Ť Afición esperanzada


Reciben al nuevo timonel como si fuera el Mesías

Marlene Santos A. Ť Los que se definen como americanistas "de hueso amarillo", águilas hasta la médula, lo vieron llegar como a un Mesías salvador. "Yo creo que él sí acabará con los diez años de sequía, para mí que es el efectivo", dijo el señor Luis Ignacio Duarte, quien aseguró que llegó ayer a las diez de la mañana para esperar el momento de la presentación del nuevo técnico del América, Alfredo Tena, que se realizó casi al mediodía.

Los vigilantes de las instalaciones de Coapa comentaron que hubo otros más madrugadores, que desde las ocho espiaban detrás de las rejas y fueron formando una fila sobre la banqueta. Cachuchas, llaveros, banderines, playeras y bebidas refrescantes fueron expendidas frente a la puerta principal. La espera tuvo premio y uno a uno fueron ingresando; "ahí tras la reja", les indicaban los guardias previa revisión de pertenencias.

El llamado Capitán Furia, con su figura atlética de cinta negra, activo practicante de taekwondo, llegó hasta la cancha dos, escoltado por los directivos Roberto Chapa y Raúl Quintana, quienes le dieron una camiseta con el número 4, el mismo que portó durante 17 años. Al fondo, siempre detrás de la reja, la multitud estalló en porras, y el grito de "šTena-Tena!" lo atrajo. Manos de niños, jóvenes, hombres y mujeres maduros se extendían a su paso, otras disparaban cámaras fotográficas, o le ofrecían playeras amarillas y plumón para el autógrafo.

Emocionado, Alfredo saludaba caminando de izquierda a derecha, escuchaba frases de bienvenida, de exigencia, de impulso y hasta el reclamo de "ƑPor qué hasta ahora?" "Queremos el título", "te estábamos esperando, tú eres el bueno", "šcampeones o nada!", "švamos por el Puma!", "Tena, eres grande, compadre", "a cortar estos diez años malditos", "šse ve, se siente, Tena está presente!", eran otras frases que retumbaban en sus oídos. Una audaz señora se trepó a la alambrada y soltó el "šQue sí, que no, que cómo chingados no!.."

Fue una recepción memorable, que no se vio con la llegada de Carlos Reinoso, otro americanista de corazón.

--ƑNo te da miedo que depositen tantas esperanzas en ti?

--No, me halaga y me compromete a trabajar al máximo, respondió Tena.