* Trabajos al interior de El Barzón para unificarse


Barbosa, dispuesto a reunirse con el gobernador de Jalisco

* Pidió a Cárdenas Jiménez no manipular los hechos del 4 de noviembre

Cayetano Frías, corresponsal, y Matilde Pérez U., enviada, Guadalajara, Jal., 11 de noviembre * El dirigente de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios El Barzón, Maximiano Barbosa Llamas, dijo que no es un mártir, sino que defiende el derecho de manifestación de los integrantes de la organización y exhortó al gobernador del estado, Alberto Cárdenas Jiménez, a que "no intente manipular con mentiras" los acontecimientos del 4 de noviembre.

En respuesta a las declaraciones del gobernador respecto a que Barbosa Llamas "es capaz de todo" y luego de que fue señalado como presunto autor de amenazas contra de uno de los familiares de Cárdenas Jiménez, el barzonista rechazó estar involucrado en ese asunto. "No es creíble lo que el gobernador dice, me da pena que tengamos un mandatario que no tenga la suficiente hombría para responder por lo que hace", aclaró.

Con visibles muestras en el rostro de la golpiza recibida, el también diputado federal dijo estar dispuesto a reunirse públicamente con el gobernador y un grupo de abogados y magistrados para, fuera de los intereses del gobierno estatal y de los ganaderos, definir quién tiene la razón en relación con el reconocimiento de la Unión Ganadera de la Costa, situación que provocó la protesta de los barzonistas.

"Al gobernador Cárdenas Jiménez se le ha hinchado la boca de decir que está dispuesto al diálogo, pero no ha dado la cara, por eso queremos esa reunión", abundó. Hoy, en los diarios locales, el gobierno estatal publicó varias fotografías en las que aparece el barzonista "antes de ser golpeado" y después en una camilla, ensangrentado, luego de "bajar de una camioneta de sus compañeros".

Barbosa Llamas narró los hechos del 4 de noviembre: "Tengo grabaciones en las que el gobernador Cárdenas Jiménez y el secretario general de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez, ordenaron la agresión. Minutos antes, éste me habló por teléfono y me dijo que el asunto del cobro (por el traslado y venta del ganado) ya estaba arreglado; nosotros tendríamos que pagar 10 pesos por cabeza y a cambio nos darían un recibo del gobierno del estado".

Agregó que los barzonistas pagarían solamente lo que estuviera "encuadrado en la ley", pero Guzmán Pérez, "con tono amenazante me advirtió: yo nomás te digo, vamos a ir con todo". A ocho días de la golpiza, Barbosa Llamas aludió a su derecho a la vida, no a su fuero como diputado federal, porque el ataque -dijo- "fue un intento de asesinato y el gobernador tiene fuero para realizar su trabajo, no para delinquir".

Explicó que por los acontecimientos, la exigencia del reconocimiento a la unión ganadera barzonista es muy distinta a la agresión. Ahora -abundó- el gobierno del estado pretende entablar una lucha de clases de banqueros y empresarios contra los barzonistas y el pueblo.

Al referirse al respaldo que las cámaras y organismos empresariales han brindado al gobierno estatal, así como a las supuestas pérdidas superiores a los 100 millones de pesos que reportan los comerciantes del centro de la ciudad, Barbosa Llamas anunció que la próxima semana, el movimiento barzonista presentará una denuncia ante la Secretaría de Hacienda para que los audite y compruebe si están pagando puntualmente sus impuestos.

Por la mañana, en conferencia de prensa, el presidente de la Coparmex Jalisco, Guillermo Martínez Mora, anunció que un grupo de empresarios se reuniría con el gobernador para exigirle la aplicación de la ley en relación con el problema barzonista. Aclaró que el respaldo que ofrecen es a la institución y no a los funcionarios, pues si alguno de ellos resultara responsable, sin importar su nivel, también debe aplicarse la ley.

Los dirigentes del Barzón Confederación, Unión y Agavero informaron que el 20 de noviembre realizarán un congreso para anunciar que su lucha es la misma y está por encima de cualquier proyecto personal y partidista. Indicaron que no se agruparán en una sola organización, pero mostrarán madurez para construir un frente o alianza que les dé poder de interlocución ante el gobierno y los candidatos presidenciales.

Alfonso Ramírez Cuéllar, dirigente del Barzón Unión, dijo que los dirigentes regionales, estatales y nacionales están trabajando actualmente para lograr esa unidad, aunque "no ha habido una plática formal". Esa alianza no es únicamente entre los productores del campo, se pretende ampliar a otros sectores de la población e incluso platicar con la Asociación Nacional de Gobernadores para buscar soluciones a la problemática social y económica del país.

Maximiano Barbosa Llamas comentó que los problemas en el campo volvieron a unir a todos los barzonistas y dirigentes de otras organizaciones de deudores. "Esa alianza se constituiría en un espacio político de consulta al cual se invitaría a los candidatos presidenciales para que nos escuchen y con argumentos analicen el problema de la cartera vencida", aseguró el líder.

Destacó que en este momento los deudores, al unirse, pueden reconsiderar su fuerza y con razonamientos y testimonios sensibilizar al gobierno federal sobre el apoyo que otorgará al IPAB, que beneficia a mil 200 empresas, mientras que los banqueros promueven 180 mil denuncias contra pequeños deudores que sólo significan el 10 por ciento del total de este quebranto. Sin embargo, mencionó que esos juicios no se extienden a los grandes empresarios.

René Beas, dirigente del Barzón Agavero, se manifestó a favor de hacer a un lado las diferencias entre dichas organizaciones para volver a coincidir en la meta de hace seis años de resolver el problema de la cartera vencida. Señaló que no es justo que la banca haya resuelto sus problemas mientras que 10 millones de pequeños deudores con cartera vencida tengan que pagar también los 120 mil millones de dólares que se entregó al IPAB.