Gustavo Leal F. *
Agendas visibles y agendas ocultas

Muy poco y sin novedad es lo que anuncian sobre la política pública los precandidatos priístas a la Presidencia de la República.

Durante su ``debate'' televisado, la única mención correspondió a Labastida cuando señaló que hereda su sentido de responsabilidad de un médico: su padre, influencia que refrendó en el spot televisivo que propone que todas las mujeres ``tengan un médico que cuide su embarazo'' .

En su ``Decálogo'' de política social, expuesto ante la FSTSE en el estado de México, Labastida constató ``el incremento en el número de derechohabientes que atiende el IMSS; las estadísticas nacionales de esperanza de vida y la equidad de género como compromiso ineludible'' . Aunque reconoce que ``en una sociedad desigual, debemos tener políticas diferenciadas'', en materia de nutrición y salud su ``ambiciosa'' propuesta se reduce a ``reconocer el derecho de todos los niños y niñas menores de cinco años de contar con los nutrientes básicos, incluso desde la etapa prenatal'', además de que ``acercará los servicios médicos a las poblaciones alejadas''. No queda claro si ``la atención a la población de la tercera edad'' incluye atención médica . En 14 Propuestas de Apoyo a la Mujer añadió: ``apoyar a todas las mujeres durante el embarazo y la lactancia y ampliar al 100 por ciento los servicios de salud reproductiva'' . Pero coincide con Madrazo en ``que toda la población tenga a su alcance la medicina básica'' .

Como gobernador de Tabasco, Madrazo fue responsable del Sistema Estatal de Salud ``ideal''; ``escenario de escenarios'' para la planeación: el único, en la Federación, donde coinciden exactamente municipios con jurisdicciones sanitarias, situación que promocionó Alazraki con el spot de las lanchas ``mensajeras de la salud'', indispensables en un lugar de tan intensa comunicación acuática. Ya como precandidato, en gira electoral por Zacatecas, adelantó una propuesta de gobierno: el Programa Nacional de Desarrollo Humano cuyo rubro dedicado a la salud ofrece: ``seguro médico base para todos; atención integral a las mujeres; partos gratuitos en las áreas rurales; ampliar las campañas de planificación familiar y descentralizar los servicios de salud . Numéricamente, fue un poco más allá en su Propuesta para el Desarrollo Humano en México, donde menciona trece veces a la salud y una vez a la seguridad social: ``homologar los esquemas de seguridad social para evitar el trato desigual a los trabajadores que a través de su vida laboral transitan entre sectores'' .

El eje de ambas ofertas --las de Bartlett y Roque son aún más vagas-- se resume en medicina ``básica'' (paquete de servicios esenciales) y descentralización. Son, por tanto, más instrumentación de las políticas sectoriales de Zedillo.

Pero la agenda que demanda la operación digna del Sistema Nacional de Salud, supera la oferta y saldos consignados.

El secretario general del sindicato del IMSS, afirmó que ``el abasto nacional de medicinas es de sólo 80 por ciento en promedio. Persisten las carencias de equipo. En determinadas zonas o unidades de atención no hay instrumentos elementales. Ni siquiera hay suficientes formatos para ordenar análisis y estudios. A un paciente se le da el resultado de una tomografía, pero como se le da en una hoja reciclada ni él mismo valora el tipo de estudio que le van a practicar'' .

El secretario general del sindicato del ISSSTE estableció que: ``uno de los objetivos presupuestales para el sector en el 2000, será canalizar suficientes recursos para que pueda mejorar la calidad del servicio y aumentar la cobertura. No puede seguir siendo una institución con hospitales regionales (como el López Mateos o el 20 de Noviembre) con tecnología de punta, incluso mejores que los privados, contra clínicas y pequeños hospitales con equipo obsoleto, escaso o nulo mantenimiento y bajos salarios'' .

Frente a este horizonte, resulta reconfortante la frescura de la voz de las organizaciones ciudadanas intermedias: ``ya nos cansamos del bajo nivel de las campañas políticas; no aceptamos que los partidos únicamente definan y defiendan su propia agenda; no estamos dispuestos a que se considere a las ciudadanas y los ciudadanos sólo como votantes''.

No será fácil para quién resulte triunfador de la contienda priísta, insistir entonces en ``la urgencia de reformar'' el sistema de salud o en lo ``alentador y complementario al trabajo del gobierno que puede ser el panorama de la medicina privada'' , mientras el Senado examina sin la adecuada presencia clínica la iniciativa que reforma la medicina prepagada donde, al decir del doctor Carlos Pérez Noriega, representante de la Asociación Nacional de Médicos, ``se pretende incorporar un sistema de seguros de salud, como si se asegurara un coche''. ¿Formulará enton- ces otra agenda?

*Investigador de la UAM Xochimilco.