* Las puertas están abiertas para quienes deseen participar en el cambio: PRD

Estaba anunciado que ganaría Labastida: Cárdenas

* "La baja afluencia de votantes demostró que la gente no puede ser engañada con la mercadotecnia"

Juan Antonio Zúñiga M. * Los resultados de la elección interna del PRI no representan ninguna sorpresa porque ya estaba anunciado que Francisco Labastida sería el ganador, consideró Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, candidato de la coalición PRD-PT a la Presidencia de la República.

Entrevistado vía telefónica por una televisora, Cárdenas Solórzano puntualizó que el PRI no cambiará por haber sometido a elección la designación de su candidato, porque "el propio Zedillo había anunciado que ganaría Labastida".

En tanto, el Partido de la Revolución Democrática dio a conocer ayer por la noche un documento en el que afirma que el resultado del proceso interno priísta no es otra cosa que "la crónica de una designación anunciada, y que fue despreciada por los ciudadanos que fueron convocados a votar para convalidar una designación realizada desde Los Pinos".

La gente no acudió en el número esperado a las casillas, advirtió la directiva perredista, "por lo que es altamente probable que se intente elevar artificialmente el número de sufragantes" pero, de cualquier manera, en la realidad -apuntó-, "el resultado del intento priísta será en todo caso su techo electoral, con el que inician su campaña y con el que terminarán, pues nada nuevo pueden ofrecer después de cuatro meses de campaña nacional que mostró el difícil proceso de democratización de un partido que nació del Estado y no está en condiciones de pasar a una vida democrática plena".

Sobre el mensaje del Presidente, transmitido en vivo por televisión a nivel nacional, el Comité Ejecutivo Nacional del PRD consideró que el titular del Poder Ejecutivo "desafortunadamente asumió el papel de vocero de su partido", y puntualizó: "Es lamentable que el apresurado pronunciamiento del Presidente de la República no haya tenido antecedentes cuando otros partidos políticos hemos realizado procesos electivos".

Las cifras difundidas por el PRI, según las cuales se instaló 99.8 por ciento de las casillas, "son evidentemente maquilladas", porque a mediodía se reportaba que esa proporción era de 85 por ciento, señaló.

La dirección nacional del PRD explicó que "el fracaso priísta demuestra que en las elecciones del 2000 los ciudadanos buscarán una alternativa diferente", e interpretó que la actitud adoptada por el jefe del Ejecutivo deja dos mensajes claros: "Que el Presidente de la República será el primer soldado político del PRI en el 2000 y que no hay nada en las cifras (de ayer) que lleve al triunfalismo".

Agregó que la baja afluencia de votantes "mostró hasta qué grado la sociedad mexicana no puede ser engañada con prácticas de mercadotecnia", y evaluó los resultados de la contienda interna priísta como "una buena noticia para la oposición", e identificó a Francisco Labastida Ochoa como "un candidato muy vulnerable". El desarrollo de esta contienda "demostró a muchos militantes priístas que la contienda no fue equitativa", y precisó que las puertas de su partido están abiertas a los mexicanos que deseen participar en el proceso de transformación democrática del país".

* Fue una farsa el proceso para elegir candidato

Resultados "pobres" en el PRI, pese al gran gasto: PAN y PRD

* La baja afluencia de votantes revela que nadie les cree, señalan

Raúl Llanos y Bertha Teresa Ramírez * Para las directivas locales de los partidos de la Revolución Democrática y Acción Nacional (PRD y PAN), los resultados obtenidos en las votaciones internas del Revolucionario Institucional (PRI) "fueron pobres en relación con las carretadas de dinero que se gastaron en la campaña sus tres precandidatos".

Coincidieron en que fue una "farsa", y externaron que la baja afluencia de votantes revela que "nadie les cree" en su supuesta democratización y cambio.

Carlos Imaz, líder del PRD-DF, indicó: "Prácticamente en toda la ciudad se observaron mesas receptoras del voto vacías. No hubo una sola cola, pero como son expertos, le van a poner resultados fantasmas, y aunque no haya votos en las urnas las llenarán con números. Seguramente hay un pacto entre los mapaches, tlacoaches y conejos para no decir lo que hicieron, pues son expertos para ello".

Agustín Guerrero, secretario de Comunicación e Imagen de la misma dirección perredista local, consideró que los priístas "están muy hechos al dedo, y eso es lo que cuenta, de ahí que quien es señalado siempre va a ganar; es decir, todo se preparó para Jesús Silva Herzog, por eso es que la lista de las casillas se publica el mismo día de las votaciones y nunca se hicieron atractivas las precampañas".

Por su parte, Andrés Manuel López Obrador, aspirante perredista al Gobierno del DF, expresó: "La elección priísta es una farsa, una mascarada, un experimento de nuevas trampas y trucos para sus mapaches. Aunque la mona se vista de seda, mona se queda".

En entrevista, comentó que la votación priísta fue un "torneo de tramposos", en la cual Roberto Madrazo y Francisco Labastida "ensayaron nuevos métodos de defraudación electoral", y si hubo poca gente en sus urnas es porque el pueblo no es tonto, "tonto es el que piensa que así es".

Simulación anunciada: Creel

Santiago Creel, aspirante del PAN a la jefatura del Gobierno del DF, señaló que el proceso interno del PRI resultó una simulación anunciada, y los mejores exponentes de ello fueron los propios candidatos a niveles local y nacional, porque volvieron a recurrir a prácticas como el clientelismo y el corporativismo, "y eso resume una nueva modalidad del dedazo".

El legislador federal dijo que en el PRI se anunció un presunto cambio para no cambiar y quedar exactamente igual.

Indicó que el proceso interno del tricolor es un anticipo de lo que harán los priístas en las elecciones del 2000, por lo que ciudadanos, partidos y candidatos deben estar atentos. "Tendremos que estar alertas ante las prácticas de clientelismo y corporativismo que intentarán repetir", agregó.

Por su parte, Fernando Pérez Noriega dijo que las elecciones en el Revolucionario Institucional confirmaron que desde el principio la fórmula Labastida Ochoa-Jesús Silva Herzog era la oficial. Lo que hizo el PRI fue toda una farsa, indicó, en la que ha tratado de confundir a los ciudadanos para tratar de convencerlos de que son ahora democráticos. "Lo más grave de todo esto es lo innecesario y costoso que resultó ese proceso, cuando todos ya sabíamos quiénes eran los cantados que iban a ganar".

Agregó que el PRI demostró que no ha cambiado y es el mismo de siempre, "por lo tanto, la única opción en el 2000 será el PAN".

Por su parte, el aspirante panista Salvador Abascal señaló que el proceso interno del PRI resulta peligroso, pues servirá a ese partido para tener un control de los votos ciudadanos con miras a las elecciones presidenciales del 2000, a partir del registro de los votantes a los que se les exigió la tarjeta de elector para emitir su sufragio en esos comicios internos.