n No habrá financiamiento para la pequeña empresa hasta el 2001


Cae 40% el crédito bancario

n El diferencial entre tasas pasivas y activas subió de 5 a 12 puntos porcentuales en los últimos tres años, según el Banco de México

César Martínez Aznárez n El financiamiento total de la banca comercial al sector no financiero ha caído cerca de 40 por ciento, en términos reales, desde 1994 hasta la fecha, en un proceso que se ha acentuado en el último año, y en el que la contracción más fuerte ocurrió en el crédito al consumo, según establecen reportes oficiales.

Casi la misma evolución tuvo el financiamiento que otorgó la banca de desarrollo mexicana, puesto que, con datos a julio de este año, se derrumbó en más de 38 por ciento desde diciembre de 1994, de acuerdo con información procesada por el Banco de México.

Los créditos que sufrieron la mayor contracción fueron los destinados al consumo, seguidos por los de vivienda, mientras que los préstamos de la banca comercial para la actividad empresarial fueron los que registraron la menor disminución.

En su función como intemediaria del ahorro del sector privado, la banca privada mexicana se redujo de tal manera que sus activos totales, medidos como proporción del producto interno bruto (PIB), pasaron de 82.5 por ciento a finales de 1994, a sólo 60 por ciento al cierre del primer semestre de 1999.

A la vez que el crédito se desplomaba, señala el Banco de México, el diferencial entre las tasas de interés que los bancos pagan a los depositantes por la captación (pasivas) y las que cobran por los préstamos a sus clientes (activas), se han duplicado en términos reales en los últimos tres años.

Al finalizar 1996 el diferencial entre ambas tasas, en términos reales, era de poco más de 5 puntos porcentuales, mientras que en julio pasado ese margen llegó a 12 puntos.

Al explicar las causas de tal incremento, el banco central puntualiza que la intermediación financiera ha sido menos eficiente, que los riesgos de las operaciones activas aumentaron, al igual que la reticencia de las instituciones para otorgar créditos.

A juicio de los principales bancos comerciales que operan en el país, las razones fundamentales de la reducción del financiamiento fueron los problemas de pago de los deudores, la incertidumbre legal para ejercer las garantías de créditos, y una menor tolerancia al riesgo por parte de las instituciones financieras.

El Banco de México agrega que la contracción del financiamiento bancario, tanto comercial como de desarrollo, ha sido sustituida por otras fuentes alternativas, en particular para los créditos al consumo. Los fondos de instituciones no bancarias destinados a financiar el consumo, pasaron de representar 4.1 por ciento del total de ese rubro en diciembre de 1994, a 28.5 por ciento en junio del presente año.

n Persiste la debilidad de la banca privada: Bursamétrica

Antonio Castellanos n La debilidad en la banca privada persiste y los ''focos rojos no se han apagado''. Las proyecciones son que no habrá crédito para la pequeña y mediana empresa hasta el 2001. El próximo año podría reactivarse para las grandes empresas, porque en lo que resta de 1999 seguirá a ''cuentagotas'', según expertos de las consultoras Standard and Poor's y Bursamétrica.

Indicaron que el financiamiento de la banca privada cayó 20 por ciento en los últimos cinco años y adelantaron que ocurrirán nuevas fusiones. Algunos bancos buscarán capitales extranjeros, como Bital, Ixe y Quadrum que requieren apoyos de socios internos o externos para responder a sus necesidades de capitalización. A la problemática anterior se suma la incertidumbre política.

Esta situación ha sido generada por la ausencia de programas políticos y económicos de los distintos aspirantes a la Presidencia de la República, dijeron Alejandro González y Pablo Alvarez-Icaza de Bursamétrica, cuyo principal socio es la empresa Standard and Poor's. Señalaron que los requerimientos para capitalizar debidamente a la banca son ahora de 5 mil 200 millones de dólares, cerca de 52 mil millones de pesos.

 

Urgencia por encontrar socios

 

Las intermediarias financieras, precisaron, podrían recurrir a la emisión de títulos de deuda, como lo hizo Banamex. Los que tienen urgencia de encontrar socios capitalistas son Bital, cuya situación no es muy favorable, y las otros dos instituciones de tamaño chico citadas. La fusión entre Banamex y Bancomer es vista por las consultoras como una remota posibilidad, porque las autoridades se opondrían a lo que sería la conformación de un monopolio bancario con el control de 60 por ciento de todas las actividades.

A juicio de los analistas, los focos rojos no han desaparecido de la banca, y el panorama se ha complicado por el ingrediente de la incertidumbre política. Los efectos externos, opinó Alvarez-Icaza, pueden no controlarse, pero los internos sí, a través de un proceso electoral limpio para el próximo año que garantice la transición política sin sobresaltos.

El analista, director de Análisis Económico de Bursamétrica, afirmó que los agentes económicos internos y externos no estarían de acuerdo con que se hicieran adecuaciones a la política económica en la próxima gestión gubernamental, pero definitivamente rechazarían cambios profundos que pusieran en riesgo la continuidad del actual modelo.

Un viraje radical no sería ''bien visto por los empresarios''. Las opiniones que han exteriorizado los inversionistas, dijo, señalan que en caso de que un candidato de la oposición llegara a la Presidencia de la República, deberá formular adecuaciones, aunque no cambios como los que propone Madrazo, quien ha criticado de manera abierta la actual política económica.

En el caso de Cárdenas, los empresarios consideran que hay signos ''populistas'' en su discurso, pero señalan también que no hay una propuesta de gobierno concreta por parte de ningún partido político, y eso preocupa mucho a los dueños del capital que no ven cercana una verdadera reforma fiscal.

A este respecto, Alvarez-Icaza señaló que este proceso ''a la mejor no se concluye en el próximo sexenio''. Hay diversas opiniones, y lo cierto es que no hay nada claro en materia impositiva. Eso es precisamente lo que genera incertidumbre, porque no se sabe hacia dónde se encaminará el próximo sexenio. Ningún partido político ha sido claro hasta el momento, concluyó.