MAR DE HISTORIAS ŤCristina Pacheco

El último capítulo

ESCENA PRIMERA

 

La sala de un departamento. Entre fotos y reproducciones hay un gran espejo. A él se asoman, en desorden, LA FESTEJADA, SU MARIDO, SU HERMANA Y LOS INVITADOS. Al fondo se escucha la nueva versión de un antiguo bolero: Sin ti.

FESTEJADA: Propongo otro brindis por la del cumpleaños, o sea špor mí! (Levanta la copa y brinda con la imagen que le devuelve el espejo). šSalud!

HERMANA: No sigas bebiendo, acabarás bajo el sillón (se coloca a espaldas de su hermana). Ten cuidado.

FESTEJADA: ƑCon qué? (Se arregla los mechones que enmarcan su rostro). No creas que he bebido tanto. Lo que pasa es que me siento muy feliz.

HERMANA: Sí: demasiado (se vuelve y observa de reojo al esposo de su hermana). Y eso a mi cuñadito no parece gustarle mucho.

FESTEJADA: No entiendo por qué tenga que molestarle. Además, estamos en una fiesta, no en un velorio (va hacia el equipo de sonido. Junto a él se encuentra su esposo). Mi amor, Ƒpor qué no pones un disco más movidito?

MARIDO: ƑCómo qué? Siempre te gustaron los boleros.

FESTEJADA: Pues sí, pero hay que probar otras cosas (se acuclilla frente al portadiscos). A ver si encuentro un disco que no hayamos oído mil veces (a su hermana). ƑNo tienes nada más moderno?

HERMANA: El nuevo de Café Tacuba. Por ahí debe estar. Lo compró mi hijo Daniel. Dice que está muy bueno, pero como yo no sé de esas cosas...

FESTEJADA: Yo tampoco, pero quiero saber (con gesto triunfal). Sí aquí. Ojalá sea bailable.

MARIDO (al oído de su esposa): Por favor, no vayas a ponerte en ridículo.

FESTEJADA: ƑPor qué no? Al menos por hoy, déjame hacer lo que yo quiera. Nunca volveré a cumplir 47 años. Cada día seré más y más vieja. šQué horrible! Haré de cuenta que no lo dije (vuelve a sonreír). Además, no estamos en un concurso de baile sino entre amigos (volviéndose hacia los invitados): ƑLes parece ridículo bailar en una fiesta?

INVITADOS (levantan sus copas al mismo tiempo): No, no.

FESTEJADA: ƑYa ves? (Melosa). No seas aguafiestas. Anda, ven... (lo toma por la corbata y mientras lo lleva al centro de la sala se contonea al ritmo de la música). Disfrútalo, déjate llevar.

MARIDO (la toma por el talle y la aproxima a su cuerpo): ƑDesde cuándo sabes bailar? Yo no te enseñé.

FESTEJADA (echa la cabeza hacia atrás): Esto no se aprende, nada más se siente (a la pareja que baila junto a ellos). ƑNo lo creen?

INVITADOS: Claro, desde luego.

HERMANA (entra con una bandeja de bebidas): Esta mujer se ha vuelto incontrolable (guiñándole el ojo a su cuñado). ƑQué le diste?

MARIDO: Nada (tratando de sonreír). No sé qué le pasa.

FESTEJADA: Que es mi cumpleaños y me siento feliz (observando a su marido): ƑPor qué me miras así? No vayas a decirme que también te parece ridículo verme contenta (cierra los ojos y deja de bailar). Es tan raro decirlo. Me oigo y no creo ser yo quien lo dice. Llevaba años...

MARIDO: ƑSin sentirte feliz?

FESTEJADA (abre los ojos): No dije eso.

MARIDO: Ni hace falta (toma de la mano a su mujer y la conduce a la mesa donde están las bebidas). Ahora soy yo quien propone un brindis (observando a los invitados). Se prohíbe tener las copas vacías (enarbola una botella). ƑA quién le sirvo? (varios de los invitados le aproximan sus vasos).

INVITADOS (en desorden): A mí, poquito... Ya no hay agua mineral... Derecho, el ron se sube menos...

HERMANA: Silencio todos (a su cuñado): Ibas a hacer un brindis. MARIDO: Por la felicidad, no importa de dónde venga.

INVITADOS (intercambian miradas y sonrisas): šSalud!

ESPOSA (sonríe en silencio, mira su copa y murmura): Ni cuánto dure...

MARIDO: ƑQué dijiste, mi amor? Habla más fuerte para que todos te escuchemos.

HERMANA: Que nos lo diga después. Ahora deja que me acompañe a la recámara porque se me botó el cierre y no quiero darles chou.

INVITADOS (vuelven a bailar): Pero no se tarden... Se van a quedar platicando, las conozco... La fiesta se acaba hoy...

FESTEJADA (de paso a la recámara, se detiene frente al espejo): ƑCrees que me vería mejor con el cabello un poquito más claro? (Al oír que su hermana la llama desde el interior) Ya voy, Ƒpor qué tanta prisa?

 

ESCENA SEGUNDA

 

LA FESTEJADA entra en la recámara. Por todas partes se ven abrigos, paraguas y envolturas de regalos.

FESTEJADA: ƑQué le pasó a tu cierre?

HERMANA: Al mío nada, al tuyo sí. ƑNo puedes controlarte? (se sienta a la orilla de la cama). Estás jugando con fuego.

FESTEJADA: ƑDe qué me hablas?

HERMANA: De cómo te has estado portando: bailas, cantas, te miras al espejo cada cinco minutos. Todo el mundo se está dando cuenta de que algo pasa. Nunca te había visto así (se aproxima). ƑEs lo que me imagino? No pongas cara de boba y dime: Ƒhay alguien?

FESTEJADA (después de dudar): Empezó hace poco, a ti no puedo mentirte. (Sonríe). Es como un sueño. Nunca pensé que, a mi edad, alguien pudiera fijarse en mí. Es una locura, lo sé (se lleva las manos a la cabeza). Dios santo, Ƒqué pensarás de mí?

HERMANA: Lo que yo piense es lo de menos (se aleja un poco). No te pido que me digas quién es él. Sólo contéstame: Ƒvale la pena poner en riesgo tu matrimonio por algo así?

FESTEJADA: Todo el tiempo me pregunto lo mismo y no encuentro respuesta. Sé que debería terminar con esto pero no puedo.

HERMANA: ƑEstás realmente enamorada?

FESTEJADA (juega con su anillo de bodas): Creo que sí, pero tengo dudas a veces.

HERMANA: Entonces, Ƒpor qué lo haces?

FESTEJADA: Te parecerá horrible lo que voy a decirte: si no lo tuviera a él no podría seguir con mi matrimonio (impide que su hermana hable). Suena contradictorio, pero así es.

HERMANA: Sabes que nunca te juzgaré por lo que hagas. Tampoco quiero darte consejos ni ponerme en plan de moralista.

FESTEJADA: Sé lo que piensas: Ƒqué haría si supiera que mi esposo tiene una relación extraconyugal para salvar nuestro matrimonio?

HERMANA: ƑQué harías?

FESTEJADA: Ya te imaginarás: sentiría pánico, celos... Sería incapaz de aceptar o de comprender (se acerca a la puerta entornada y observa a su esposo, que conversa con una muchacha). Nunca creí que me pasaran estas cosas. A veces me siento la mujer más feliz del mundo y en otras (cierra la puerta)... la más estúpida.

HERMANA: ƑQué vas a hacer?

FESTEJADA: ƑAhora o después?

HERMANA: ƑCómo que después?

FESTEJADA: Sí, cuando todo termine. El y yo estamos conscientes de que no tenemos un futuro en común, que no moriremos el uno junto a la otra (se vuelve hacia su hermana)... ƑPor qué estas palabras suenan siempre tan cursis?

HERMANA: Porque la vida es cursi, como una telenovela. Quienes las hacen tienen que saber cómo escribir el último capítulo.

FESTEJADA: Y quienes las vivimos, también.