La Jornada martes 2 de noviembre de 1999

Teresa del Conde
Dreyfus: causas del caso*

Parece de película (las hay sobre esto). El 26 de septiembre de 1894, Mme Bastian, trabajadora de la Embajada de Alemania en París, entregó, como lo hacía diario, la papelera del agregado coronel Von Schwarzkoppen al mayor Henri. Este se desempeñaba como segundo jefe de la oficina de contraespionaje del Ministerio de Guerra francés. En el cesto se encontraban unos papeles conocidos como ''le bordereau" (la nota o el balance). Un francés traicionaba a su país, pues se enlistaban cinco documentos secretos, y el autor anónimo proponía venta a los alemanes.

Había cuatro o cinco sospechosos, pero la caligrafía se parecía superficialmente a la del capitán Alfred Dreyfus, arrestado sin mayores pruebas el 15 de octubre de ese año, sometiéndolo a corte marcial. El general Mercier, adverso a Dreyfus, presentó ante la corte documentos secretos que no tenían valor de evidencia, causando impacto. Lo hizo con desconocimiento del prisionero y de su abogado.

El 22 de diciembre Dreyfus fue declarado culpable y condenado a cadena perpetua. El hecho se infiltró a la opinión pública mucho después; el 15 de mayo de 1895 el prisionero fue recluido en la Isla del Diablo, en la costa de Guyana. Allí sufrió malaria, encaneció y no pudo sospechar lo que había sucedido; Dreyfus era judío. Su familia nunca dudó de su inocencia y empezó a moverse. Mathieu, su hermano, sabedor del espantoso error judicial, luchó sin éxito inmediato por la revisión del caso. Empezaron las evidencias. El mayor Picquart, oficial en el Ministerio de Guerra, era cabeza de la sección informativa del Servicio Secreto y no sólo carecía de toda conexión con la familia Dreyfus, sino que no le simpatizaban. Era honesto y quería encontrar el porqué de la traición y de la condena, que pudo ser de muerte.

En marzo de 1896, al parecer mediante la misma Bastian, se vio en posesión de lo que fue una carta certificada que Schwarzkoppen había despedazado, sin abrirla, arrojándola al cesto de la basura. Esta carta es conocida como le petit bleu y estaba dirigida a otro oficial francés, el mayor Esterhazy. Le petit bleu probaba que él se encontraba asalariado por Schwarzkoppen. Además, se comprobó que llevaba vida disipada y tenía deudas considerables. Adicionalmente ''le bordereau", erróneamente atribuido a Dreyfus, correspondía en mucha mayor medida a la caligrafía del endeudado.

Picquart presentó la información ante sus superiores, generales De Boisdeffre y Gonse, que se negaron a reabrir el caso y le prohibieron seguir investigando. Picquart afirmó que ''no podía irse a la tumba con esa información'' y fue trasladado a Túnez. Entre tanto, lo que es propiamente hablado ''el caso" estalló el 9 de noviembre de 1897. Mathieu Dreyfus denunció a Estherhazy y Le Figaro publicó fotografías acusatorias. Picquart fue traído de Túnez a París. Las pesquisas siguieron y Estherhazy fue consignado a corte marcial, pero se le aseguró exculpación. Entonces se inició una campaña de prensa fenomenal contra los revisionistas del caso, calificándoseles de ''antipatriotas", pero ''el caso" había ganado adeptos entre los intelectuales, que se expresaron mediante los periódicos L'Aurore y Soecle.

Emilé Zola publicó su famosa carta abierta J'Acusse (1898) dirigida al presidente de la República; se le consignó por difamación y condenó a un año de prisión. Se refugió en Inglaterra. Su acusación fue maniobra de gran habilidad, porque obligó a los abogados a reunir pruebas acerca de Estherhazy. La sociedad francesa se dividió en dos: los monárquicos, los nacionalistas y católicos eran antidreyfusistas, los intelectuales, socialistas, republicanos y algunos aristócratas, que abogaban por los derechos del hombre, eran dreyfusistas.

Henri, el alterador de pruebas, ante las evidencias se suicidó. Esto fue decisivo y la corte anuló la sentencia de 1894. En septiembre de 1899 se abrió, en Rennes, un nuevo juicio. Hasta 1906 Dreyfus se encontró totalmente rehabilitado. Pasó a prestar servicios como oficial en Saint Dennis terminados en 1907. En julio de 1908, las cenizas de Zola fueron trasladadas al Panteón (la iglesia neoclásica de Santa Genoveva) donde reposan los restos de los ilustres de Francia. Dreyfus asistió a la ceremonia y un periodista antisemita le disparó dos tiros, sin acertar; sólo lo hirió levemente. Dreyfus sirvió en la Primera Guerra Mundial y fue promovido a teniente coronel en 1918; después le concedieron la Legión de Honor. Para algunos de los lectores del libro publicado por Taurus, las causas del caso Dreyfus pueden ser desconocidas. De aquí esta nota, referida al libro comentado en la anterior.

 

* Continuación de "Historia cultural", artículo publicado el pasado 19 de octubre.