Ť Comentaron el libro Las industrias culturales...


El reto es comprender cómo se retroalimentan las identidades

Ť Incluye ensayos de doce especialistas procedentes de cinco países

Ť Primordial, superar la falta de información, dijo García Canclini

Miryam Audiffred Ť El dilema de las sociedades dejó de ser la globalización o el nacionalismo. Las ideas apocalípticas que vaticinaban el fin de las identidades se han hecho a un lado ante el reto de comprender cómo funciona la retroalimentación entre una cultura y otra.

Conscientes de la escasez, en México, de textos que analicen ese intercambio cultural, investigadores e intelectuales como Néstor García Canclini, Raúl Trejo Delarbre y Sealtiel Alatriste, decidieron reflexionar sobre el papel que la industria editorial, la televisión, la música e Internet juegan en el contexto de las relaciones de los países latinos con los europeos y Norteamérica.

Las industrias culturales en la integración latinoamericana, texto publicado por editorial Grijalbo, es el resultado de sus juicios y consideraciones y el tapiz sobre el que se plasman los vínculos de la producción cultural con la reorganización de los mercados y los hábitos de consumo.

''Los acuerdos de libre comercio de los años noventa hicieron más evidente la importancia de las comunicaciones masivas para el conocimiento recíproco, la integración y la segregación entre naciones", dijo durante la presentación Néstor García Canclini, coordinador del proyecto que agrupó a 12 especialistas de México, Uruguay, Venezuela, Perú y España.

''En la mayoría de los esquemas subregionales de integración, la dimensión cultural está formalmente presente pero se halla lejos de ocupar puestos prioritarios en las agendas de negociación por ser considerada un aspecto suntuario y de fin de semana."

Investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, aseguró que las industrias culturales se extienden ųhoy más que nuncaų al conjunto de la vida cotidiana e influyen en la organización sociopolítica de cualquier país. En las naciones europeas la producción artística y comunicacional alcanza 3 por ciento del producto interno bruto y en países como Brasil, México y Argentina la cifra oscila entre 1 y 3 por ciento.

Desechar la idea del mercado homogéneo

Aspectos culturales como la música adquieren una gran importancia económica. Tan sólo en 1996 la producción musical alcanzó 40 mil millones de dólares.

Ante estas nuevas dimensiones de la cultura, García Canclini comentó que se requiere diseñar políticas que no sólo pongan énfasis en el patrimonio histórico y artístico. ''La internacionalización de la producción cultural genera la necesidad de promover acuerdos sobre aranceles, propiedad intelectual e inversiones extranjeras", sostuvo. ''Sin embargo, lo primordial es superar la falta de información".

Comentado la noche del jueves, en el Centro Cultural Isidro Fabela, el libro contiene un análisis sobre el mercado editorial en lengua española realizado por el escritor ųy editor de Alfaguaraų Sealtiel Alatriste, quien mencionó que urge desechar la idea del mercado homogéneo.

''Han desaparecido los pilares que permitieron el crecimiento del mercado común: monedas estables, amplios plazos de crédito y producción de libros en una lengua donde los matices locales eran tolerables para todos los lectores", aclaró.

''Hoy, casi no hay distribuidores que tomen el riesgo de importar libros extranjeros, pues se desconoce la amplitud del consumo interno y no hay garantías cambiarias ni de crédito."

Especialista en medios electrónicos, Raúl Trejo Delarbre aseguró que en las condiciones actuales de globalización es imposible saber si la cultura está en riesgo o no. ''Se requieren nuevas fórmulas para explicarla y comprenderla", dijo.

Y entre estos nuevos lenguajes está el fomentado por Internet que, no obstante sus posibilidades y penetración ųse afirma que hay cerca de 8.5 millones de latinoamericanos conectados al ciberespacioų no ha logrado colarse en las prioridades educativas ni tecnológicas de los países de la región.