n Ataques de la aviación y la artillería rusa en tres ciudades chechenas


Los bombardeos, "hasta liquidar a bandidos": Moscú

Afp, Reuters, Ap y Dpa, Grozny, 13 de octubre n Los combates entre tropas federales rusas y rebeldes chechenos se centraron hoy en el noroeste de la república separatista, mientras Moscú anunciaba que continuará sus bombardeos hasta "la liquidación total de los bandidos".

Por otra parte, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas calificó de "terrorismo internacional" el secuestro hoy de siete integrantes del personal del ente mundial en la provincia georgiana separatista de Abjasia, y entre ellos figura el militar uruguayo Luis Agrego, así como otros observadores militares de Suecia, Grecia, República Checa y Suiza, además de un médico alemán y un traductor local.

Consultado acerca de los informes de que los secuestradores exigían un rescate de 200 mil dólares, el portavoz Manoel de Almeida señaló que "por el momento no discutimos ningún aspecto de este incidente".

Entre tanto, aviación y artillería rusa mantenían un ataque sostenido sobre Naruskaya, Bamut y principalmente sobre Goragorsky, 60 kilómetros al noroeste de Grozny, la capital chechena.

Los rebeldes islamistas, por su parte, lograron mantener sus posiciones a lo largo del río Terek y afirmaron haber destruido unos 40 vehículos blindados rusos.

Según la fuerzas rusas, el jefe rebelde checheno, Shamil Bassaiev, a quien Moscú considera responsable de los atentados que causaron 293 muertos en agosto en Rusia, se halla en Goragorsky, pero Grozny desmintió dicha información.

El general Anatoli Kornukov, jefe de la fuerza aérea rusa, afirmó este miércoles que sus fuerzas bombardearán Chechenia "hasta la liquidación total" de los grupos de "bandidos" que se encuentran allí.

"La aviación rusa destruyó más de cien sitios controlados por los combatientes chechenos. Nuestro objetivo esencial es apoyar con nuestra aviación a las tropas en tierra", añadió el general.

Sin embargo, el presidente checheno, Aslan Masjadov, dijo en declaraciones publicadas por la prensa rusa estar "ciento por ciento seguro de que (los rusos) vendrán aquí a sostener conversaciones de paz... Pero antes, morirán miles de soldados".

El mandatario checheno nombró este miércoles al ex presidente Zelimjan Inadarbiev como enviado especial para los países musulmanes, a fin de "coordinar la política exterior y establecer relaciones", según un comunicado oficial.

Este nombramiento responde al anuncio efectuado por Rusia el domingo de enviar emisarios a países árabes para explicar su ofensiva en Chechenia.

En Moscú, el primer ministro ruso, Vladimir Putin, informó al presidente Boris Yeltsin --convaleciente en una residencia campestre a causa de una gripe-- sobre el desarrollo de las hostilidades, e insistió en que el objetivo de los ataques rusos es eliminar "los nidos de terrorismo".

Mientras Moscú prevé aumentar sus gastos para apoyar el esfuerzo de guerra, el director general del Fondo Monetario Internacional (FMI), Michel Camdessus, ad- virtió que suspenderá la ayuda a Rusia, que espera desde septiembre un crédito de 640 millones de dólares, si considera que los gastos militares son excesivos.

Pero Putin aseguró que las operaciones militares en Chechenia son financiadas a través de un suplemento de ingresos en el presupuesto federal, y no por el dinero entregado por el FMI.

El primer ministro ruso, un ex jefe de los servicios secretos, experimenta desde hace una semanas un ascenso político sorprendente. Tras su nombramiento el 9 de agosto apenas llegaba a uno por ciento de las intenciones de voto en las presidenciales, pero actualmente alcanza 14 por ciento.

"La guerra en el Cáucaso es lo que explica este apoyo --consideró el semanario Itogui--. Los electores están dispuestos hoy, sobre todo después de los ataques terroristas en ciudades rusas, a dar carta blanca al que resuelva la cuestión chechena".