n Se le relaciona con la sustracción de una figura de jadeíta de San Ildefonso
Investiga la Interpol de Honduras a un coleccionista mexicano
n Hace unos meses visitó la zona de Copán y mostró interés por conocer las bodegas: Joya
n Un estadunidense que admira el arte prehispánico de ese país, entre los sospechosos
Renato Ravelo n La Interpol hondureña investiga a un coleccionista mexicano de arte prehispánico, en el caso de la estatuilla de jade robada, al parecer por encargo, de la muestra Los mayas, debido a que hace algunos meses realizó una serie de viajes a Tegucigalpa y a la propia zona de Copán, de donde procede la pieza arqueológica asegurada en 100 mil dólares.
''ƑDígame con qué nos la van a reponer?, con nada, si se trata de una joya hondureña de la que es responsable el Colegio de San Ildefonso. La colección no estaba programada para asistir a México, pero fue el presidente del Ministerio de Cultura (Consejo Nacional para la Cultura y las Artes), Rafael Tovar, quien solicitó a su homólogo hondureño, Herman Padget, el préstamo", dice la directora del Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH), Olga Joya: ''Yo fui testigo, en septiembre de 1998, de esa petición en Venecia durante la inauguración de la muestra".
Entre los varios sospechosos del robo, se encuentra además un coleccionista estadunidense, quien ha manifestado siempre un interés particular por el arte prehispánico hondureño.
El coleccionista mexicano que es investigado por la Interpol asistió, comenta Joya, hace unos meses con mucho interés por conocer las bodegas, a la propia zona arqueológica en Honduras. Antes de que se terminara la exposición en Venecia, se supo que como parte del agradecimiento del pueblo de Honduras, por la ayuda mexicana ante la devastación del huracán Mitch, el lote de 60 piezas de Copán vendría al país. Por cierto al coleccionista investigado por la oficina de la Interpol en ese país centroamericano, nunca se le permitió el acceso a la información que requería.
La versión fue confirmada por el ministro de Cultura de Honduras, Herman Padget, quien -en conferencia de prensa, en Tegucigalpa- aseguró que ''un millonario mexicano" está en posesión de la pieza. La agencia Reuters también informa que al enterarse Padget del robo, estuvo tentado a retirar toda la exposición: ''Tuvimos la impresión de que los mexicanos querían conformarnos con el cobro del seguro", pero fue disuadido para no perjudicar las relaciones con México.
ƑFigurilla de poco valor?
Una de las cosas que más indignan a la directora del IHAH son las declaraciones que aseguran que la ''pieza es de poco valor. Me parece poco ético y profesional, que así se intente evadir una responsabilidad internacional, de parte de la señora (Mercedes de la) Garza y la directora de San Ildefonso, Dolores Béistegui. En dos ocasiones que he llamado para pedir informes, piden me comunique a la aseguradora. La pieza fue descubierta hace 15 años por William Fash, de Harvard, y justamente habló de ella el pasado 7 de agosto en San Ildefonso. Pero el valor excede los 100 mil dólares, pues es inconmensurable. Cómo pretenden que renunciemos a esa reliquia".
(Una estela de Palenque, para ejemplificar la relación entre costo en el mercado y el valor cultural, cabe señalar, asciende en el mercado negro, que culmina en cualquier subastadora londinense, aproximadamente a 150 mil dólares, de acuerdo con información proporcionada por el presidente del Consejo de Arqueología del INAH, Joaquín García Bárcenas).
Las piezas de la colección llegaron a México, finalmente, el 27 de mayo. Casi un mes después, el 15 de junio, a causa del terremoto en la ciudad de México, se le anunció a Olga Joya que aquélla sería cambiada de sala-bodega. Unos días después, personal de la embajada acudió para presenciar la mudanza a la sala 10. Ese fue el último día que la figurilla de jadeíta fue vista.
El robo, o su detección, ocurrió el 28 de julio a las 13:30 horas, cuando se acudió a la bodega en la que se encontraba para ser integrada a la sala 16, en el segundo piso del Colegio de San Ildefonso. Jesús de las Heras, comisario por Honduras en la exposición, fue el encargado de constatar la ausencia de la pieza.
Ningún aviso oficial a Honduras
La denuncia se presentó hasta el 11 de agosto, 14 días después de que se detectó la desaparición, por la Dirección General de Asuntos Jurídicos de la UNAM.
La Interpol de Honduras, a su vez, fue enterada por Olga Joya más de un mes después, el 20 de septiembre, mediante un oficio. Hasta la fecha, reclama la directora del IHAH, no ha recibido notificación oficial por escrito de la desaparición de la figurilla de 22 centímetros de altura por 7.3 de ancho, perteneciente al Clásico tardío, entre el 600 y el 900 dC.
La directora del IHAH confirma, con ello, la posición de la embajada de Honduras, instancia que no hace declaración alguna porque, señala, oficialmente no ha recibido notificación del suceso.
La única respuesta oficial comunicada al pueblo hondureño, a más de tres meses del robo, ha sido la de la aseguradora.