n Arsa y toma, espectáculo de la bailaora que clausurará el Festival Cervantino


El flamenco es arte vivo y lleno con todo lo de adentro: Cristina Hoyos

n La artista española se rencontrará con el público mexicano después de seis años de ausencia

n El género está tocado por la varita mágica y no es posible descifrarlo, dice en entrevista

Thelma Gómez Durán, especial para La Jornada n Como en el mundo de los toros, en el flamenco también hay figuras, artistas que con un solo movimiento provocan un ''olé". Creadores aclamados en cualquier plaza-teatro del mundo, entre estos elegidos por la magia del ''duende" se encuentra Cristina Hoyos, una de las más grandes bailadoras que ha dado España, en particular Sevilla, ciudad natal de esta figura del flamenco que este domingo llenará con su arte la explanada de la Alhóndiga de Granaditas durante la clausura del vigesimoséptimo Festival Internacional Cervantino.

Pareja de baile durante años de Antonio Gades y bailaora consentida del cineasta Carlos Saura, Hoyos encarna en su baile la madurez, la experiencia acumulada de un largo andar por los territorios del taconeo y el movimiento corporal, convirtiéndose en señora y primera dama del flamenco.

 

Sentir lo que se observa

 

Arsa y toma es el espectáculo que Cristina Hoyos y su compañía presentarán en Guanajuato. Un trabajo que la bailaora creó con la ayuda del coreógrafo Ramón Oller y cuyo estreno se realizó en el Festival de Aviñón, Francia, en 1996.

''En él cuento un poco lo que era el flamenco en los años sesenta, en el tiempo de mis comienzos, cuando el género era más turístico, menos profundo. Esta parte la abordo con cierta ironía, pues no se puede decir que es una parodia aunque se acerca mucho a esta forma. Después hay un cambio total en el escenario, ya que hacemos un flamenco más actual, como verdaderamente es ese baile: sobrio, serio, profundo, más de adentro."

Cristina Hoyos, vía telefónica, habla desde Sevilla. No puede ocultar su emoción porque, después de seis años, vuelve a presentarse en México. ''Estoy loca por tomarme un margarita y volver a encontrarme con ese público maravilloso".

ųƑCree que con toda la revolución que vive este arte andaluz siga existiendo el flamenco puro, el que se hace desde adentro?

ųIndiscutiblemente, si bien hay personas que para conseguir el éxito y llegar a más público hacen cosas que no están dentro de los cánones del flamenco. Pero la mayoría de los que nos dedicamos a este arte sí respetamos sus raíces y lo hacemos bien.

''Creo que el flamenco ha evolucionado para mejorar, para enriquecerse y embellecerse y está llegando a todas partes. Pero siempre hay personas que para buscar más efectismo hacen cosas que no están dentro de lo que debe ser lo flamenco; eso es inevitable ahora, era inevitable antes y creo que seguirá siéndolo. Siempre hay cosas que están ahí, por el precio de la fama, del dinero o de lo que sea."

ųUn espectador que apenas inicia su contacto con el flamenco, Ƒcómo le hace para descubrir lo que no es auténtico en este arte?

ųSiempre digo que no hace falta entender un arte para sentirlo; el espectador tiene que sentir lo que está viendo, si lo siente, si pasa un rato bueno, si le gusta lo que observa, con eso es suficiente. Y apreciarlo, bueno, creo que para apreciar el flamenco no es suficiente con ir un solo día al teatro o al tablao, se tiene que escuchar mucha música y ver a muchas personas bailar para apreciar este arte, sólo así puede uno advertir las cosas superficiales.

''El flamenco es un arte vivo y si los artistas que se ven prodigan sentimiento, lo hacen de corazón y lo hacen bien, se va a sentir la vida de este arte."

ųHa dicho que el flamenco la escogió a usted.

ųSí, el flamenco me escogió a mí, porque yo desde pequeña escuchaba la radio y me ponía a bailar; es algo que ha nacido conmigo, nunca se va a desprender de mí. Normalmente, un padre o una madre llevan al niño a ver si aprende a bailar y a mí me llevaron porque comprendieron y vieron que era lo que me gustaba; por eso yo no he ido al flamenco, él ha venido a mí y se ha metido dentro de mí y lo he hecho parte de mi vida.

 

Llevar el arte por los tablaos

 

Cristina Hoyos comenzó a bailar a los 12 años, pero fue seis años después que tuvo su primera presentación, lo cual ocurrió por la puerta grande en el Teatro del Pabellón Español de la Feria Mundial de Nueva York. A partir de entonces, la bailaora llevó arte a distintos tablaos, hasta que en 1968 conoce a Antonio Gades, quien un año después la incorpora a su compañía. Al lado de Antonio y con coreografías de este bailaor, Cristina se convierte en la protagonista de películas como Bodas de sangre (1981), Carmen (1983) y El amor brujo (1986), todas dirigidas por Saura.

ųƑQué significó para su carrera y su vida ser pareja de baile de Antonio Gades?

ųSignificó muchísimo porque cuando yo entré en la compañía de Antonio Gades, era muy joven, era una bailaora de Sevilla y con él aprendí muchas cosas, sobre todo técnica, que es muy necesaria. Con él llegué bailando como yo lo hacía, con mi forma, mis sentimientos y mis ganas de querer bailar cada día mejor, y con él aprendí muchas cosas que hacen falta para dedicarse a este arte, como saber un poco de coreografía, de luces, de estética, de organización; todo eso me sirvió mucho cuando decidí crear mi propia compañía, en 1988.

ųUsted es la bailaora consentida del realizador Carlos Saura, Ƒpuede hablar de su experiencia en el cine?

ųHa sido una experiencia enriquecedora, porque además de mi trabajo con Saura, realicé en 1989 la película Montoyas y Tarantos, de Vicente Escrivá (cinta que fue seleccionada por la Academia de Cinematografía Española para representar a España en los premios Oscar en 1990). También realicé series de televisión (Juncal), digamos que es mi otra parte artística, en la que me ha ido muy bien.

''Indiscutiblemente, la proyección que caracteriza al cine no la tiene el teatro, porque mediante una película pueden conocer el trabajo en muchos países y en el teatro sólo bailas para dos mil personas.

''Sin embargo, en lo personal prefiero el teatro, porque es más mágico, porque cada noche la representación es única y el contacto con el público te hace sentir otra emoción, muy diferente a la que experimentas cuando tienes que bailar delante de una cámara."

ųA lo largo de su carrera ha sido testigo del resurgimiento del flamenco, sobre todo en los años noventa, época en la que este arte llamó mucho la atención, sobre todo de los jóvenes, situación que antes no se vivía en España.

ųEl flamenco siempre ha cambiado, pero sucede que hay momentos en los que ha evolucionado más la guitarra, en otros es el cante, el que crece, y después el baile, sin embargo creo que en estos últimos años surgieron muchos jóvenes estupendos que han hecho que el baile flamenco evolucione, pero lo difícil es seguir manteniéndote y llegar a ocupar el lugar que ahora tiene Antonio Gades, quien a los 60 años sigue siendo una figura.

 

Reflejar la vida

 

ųƑEstá de acuerdo con la fusión que se realiza en el flamenco, en el que se utilizan técnicas y movimientos del clásico y el contemporáneo?

ųEstoy de acuerdo y no. Creo que las raíces del flamenco hay que conservarlas porque eso es lo que nos hace ser diferentes, pero también hay que evolucionar. Y esto, Ƒqué quiere decir?, que no tienes por qué hacer fusión con cualquier cosa, que no tienes que salir en el espectáculo con un vestido como un camisón, sino que el público identifique lo que se está haciendo; que no haya en los espectáculos nada que se parezca a un musical americano; tenemos un arte maravilloso y debemos conservar su raíz y a la vez hacer algo nuevo. Estoy en favor de una evolución lógica, enriquecedora y que identifique nuestro arte del flamenco.

ųƑExplicar el flamenco resulta algo imposible?

ųSí, el flamenco es un enigma porque es una forma de vida que nace en Andalucía y después es llevada al escenario, pero no todo el mundo está dotado para desarrollarlo y eso no se sabe por qué sucede, por qué dentro de una misma familia hay tres o cuatro hermanos que comen lo mismo, que van a la misma escuela, que tienen los mismos padres y, de repente, sale uno que canta o baila maravillosamente y los otros no saben ni hacer palmas, eso Ƒcómo te lo explicas?, es un enigma.

ųƑEse enigma se puede llamar duende?

ųSe puede llamar duende, porque sólo hay algunas personas que lo tienen y lo demuestran en el escenario. Algo distinto, especial, es como si lo hubieran tocado con la varita mágica, entonces eso es el flamenco, es un arte tocado por la varita mágica, que no se puede descifrar. Sin duda hay una técnica, pero es necesario ponerla a disposición del arte y el sentimiento para tener más libertad de bailar, cantar o tocar la guitarra. Pero, por encima de todo tienen que estar los sentimientos, el corazón, las tripas y lo que se lleva dentro.

ųƑPara hacer flamenco se necesita tener vida, haber sufrido?

ųEn los principios del flamenco sí, aunque ahora también se sufre; provenir de una familia pobre no es que sufras, sino que existe un afán por la superación. El flamenco es un arte que nació de la parte trágica de Andalucía, es un reflejo de la vida y en ésta hay mucho sufrimiento.

(Arsa y toma, espectáculo de Hoyos, en el que participan los guitarristas José Luis Rodríguez, El Juani y Manuel Pérez.)