Ť Jorge Tello Peón: los guerrilleros están acéfalos
Circunstancial, la detención de cuatro integrantes del ERPI
Ť Wilfrido Robledo descarta que se hayan infiltrado en la UNAM
Ť Realizarían una "guerra insurreccional" en el 2000, asegura
José Gil Olmos Ť El gobierno federal consideró que con la aprehensión del comandante Antonio y la coronel Aurora queda prácticamente descabezado el Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI); sin embargo, Jorge Tello Peón, ex director del Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional (Cisen) y actual subsecretario de Seguridad de la Secretaría de Gobernación, reconoció que fue "fortuita" y circunstancial su captura, pues en realidad la orden era contra un presunto secuestrador, y en la casa a la que acudieron se encontró al grupo guerrillero.
En tanto, Wilfrido Robledo, responsable de la Policía Federal Preventiva (PFP), comentó que el ERPI tenía el plan de llevar a cabo "una guerra insurreccional" en el contexto de las elecciones del 2000, y que por ello es importante la detención de ambos dirigentes rebeldes, quienes, junto con el comandante Hermenegildo, han firmado los últimos comunicados del grupo, en los que anuncian que actuarán "ojo por ojo" contra el Ejército y la policía.
De la posible presencia del ERPI en el movimiento estudiantil de la UNAM, consideró que no existe, pero que el grupo guerrillero sí ha tratado de reclutar a estudiantes "radicales" en los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH) y en los planteles de la Escuela Nacional de Estudios Profesionales (ENEP).
Ambos funcionarios ofrecieron entrevistas a radio y televisión para explicar la importancia de la detención de Antonio y Aurora el pasado viernes en Chilpancingo. No obstante, en ninguna de ellas explicaron la realización del operativo militar, en el cual no participaron las autoridades de Guerrero, ni hablaron de los golpes que mostraron algunos de los guerrilleros en su presentación en el penal de alta seguridad de Almoloya de Juárez.
Tello comparó la detención de Antonio con las de Genaro Vázquez y Lucio Cabañas, también en Guerrero. "La importancia en términos logísticos es exactamente de la misma magnitud; estamos hablando del dirigente operativo de la guerrilla en Guerrero".
Defendió los avances en los trabajos de inteligencia política del Estado mexicano "para proteger a la sociedad", pues, aseguró, se está trabajando en la formación de los servidores y en las bases legales, y criticó a quienes han cuestionado su existencia.
"Se dice a nivel internacional que los órganos de inteligencia siempre serán cuestionados: cuando hay problemas se cuestiona su eficacia, cuando no hay problemas, su existencia", apuntó.
Como ejemplo de los trabajos de inteligencia, comentó que, de acuerdo con información recabada, el ERPI contó con un millón de dólares para subsanar un presupuesto de 300 mil pesos mensuales para mantener a las "bases operativas" que sostienen al movimiento.
Ese dinero, abundó, el grupo lo obtuvo al cobrar rescates por la liberación de empresarios que secuestró, como Alfredo Harp Helú, Jorge Sekiguchi y Angel Losada.
Sin embargo, sobre el último punto, el almirante Robledo indicó que el ERPI sólo se quedó con medio millón de dólares, pues la cantidad restante fue regresada al EPR tras la escisión sufrida en enero de 1998.
Aseguró que el ERPI tiene seis columnas de insurgentes en Guerrero y que en su proyecto de "guerra insurreccional" para el 2000 han viajado al Distrito Federal, estado de México, Morelos, Coahuila, Tamaulipas, Chihuahua y Nuevo León, con el objetivo de hacer contactos y actuar, pero aseguró que todavía no hay células en esas entidades.
Diódoro Carrasco
Las indagatorias sobre el grupo armado seguirán
Martín Sánchez Treviño, corresponsal, Ciudad Victoria, Tamps., 25 de octubre Ť Las investigaciones en torno al Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI) no han concluido, informó hoy aquí Diódoro Carrasco Altamirano, titular de la Secretaría de Gobernación (SG).
Consideró que no es oportuno especular con la detención de miembros del ERPI, pues apuntó que las indagatorias acerca de esa organización y la del EPR se realizan a fondo, en coordinación con otras dependencias y corporaciones.
Agregó que en la detención de los cabecillas del grupo guerrillero no caben los discursos triunfalistas ni las cifras alegres hasta en tanto la sociedad acredite que hay mejores condiciones para el desempeño de las actividades cotidianas.
Destacó la importancia de la Policía Federal Preventiva en el resguardo de las zonas federales, las fronteras y la participación con cuerpos de seguridad del orden estatal.
Subrayó que la Federación se prepara para combatir frontalmente a la delincuencia organizada, y ganarle la batalla, por lo que se establecen estrategias de profesionalización y dotación de mejores equipos a los cuerpos policiacos.
Carrasco tomó aquí la protesta al Comité de Consulta y Participación de la Comunidad en Seguridad Pública, donde estuvo acompañado del gobernador Tomás Yarrington, y destacó la presencia de Mercedes del Carmen Guillén Vicente ųpresunta hermana del subcomandante Marcosų, quien se desempeña como presidenta de la Gran Comisión del Congreso local.
Al hacer referencia al proceso electoral del 2000, mencionó que predominará un clima democrático y plural.
Ť Desconoce su declaración ministerial; Aurora asegura que fue torturada
Antonio reconoce ser miembro de la dirección rebelde
Jacobo Silva Nogales manifestó ayer que es conocido como comandante Antonio, que forma parte del Consejo Máximo del Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI) y que acumuló armas en el domicilio de Felicitas Padilla u Ofelia Flores con la intención de crear un movimiento rebelde "de importancia" en Guerrero.
Al igual que los otros tres presuntos integrantes del ERPI ųGloria Arenas Ajís, conocida como coronel Aurora, Carlos García Rosales y Felicitas Padilla u Ofelia Floresų, Silva se negó a reconocer su declaración ministerial, así como su firma, y, al rendir sus generales ante el juez, dijo llamarse comandante Antonio.
Su declaración quedó asentada en actas durante la audiencia que se celebró ayer en el juzgado primero de distrito en materia penal, con sede en el reclusorio de máxima seguridad de Almoloya de Juárez, estado de México, en presencia del juez de la causa, Rafael Remes Ojeda.
Por su parte, Gloria Arenas Ajís ųa quien las autoridades federales y estatales denominan coronel Auroraų se negó a ratificar su declaración, y aseguró que fue torturada desde que la detuvieron el pasado viernes en Chilpancingo hasta su arribo al penal de Almoloya de Juárez, donde fue presentada el domingo pasado a los medios de comunicación.
De acuerdo con la información recabada sobre la audiencia privada, Silva aceptó ser conocido como comandante Antonio, y añadió que compró ilegalmente las armas encontradas en el domicilio de Felicitas Padilla u Ofelia Flores, en Chilpancingo, Guerrero, y que pidió a la dueña del lugar y a su esposo que le permitieran almacenarlas ahí.
Por tanto, los propietarios del inmueble no tendrían relación alguna ni con la compra ni con el posible uso de las armas que estaban en su domicilio.
Felicitas Padilla u Ofelia Flores aseveró estar casada con Carlos García Rosales y ser propietaria de la casa en que se encontraron las armas, pero sostuvo que ella únicamente aceptó guardarlas.
Las autoridades sostienen que Arenas participaba en el ERPI redactando los comunicados del grupo, los cuales eran firmados por los dos detenidos (Carlos García y Ofelia Flores) y por los comandantes Hermenegildo y Santiago y los coroneles Cuauhtémoc y Emiliano, quienes integran la dirección nacional del grupo rebelde.
Se acusa a García y Flores de ser combatientes de la agrupación y de encargarse de la seguridad y mantenimiento de la casa en que fueron arrestados, que se presume era el lugar utilizado para impartir cursos a los mandos medios rebeldes, efectuar reuniones de la dirección y elaborar los comunicados.
Una vez que los acusados rindieron su declaración preparatoria, se espera que en las próximas horas el juez Remes dicte auto de formal prisión a los acusados.
En tanto, en Morelos, agentes de la Policía Federal Preventiva, de la Judicial Federal y elementos del Ejército iniciaron la búsqueda de líderes o células del ERPI en poblados y rancherías en la Sierra Sur del estado, que colinda con Guerrero y Puebla.
Fuentes de inteligencia militar consultadas señalaron que existe la presunción de la existencia de grupos armados en la zona suroeste morelense, que han obligado desde hace cuatro meses a mantener abierta una línea de investigación que pueda conducir a localizar a Vitaliano Fernando García, presunto guerrillero, sobre quien pesa una orden de aprehensión.
Sobre el tema, el secretario de Seguridad Pública en el estado, Fernando Gutiérrez Nava, confirmó que desde hace cuatro meses se conformó un grupo con miembros de esa dependencia y de Ejército, PGR, PGJDF y PFP, con el objetivo de investigar si hay grupos armados paramilitares.
Por otra parte, en Jalapa, Veracruz, el subsecretario de Gobierno, Jorge Uscanga Escobar, reconoció que uno de los cuatro integrantes del ERPI detenidos en Guerrero operó durante 1994 y 1995 en esta entidad como asesor de la Unión de Todos los Pueblos Indígenas de la Sierra de Zongolica.
Sin embargo, rechazó que el guerrillero detenido haya dejado células rebeldes en esa zona serrana, y sostuvo que durante la gestión del gobernador Miguel Alemán no se ha detectado ningún movimiento subversivo.
Arenas habría sido detenida en SLP
En San Luis Potosí, tres agentes que sólo se identificaron como "de Gobernación" interrogaron a vecinos de la colonia Balcones del Valle de esta ciudad, donde elementos del Ejército detuvieron el viernes pasado a una mujer, presentando fotografías de Gloria Arenas Ajís y preguntando si era la misma persona. Al menos uno de los vecinos interrogados respondió de manera afirmativa.
Durante un operativo realizado el 22 de octubre pasado, mismo día en que presuntamente fue capturada Arenas Ajís junto con otros tres presuntos dirigentes del ERPI, elementos del Ejército y de la Policía Federal Preventiva allanaron la casa marcada con el número 224 de la calle fuente de Diana, en la colonia Balcones del Valle, de esta ciudad, y detuvieron a una mujer de unos 30 años.
En medio de un total hermetismo, las autoridades no han informado sobre el propósito del operativo, la identidad de la detenida o su paradero.
Por informes de vecinos se sabe que la casa allanada estaba ocupada por tres personas: la mujer detenida, otra persona del sexo femenino y un hombre de mediana edad.
Esos individuos, según las versiones, tenían un vehículo con placas del Distrito Federal y supuestamente provenían de esa ciudad. Los vecinos entrevistados señalaron que esas personas tenían entre quince días y un mes de vivir en la vivienda mencionada.
Al hacer lo propio La Jornada San Luis, al menos uno de los interrogados, quien dijo haberla tratado días antes de la detención, señaló de manera tajante que es la misma persona. (Jesús Aranda; Francisco Guerrero y Raymundo Jiménez, corresponsales, y La Jornada San Luis.)