el presidente Zedillo Ƒqué explicación le dio sobre los rumores de su renuncia? ƑEl mandatario lo regañó?
-El expediente está cerrado. Asunto concluido, el gobierno no volverá a tratar eso -fue su respuesta a las interrogantes de los reporteros, luego de los festejos por el aniversario de la Revolución Mexicana.
El rostro conciliador
Durante la entrevista con este diario, luego de las presiones que vivió las últimas horas, se mostró conciliador con la oposición y con el EZLN. Dijo que buscará un mayor acercamiento con las fuerzas opositoras y subrayó que no estorbará en forma alguna las negociaciones entre el grupo rebelde y el gobierno federal. El movimiento zapatista, sostuvo, ''es legítimo'' y ''cuenta con mi mayor respeto''. Incluso, resaltó que si no fuera por ese movimiento, no estaría en la gubernatura.
Aseguró también que dará todas las facilidades y garantías para que la alta comisionada para Derechos Humanos de la ONU, Mary Robinson, visite la zona de conflicto y los lugares que ella quiera, ya que ''estamos interesadísimos en que conozca el rostro de Chiapas, el verdadero, no tenemos nada de qué avergonzarnos. Queremos que conozcan al Chiapas real, no tenemos nada que ocultar en Chiapas''.
La entrevista se llevó a cabo en las oficinas de Albores en Tuxtla Gutiérrez, mientras afuera empezaba a despejarse la plaza central de palacio de gobierno, donde fueron concentrados miles de empleados gubernamentales, presidentes municipales, estudiantes sacados de las aulas y los transportistas, que luego desbloquearon los accesos a la capital, cerrados desde un día antes como medida de presión.
El tema central fue lo ocurrido los últimos días, y quiénes estaban detrás de las versiones sobre su salida del gobierno de Chiapas. Albores reconoció que fue un intento para desestabilizar la entidad, y aunque trató de restarle importancia a lo sucedido, dijo que ''fue un rumor insistente, terco y no casual'', a partir del respaldo que recibió del presidente Zedillo durante su última visita a la entidad.
Asimismo, responsabilizó a los medios de comunicación de hacer crecer la versión no confirmada sobre su salida, lo que provocó ''la reacción espontánea'' de todos los sectores chiapanecos en apoyo a su permanencia hasta que concluya el actual periodo constitucional.
Sin embargo, agregó que el rumor creció tanto que ''hace dos o tres noches el propio líder del Congreso del estado, Mario Carlos Culebro Velasco, informa a los medios de comunicación de que alguien -Vicente Granados Septién- le dice que a qué horas va a tomar posesión de la gubernatura''.
Todo ello, justifica, es lo que provoca que los transportistas cerquen la capital: ''Puede ser una reacción extraordinaria pero no manipulada; por supuesto, tampoco la de los campesinos, de los agricultores, de los ganaderos, de los presidentes municipales, de las distintas organizaciones que creen que el gobernador Albores debe continuar al frente de Chiapas''.
Aseguró incluso que él tuvo que hablar con más organizaciones para que no realizaran acciones a su favor porque ''no había necesidad, no sentíamos una incertidumbre seria''.
Explicó que por ello su discurso fue de reconciliación, ''de agradecimiento, de buscar este momento para fortalecer las alianzas con los partidos de oposición, con todo el mundo. Necesitamos un gobierno, como lo tenemos -añadió-, que sea capaz de demostrar en los hechos que no quiere pleitos''.
Algunos analistas políticos consideran que se trató de una disputa por el poder entre priístas, se le señala, y Albores evade responder e insiste en que ''independientemente de los motivos de la desestabilización y de los rumores, lo importante es que provocaron mayor apoyo de los chiapanecos a su gobernador''.
-ƑConoce a Vicente Granados, el supuesto asesor de Ernesto Zedillo que presuntamente venía ya a sustituirlo?
-Para mí es un desconocido, empecé a escuchar su nombre en las columnas políticas, no he hablado con él, no lo he tratado, no sé quién sea.
Llamado a la oposición
Albores aseguró que hasta ese momento no había recibido llamada alguna ni del Presidente de la República, ni del secretario de Gobernación, pese a lo grave del asunto, y que tampoco él había tratado de comunicarse, ya que tenía la certeza de que Zedillo no podrá prestarse a un acto que vulnerara la soberanía chiapaneca.
Pocas horas después, voló a la ciudad de México para entrevistarse con el Ejecutivo federal, y no quiso revelar los términos en que se dio la plática. Un día después, este sábado, advirtió que no tratará más ese asunto porque lo de su renuncia ''es un expediente cerrado''. No repitió más la frase que reiteradamente pronunció las últimas horas, en el sentido de que se queda en la gubernatura hasta diciembre del 2000. Se le veía ya tranquilo.
Insistió en no hablar de quiénes fueron los que trataron de provocar su salida, incluso negó que tuviera que ver en ello el ex líder del Congreso chiapaneco, Oscar Alvarado Cook, o que fuera un ajuste de cuentas por su controvertida participación en el reciente proceso interno del PRI. Sin embargo, dijo que puede trabajar conjuntamente con los diputados priístas y los presidentes municipales, como también puede hacerlo con los partidos de oposición, a quienes invitó a que participen juntos, ''porque es por el bien de Chiapas''.
Declinó también responder a la pregunta que muchos se hacen en Chiapas, sobre la posibilidad de que los acontecimientos que convulsionaron al estado en las últimas 72 horas hayan sido un montaje instrumentado por él mismo para neutralizar la demanda de juicio político en su contra, que ha ido creciendo.
''Lo que debemos analizar con seriedad es el apoyo de Chiapas a su gobernador, porque no hay manipulación, 90 por ciento de los chiapanecos quiere que continúe con la estabilidad'', aseguró.
-ƑSe siente fortalecido ahora?
-Cuando no hay solidez en las distintas organizaciones de Chiapas, con cualquier rumor se tambalea ese gobierno. Este gobierno está a prueba de rumores, chismes e intrigas. Si lo que se buscaba era fortalecer al gobernador Albores, se logró con creces.
Albores Guillén, que desde un principio de la entrevista insistió en tratar el tema del EZLN, ahora pudo explayarse y sostuvo que su postura hacia el grupo rebelde será la de ''no estorbar'', y que ''habrá un gran respeto'' hacia los zapatistas, aunque agregó que el trato hacia él no ha sido recíproco, sino con ''muchos calificativos''.
Pero, aclaró, ''yo soy un hombre de Estado que no asume actitudes de orden personal. Al contrario, el EZLN es un movimiento legítimo, que tiene mi mayor respeto, pues gracias a ese movimiento estamos transformando al estado de Chiapas, y gracias a ese movimiento soy gobernador de Chiapas''.
Insistió: ''En serio, no soy un obstáculo para la negociación, yo quisiera dar todo lo que puedo, si no violentamos la estructura jurídica, la constitucionalidad, el respeto a los chiapanecos. Y si podemos hacer algo para ayudar y coadyuvar, lo haremos con mucho gusto''.
-ƑEntre esas cosas está desmilitarizar la zona de conflicto?
-Eso no está en mis manos. Respeto mucho a intelectuales, a comunicólogos de México y voy a hacer hasta lo imposible por demostrarles con los hechos que no soy una especie de contrainsurgencia, o que una de mis tareas específicas sea obstaculizar al EZLN.
Mary Robinson tendrá
todas las facilidades...
En ese sentido, aseguró que su gobierno dará todas las facilidades a la alta comisionada de la ONU, Mary Robinson, para que cumpla con su misión en Chiapas y visite las comunidades que desee.
-ƑIncluso la zona de conflicto?
-Por supuesto. Es una zona tranquila en el estado, y además es un gran mérito de todos. No hay una actitud del EZLN de querer crear conflictos en Chiapas. Soy el primero que lo reconoce, la actitud del EZLN ha sido de responsabilidad, de un gran sentido de responsabilidad. Aunque siempre aparece el gobernador como enfrentado a él, eso no es cierto; mi gobierno no es contrainsurgencia, no hay una actitud voluntariosa o irresponsable del gobernador, al contrario, mi interés es sumarme a la insurgencia social de Chiapas''.