n Se malogra reunión entre directivos sindicales y dueños de los ingenios


Cañeros: seguirá la huelga hasta que paguen a jubilados $112 millones

n Son parte del total que las empresas no les han entregado por concepto de productividad

n Obreros descartan que de manera inmediata haya desabasto del dulce y aumente su precio

Trabajador de la industria del azœcar en Morelos n Foto: archivo Alma E. Muñoz n El Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera y Alcoholera de la República Mexicana se manifestó ayer por mantener la huelga en los ingenios del país el tiempo que sea necesario, con el objetivo de lograr que los dueños de las empresas paguen los adeudos que por productividad deben a los trabajadores, en especial a los más de 11 mil jubilados de la industria. La demanda asciende a más de 112 millones de pesos.

Se esperaba que este fin de semana se diera el primer acercamiento -tras el comienzo de la huelga- entre las partes para buscar la solución al conflicto, a sabiendas de que los industriales dijeron carecer de fondos para pagar los adeudos correspondientes -algunos de ellos, incluso, para salvar ingenios que fueron objeto de un rescate gubernamental por 2 mil millones de dólares y tienen créditos asumidos por el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa).

Durante una reunión que ayer sostuvo la directiva sindical con sus agremiados en las instalaciones del organismo, en la ciudad de México, se esperaba que los dueños de los ingenios se presentaran a la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) para realizar el primer acercamiento de los azucareros con los propietarios de las factorías a fin de levantar la huelga que el jueves pasado iniciaron los más de 45 mil trabajadores.

Sin embargo, el encuentro resultó fallido, pese a las versiones de que algunos empresarios se inclinaron por resolver en sus ingenios las demandas de los obreros, situación que para los sindicalizados no soluciona el conflicto, pues su posición es "de todo o nada", y no aceptarán que únicamente unos industriales estén dispuestos a ceder a sus peticiones.

 

El lunes, posible encuentro

 

Ante ello, y después de notificar a los trabajadores que el próximo lunes deberán estar en las instalaciones sindicales para esperar los resultados de un encuentro previsto entre dirigentes y patrones en las instalaciones de la STPS, la mayor parte de los azucareros retornó a sus lugares de origen, para hoy, en asambleas locales, informar a las bases que aún no hay acuerdos entre las partes y, por lo tanto, deben prepararse para una lucha que podría vislumbrarse larga.

Sindicalizados que ayer accedieron a platicar sobre la reunión que durante la mañana sostuvieron con su directiva, a puerta cerrada, expresaron que, no obstante comenzar a sufrir la imposibilidad de cobrar su salario -que en promedio es de unos 50 pesos diarios (la huelga estalló un día antes del cobro habitual de la semana)-, en un conflicto de esta naturaleza no hay cabida para dar marcha atrás, pues no están dispuestos a permitir que los propietarios violen sus derechos laborales.

Ante al temor de que pudiera haber un desabasto de azúcar por la huelga que hoy cumple cuatro días, algunos trabajadores aseveraron que en estos momentos se re aliza el proceso de preparación del producto y, por lo tanto, no es tiempo de hablar sobre el asunto. Algunos ingenios tienen bodegas fuera de su jurisdicción, y por ello se mantiene la esperanza de que un incremento al precio del producto no se dé en los primeros días de huelga.

Desde un primer momento, los representantes legales de los industriales expres protesta de unos necios obreros agricolas que no han entendido el exito economico que ya anunci— el dr. aron que carecen de dinero para liquidar el adeudo a los jubilados y subsanar otras violaciones al contrato ley. En este ámbito, se debe recordar que, a principios de año, el gobierno estableció una primera etapa de rescate financiero, por 2 mil millones de dólares, para los dueños de los ingenios -cuyo proceso de privatización se inició en el sexenio de Carlos Salinas-, después de que los principales consumidores del dulce, los refresqueros, se inclinaron por la compra de fructosa, por ser de un precio más bajo.

Algunos de ellos incluso entraron al Fobaproa, como los grupos AGA, de Abelardo García Arce; Beta San Miguel, de José Pinto Mazal; Prozucar, de Eduardo de la Vega; Escorpión, de Enrique Molina Sobrino; Grupo Azucarero Mexicano, de Juan Gallardo Thurlow, y Santos, de Alberto Santos.

Según las cifras proporcionadas, un jubilado gana a la quincena poco más de mil pesos y, además de la negativa para continuarles pagando, la intención de los empresarios, de acuerdo con las versiones, es proporcionarles la liquidación total por su prestación de servicios para dar por concluido el compromiso entre empresa y trabajador.

Otra de las preocupaciones es la supuesta intención de contratar personal por medio de negociaciones directas con las empresas, para buscar la eliminación paulatina de prestaciones que establece la Ley Federal del Trabajo, como es el reparto de utilidades -una demanda más de los azucareros-, y la negativa a que un trabajador adquiera antigüedad.

Dos inquietudes más son la posibilidad de que se homologuen salarios en todos los ingenios del país y que las negociaciones habituales que en esta materia se realizaban en cada entidad queden englobadas en un mismo nivel, desconociendo el hecho de que los estados tienen diferentes niveles salariales.

Las cosas siguen igual: más de 45 mil azucareros se encuentran en huelga y no hay ninguna propuesta de parte de los industriales para resolver el conflicto. La preocupación entre los trabajadores, según explicaron algunos, es por la falta de cobro de nómina, pero no están dispuestos a retroceder en su movimiento, e incluso se manifestaron, de ser posible, por realizar brigadas de boteo entre la población para allegarse recursos que puedan permitirles continuar con su lucha y atender a sus familias.