Ť Preocupante, el modelo gerencialista: Sguissardi
Se juega en la UNAM el futuro de la universidad pública de AL
Ť Es ejemplo a seguir por su régimen de autonomía y gratuidad, dice el experto brasileño Ť FMI y BM buscan convertirlas en empresas
Claudia Herrera Beltrán * Experto en el tema de la educación superior, el filósofo brasileño Valdemar Sguissardi expresa su preocupación ante el modelo económico "gerencialista" que opera en América Latina, y que en los últimos años está orillando a la universidad pública a convertirse en una "especie de empresa". En Brasil, refiere, hace poco se abrió una facultad de estudios superiores con acciones en la Bolsa de Valores, y Chile es considerado hoy un país "ejemplar" por su modelo privatizador de la educación.
En este contexto enmarca el conflicto de la UNAM, en el que ųdiceų los ojos de todas las instituciones de educación superior latinoamericanas están puestos, pues de su desenlace dependerá el rumbo de las universidades públicas de la región, porque además de ser la institución más importante por su matrícula, la máxima casa de estudios es un modelo a seguir en cuanto a su régimen de autonomía y de gratuidad educativa.
En la entrevista que dio a La Jornada durante su corta estancia en México, el doctor en Ciencias de la Educación por la Universidad de París hace un detallado análisis del impacto de las medidas que define como neoliberales o conservadoras, y que a su consideración han provocado problemas, que en su país se han traducido en la diferenciación entre universidades pobres y ricas, y en los crecientes obstáculos que enfrentan los jóvenes brasileños para acceder a los estudios superiores.
Sguissardi ha vivido muy de cerca los problemas de la universidad pública. Hasta hace diez años su especialidad era el tema de la educación popular y para adultos, pero cuando participó en un movimiento de democratización de la Universidad de San Carlos comenzó a escribir artículos acerca del autoritarismo en las instituciones educativas, y terminó por dedicarse de lleno a investigar ese nivel de enseñanza.
Para explicar el origen de las políticas de educación "privatizadoras", el autor de seis títulos sobre el tema se remite al modelo económico que prevalece en la región. Su fórmula es simple: el Estado se reduce y corta los presupuestos de los servicios que benefician a los trabajadores, como son la salud y la educación, pero no hace lo mismo con el capital, ya que "en Brasil se salvan todos los bancos, y en México parece que pasa lo mismo".
A fin de cuentas, dice, es un modelo derivado de las directrices del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial y que luego se traslada a la educación. Pero que en su opinión, no se trata más que de políticas "gerencialistas" que pueden ser útiles para la iniciativa privada, pero no para instituciones universitarias.
El discurso gerencialista se distingue, según el catedrático de la Universidad de Piracicaba, porque promueve la valorización de lo privado sobre lo público y sataniza lo colectivo sacralizando el mercado. Sus consecuencias, expone, son que las personas empiecen a ser culpadas porque no consiguieron estudiar en la universidad o no hallaron empleo, pues conciben que es una responsabilidad individual, como comprar un zapato o un sombrero.
El saber, visto como una mercancía
Afirma que sucede lo mismo en el terreno de la educación. "Se considera el saber como una verdadera mercancía, lo que hace que con el tiempo las universidades sean vistas como una empresa y no como una institución que interesa al colectivo y que es de valor universal".
Señala que de acuerdo con esta lógica es como se aumentan las cuotas en las universidades públicas, haciendo de ellas "agencias" que dividen su estudiantado en dos tipos: los que pagan y son ciudadanos plenos, y los becados que deben quedar agradecidos al que cubrió sus estudios, siendo que "las cuotas ya están liquidadas por los fondos públicos".
ƑCómo entender esta corriente privatizadora en la educación? El investigador brasileño la sintetiza en las cuatro recomendaciones que el Banco Mundial hizo en 1994 respecto a la educación: la diferenciación institucional, que las casas de estudio diversifiquen sus fuentes de financiamiento, redefinición del papel del Estado en la enseñanza superior y la adopción de políticas que otorguen prioridad a los objetivos de calidad y equidad.
Asegura que estos lineamientos no sólo se han seguido en la región, como sucede en Chile, que recibe loas del BM y del FMI por su política privatizadora, que en ese país hasta hace temer la aparición de la "universidad de las multinacionales", sino que estas directrices han generado consecuencias "desastrosas" para los sistemas universitarios latinoamericanos, y como muestra revisa el caso brasileño.
Brasil fue el último país latinoamericano en entrar en el proyecto neoliberal, pero lo hizo con tanta fuerza que, por ejemplo, el presidente Fernando Henrique Cardoso privatizó en cinco años lo que le llevó 20 años al tatcherismo en Inglaterra. En ese marco, señala, se dan los planes de los últimos años que apremian por crear dos tipos de universidades: las de investigación y las de enseñanza, y por convertirlas en una suerte de empresas estatales disfrazadas de organizaciones sociales.
En ese entorno es como recientemente se creó en Brasil una Facultad de Administración con acciones en la Bolsa de Valores de Sao Paulo, y que depende del Banco Factor y de una consultoría. Con ello, dice, parece que se está alcanzado lo que se creyó difícil: que empresas como Fiat o General Motors llegaran a tener sus propias universidades.
Más allá de las propuestas gubernamentales que han provocado fuertes polémicas en Brasil, explica que hay otras medidas que ya son una realidad, como el examen de ingreso a la licenciatura, que cada año da aceso a las aulas a 800 mil jóvenes, pero deja fuera a dos millones. Además, esta evaluación ha generado toda una "industria de cursiños" (cursos preparatorios para la entrada a la universidad) y ha provocado la elitización de las carreras de mayor demanda, a las que tienen acceso sólo los ricos de Brasil, lo que ųdiceų es una contradicción de la universidad pública, que debiera estar atendiendo a los más pobres.
Hace tres años, Brasil comenzó a aplicar lo que en México se denomina examen general de egreso a licenciatura, que en su opinión ha demostrado que las universidades públicas son mejores que las privadas (por las calificaciones de sus egresados), pero también ha tenido resultados "desastrosos" al clasificar a las instituciones.
El problema es que a los estudiantes que provienen de las universidades peor calificadas se les discrimina cuando solicitan un empleo, lo que demuestra que "este modelo meritocrático no funciona porque crea una competencia de tipo comercial".
En Brasil se hubiera buscado intervenir desde el principio
Invitado a México para participar en un congreso de investigadores en educación superior, Sgissardi es cauteloso al dar su opinión sobre el conflicto de la UNAM, pues considera que necesita estudiarlo, pero no deja de manifestar los aspectos que le sorprenden. Menciona que en Brasil, en una situación así, las organizaciones de científicos, académicos y rectores hubieran buscado intervenir desde el principio con discusiones y alternativas de solución.
La diferencia respecto a México, según se desprende de sus comentarios, es que en Brasil existen tres organizaciones educativas fuertes que han sido fundamentales para detener iniciativas gubernamentales perjudiciales. Estas son la Sociedad Brasileña para el Progreso de la Ciencia, que afilia a 10 mil científicos; la Asociación Brasileña de los Docentes Universitarios, y la Asociación Nacional de los Dirigentes de Universidades, que aglutina a 41 rectores.
ųƑQué papel juega el conflicto de la UNAM en la educación de América Latina?
ųDesde mi punto de vista, los problemas de la UNAM pueden afectar el futuro de la universidad pública en América Latina dada su importancia y su papel de liderazgo en la investigación, sobre todo en una región donde son pocas las instituciones con una estructura consolidada de enseñanza e investigación, como la que tiene la máxima casa de estudios. En ese sentido, cuanto más se ataque a la universidad pública más se fortalece a la privada y a las políticas privatizadoras y mercantilizadoras de la enseñanza.
ųƑPor qué es tan importante lo que suceda en la máxima casa de estudios?
ųLa UNAM es la universidad pública más grande de América Latina, tiene 300 mil estudiantes, seis veces más que la universidad brasileña más grande, que es la de Sao Paulo, con 40 mil alumnos. Además, su modelo de autonomía es ambicionado por la comunidad académica de universidades públicas, como la brasileña. En Brasil el Estado establece cómo se gasta el presupuesto universitario y designa a los rectores.
ųSin embargo, hay rectores de universidades públicas mexicanas que han llegado a decir que los problemas de la UNAM les afectan, pero no tanto, porque el conflicto no se ha extendido a sus escuelas.
ųPienso que les afecta al menos indirectamente. Si la situación se complica y se cierra la universidad provocará problemas en todo el sistema, no sólo el mexicano. En Brasil nos preocupa mucho, y lo mismo nos pasó cuando Chile hizo cambios; nos pusieron en alerta de las medidas privatizadoras.
Finalmente, todas estas políticas están ligadas, como sucede en la economía, todo lo que el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional dictan son políticas copiadas una de la otra.