n No nos dejen solos, pide a legisladores del DF

En Chiapas se dará la disputa por la nación: Salazar Mendiguchía

n Como candidato, defenderé los acuerdos de San Andrés, ofrece

Andrea Becerril n ''No nos dejen solos, estén pendientes de Chiapas porque ahí se dará la disputa por la nación'', pidió ayer Pablo Salazar Mendiguchía a diputados perredistas y petistas a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, que le ofrecieron un desayuno.

El senador independiente detalló los avances en la conformación de la alianza opositora chiapaneca, y definió que ''con la misma vehemencia'' que defendió los acuerdos de San Andrés cuando fue integrante de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), lo hará ahora como candidato a la gubernatura del estado.

No sólo -explicó- porque se trata de acuerdos de avanzada, incluso a nivel mundial, que garantizan los derechos de los pueblos indios, como no lo hicieron la Independencia, la Reforma, la Revolución Mexicana ni la Constitución de 1917, sino por un asunto ético: el cumplimiento de lo pactado.

Salazar Mendiguchía aclaró asimismo que aunque su propuesta es por un gobierno de paz y de reconciliación, y no está a favor de las soluciones armadas, tampoco condena al EZLN y está plenamente vinculado a la causa zapatista. ''Eso no lo voy a negar'', dijo.

Flanqueado por el líder de la ALDF, Martí Batres, y el diputado local José Narro Robles, del PT -partido que ya lo declaró su candidato al gobierno de Chiapas-, aludió a los muchos agravios sufridos a través de los siglos por los chiapanecos. Sigue vigente, señaló, la frase que hace varias décadas pronunciara Belisario Domínguez de que la revolución no pasó por Chiapas. ''En mi entidad no tenemos el federalismo por el que lucharon nuestros héroes, sino un centralismo de facto, una invasión del gobierno federal que ha impedido a los chiapanecos participar en la toma de decisiones''.

Aludió a los ''primeros lugares vergonzosos'' que el estado de Chiapas ocupa, entre ellos en analfabetismo. De sus habitantes, 90 por ciento vive en extrema pobreza, incomunicados en comunidades dispersas, 30 por ciento de ellas sin servicio eléctrico.

De manera inesperada, agregó, los vientos comenzaron a soplar en favor de un cambio, y ''de donde menos se hubiera esperado, desde el interior mismo de Chiapas, en un pueblo modesto, olvidado, San Andrés Larráinzar, se rescató la reivindicación de los pueblos indios que no recordó el movimiento de Independencia con su primera Constitución federalista de 1854, que omitió la reforma juarista y su Constitución de 1857 y también la revolución y su Carta Magna de 1917''.

En San Andrés Larráinzar, añadió, se dio la discusión más importante de la historia para insertar a los pueblos indios en una nueva lucha por su derechos, y se firmaron unos acuerdos de avanzada y vanguardia ''que lamentablemente fueron malogrados por una actitud irresponsable del gobierno, que dio marcha atrás y extemporáneamente expresó su arrepentimiento por lo que había planteado''.

Por ello, Salazar Mendiguchía aseguró que seguirá defendiendo los acuerdos de San Andrés, ya que independientemente de sus contenidos, está en juego un valor ético de la negociación. ''Está en juego si en este país los particulares pueden llegar a negociaciones honorables con la autoridad, si la autoridad tiene compromiso o no de cumplir lo que firmó y si hay certidumbre o confiabilidad para acercarse a los gobernantes en procesos como éstos. Esto lo voy a seguir defendiendo como candidato y como gobernador''.

Pablo Salazar demandó luego a los legisladores no dejar solos a los chiapanecos. ''A diferencia de lo que clama (el gobernador) Albores, de que todos saquen las manos de Chiapas, yo les pido que, con pleno respeto a la soberanía de mi estado, no sólo las manos, sino que tengan el corazón allá, que estén pendientes de lo que sucede, porque es un asunto de interés nacional''.