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México, D.F. lunes 1 de noviembre de 1999
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Manifiestan apoyo al poeta argentino Juan Gelman

Señora directora: Los editores de Ojarasca nos unimos a la campaña continental de respaldo al poeta argentino Juan Gelman en la búsqueda de su nieto o nieta en Uruguay. Los genocidas también fueron robachicos. El presidente Julio María Sanguinetti está obligado a responder. Es lo menos que un jefe de Estado puede hacer si pretende alguna legitimidad.

Juan y Mara, su compañera, quienes buscando y luchando han perdido otros hijos y encontrado otros nietos, merecen la reparación y el desagravio. Ellos dos expresan el nunca más a las dictaduras, el fascismo, las desapariciones, las torturas, el estado de excepción en nombre de una ley y un orden al servicio del odio, la mentira y la miseria moral. Gobiernos así, nunca más, en ninguna parte.

Hermann Bellinghausen, Eugenio Besmejillo, Rafaela Moreno, Yuriria Pantoja Millán y Ramón Vera


Protestan por agresión a coordinadora del Centro Pro

Señora directora: Mucho le agradeceremos la publicación de esta carta.

Doctor Ernesto Zedillo,
Presidente de la República.

La Asociación Nacional de Abogados Democráticos hace pública su enérgica protesta por la agresión perpetrada sobre la persona de la abogada Digna Ochoa, quien es coordinadora jurídica del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, sufrida el día 29 de octubre en su domicilio particular, que junto al daño moral y físico, sabemos que esa práctica corresponde a una amenaza hacia la labor legal y humana que ejerce. Además, no es la primera vez que esto ocurre tanto a la abogada como a ese organismo no gubernamental.

En estos tiempos de inseguridad pública en el país, de incumplimiento de la ley e impunidad de las autoridades, lo que es reconocido por su propio gobierno, nadie puede permanecer indiferente ante estas agresiones, menos cuando la labor de la abogada y esa ONG es para combatir las violaciones de los derechos humanos. Por lo cual exigimos tanto el esclarecimiento de esas agresiones y el respeto a la integridad de Digna Ochoa y de los demás miembros del Miguel Agustín Pro Juárez, así como el pronto castigo a los responsables.

Por la ANAD: Maricarmen Fernández, Estela Ríos, Ernestina Godoy, María Eugenia Meza, Yolanda Higareda, Carmen Merino, María Luisa Campos, Margarita Alvarez, Bárbara Zamora, Adela Salazar, Susana Codina, María Rosa Arranz, Oscar Alzaga, Adalberto Saldaña y 62 firmas más


Alerta a brigadistas que ocupan la Facultad de Ciencias

Señora directora: Ruego a usted se sirva publicar la siguiente carta.

A la Comunidad Universitarita, A la Opinión Pública.

Con el propósito de coordinar las acciones relacionadas con la consulta organizada por el CGH el pasado viernes 22 de octubre la Asamblea de la Facultad de Ciencias decidió ocupar un área de trabajo destinada a preservar las colecciones del Herbario y el Museo de Zoología de la propia facultad. Dicho acto pone en riesgo no sólo el material allí almacenado, sino también la salud de los ocupantes, debido a que la preservación de dichas colecciones requiere de fumigaciones periódicas con sustancias con distinto grado de toxicidad y que incluyen insecticidas como Responsar SC125, naftalina, y otras más.

Preocupados tanto por el bienestar de los ocupantes como por el destino de las colecciones de animales, hongos y plantas allí conservadas, el pasado 26 de octubre una comisión de profesores del Departamento de Biología habló con los brigadistas para explicarles el riesgo a los que se estaban sometiendo, al permanecer durante periodos largos en dicha área y por el consumo de alimentos en la misma. A pesar de nuestras advertencias otros brigadistas volvieron a dicho lugar, ya que la Coordinación de Brigadas decidió no darse por enterada de nuestra preocupación. Por ello, los profesores del Departamento de Biología reiteramos nuestro llamado, tanto a quienes participan en las brigadas como a quienes las coordinan, a respetar el área de las colecciones no solamente para preservar el patrimonio científico de nuestra facultad sino, sobre todo, la salud y el bienestar físico de los brigadistas.

Por la Comisión de Profesores Dr. Antonio Lazcano-Araujo Reyes


Refuta omisiones a la carta de la licenciada Bárbara Zamora

Señora directora: El 21 de octubre este prestigiado diario, a su digno cargo, publicó una carta firmada por la licenciada Bárbara Zamora, en la que pretende refutar las aclaraciones del suscrito a su anterior misiva. Por última vez, me permito precisar lo siguiente:

Las aseveraciones de la licenciada Zamora tienen un contenido fundamentalmente ideológico, que si bien es respetable, se aleja del análisis estrictamente jurídico:

1. Antes de la reforma de 1992, los ejidatarios eran propietarios de sus tierras, pero esa propiedad estaba sujeta a un régimen legal paternalista, que les imponía múltiples limitaciones a su derecho. Esa propiedad les confería únicamente el derecho de trabajar personalmente o con su familia sus tierras, y se les privaba de su derecho "de propiedad" si no trabajaban la tierra durante dos años consecutivos.

2. La licenciada Bárbara Zamora omitió en su primera carta parte del texto legal a que aludía. Ahora omite referir la realidad, pues el carácter de inalienables, imprescriptibles e inembargables de las tierras de los núcleos agrarios que la legislación anterior prevía, no evitó que ejidatarios y comuneros acudieran a conductas simuladas, enajenando o arrendando sus tierras, creando problemas de conflictos entre núcleos y asentamientos humanos irregulares. Tan es así que el Estado tuvo que crear la Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra, para regularizar a través de la expropiación los asentamientos irregulares.

3. El texto del artículo 51 de la ya abrogada Ley Federal de Reforma Agraria, que ahora sí incluyó la licenciada Zamora, establecía la prohibición de arrendar la tierra o ceder los derechos, so pena de perderla. Esto implicaba una "propiedad" disminuida, que se tradujo en mantener a las tierras de propiedad social al margen de la economía.

4. La seguridad jurídica a la que se refiere la licenciada Zamora estaba permanentemente en riesgo, con motivo de la creciente demanda de tierras, y la imposibilidad de satisfacerla. Era necesario poner fin al reparto agrario para terminar con la zozobra, y acceder a una nueva etapa en la que todas las formas de tenencia cuenten con la necesaria seguridad jurídica; esto es el fundamento básico de la reforma de 1992.

5. Es importante aclararle a la licenciada Zamora que cuando los ejidatarios adquieren el dominio pleno de su parcela, conservan la propiedad de la misma y pueden disponer libremente de sus bienes, sin que ello implique la transformación del régimen ejidal, no representa ningún cambio estatutario o de organización. Más aún, la nueva Ley Agraria prevé que cuando el ejidatario decide vender su parcela, los demás miembros del ejido y el propio núcleo agrario tienen el derecho de preferencia para adquirirla, cuando se trata de la primera enajenación.No era justo que en un régimen de igualdad, los ejidatarios fueran los únicos mexicanaos privados de tener el dominio pleno de sus bienes.

Lic. Gilberto José Hershberger Reyes, Director General de Asuntos Jurídico de la Secretaría de la Reforma Agraria


Respuestas de Petrich a Luis Javier Garrido y Octavio Rodríguez

Señora directora: Por causas ajenas a mi voluntad no me fue posible responder a las cartas aclaratorias de Luis Javier Garrido y Octavio Rodríguez Araujo que se publicaron este sábado. En ejercicio de mi derecho a réplica lo hago ahora.

Ambos tienen razón. La nota aludida sobre el encuentro "La izquierda hoy" no recoge textualmente las citas que exponen en sus aclaraciones.

Sin embargo, la idea de lo expresado está correctamente reflejada en la nota. Garrido hizo un reclamo -justo a mi ver- a los académicos de izquierda por no estar al lado del CGH en su lucha. Eso se lee en la nota, aunque no me pongan 10 en dictado.

Rodríguez Araujo y algunos más fueron críticos al Ejército Zapatista. El dice que sus notas no registran la cita que yo reproduzco. Las notas de mi libreta, en cuya fidelidad confío, pues ellas son el sustento de mi trabajo, registran lo siguiente: "A riesgo de que se me califique como antizapatista, porque ser crítico del zapatismo así se suele calificar, me pregunto: Ƒrealmente propone el EZLN un proyecto democrático de nación, o sólo nos lo pareció al principio?". Me pregunto si sufrí alucinaciones auditivas -y junto conmigo algunos otros asistentes al encuentro- o si Rodríguez Araujo hubiera preferido que lo dicho dentro de un salón de la Universidad Autónoma de Puebla no fuera difundido.

En el medio periodístico conocemos bien de la relación amor-odio entre intelectuales y reporteros. Desde mi propia trinchera anhelo que algún día los primeros puedan dejar de vernos a los segundos como simples taquígrafos de sus declaraciones o reseñistas de sus discursos. Quién sabe. Algún día. A lo mejor.

Quiero aprovechar estas líneas para hacer una aclaración que considero necesaria. En esa misma nota confundí el apellido y origen de Alberto Betancourt. Sin querer lo rebauticé Anguiano y lo ubiqué como de la Universidad de Puebla, siendo que es de la UNAM. Mis disculpas a Alberto.

Por último -perdón por el abuso- me pregunto: ƑTodo esto qué importancia tiene? Ninguna. Hoy en día importa, urge, clamar y reclamar: šRespeto a la defensa de los derechos humanos! šRespeto a la abogada Digna Ochoa!

Blanche Petrich



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