En respuesta, el PRI negó haber recibido fondos de dicha aerolínea, aunque reconoció que había registrado ingresos a nombre del presidente del consejo de administración de esa empresa.
* Durante cinco años estuvo prófugo
Llegó a México De Prevoisin; lo trasladaron al Reclusorio Sur
* Habría destinado 8 mdd a la campaña de Zedillo y del PRI
El ex director de Aeromexico Gerardo de Prevoisin Legorreta, acusado de cometer un presunto fraude de poco más de 57 millones de dólares contra esta empresa, llegó anoche al país y en seguida fue trasladado al Reclusorio Sur, donde rendiría su declaración preparatoria.
Custodiado por un grupo de agentes federales al mando de Juan Miguel Ponce Edmonson, director de la Interpol México, el ex funcionario, extraditado de Suiza, arribó al hangar de la Procuraduría General de la República (PGR) cuando estaba próximo a cumplir cinco años como prófugo de la justicia mexicana.
El empresario asumió la dirección d e Aerovías de México a finales de 1989 y en las postrimerías del sexenio de Carlos Salinas de Gortari se detectó un millonario quebranto en el patrimonio de la aerolínea. De ese monto, según declaró bajo juramento en una corte de Houston, 8 millones de dólares fueron destinados a la campaña del entonces candidato del PRI a la Presidencia de la República, Ernesto Zedillo.
Según su testimonio, esa aportación obedeció "a la costumbre que existe en México de que los empresarios tenemos que aportar dinero a las campañas del PRI", además de que el traspaso de la millonaria suma había sido autorizado por la junta directiva de Aeroméxico.
En respuesta, el PRI negó haber recibido fondos de dicha aerolínea, aunque reconoció que había registrado ingresos a nombre del presidente del consejo de administración de esa empresa.
De acuerdo con sus declaraciones publicadas en los últimos años, tiempo en que el empresario evadió a la justicia mexicana, la aportación al PRI fue fondeada con la institución financiera Citibank de Nueva York, donde fue depositada en una cuenta personal. Enseguida, los recursos fueron transferidos a una inversión registrada en Banca Serfin y posteriormente a una de los fideicomisos del PRI, cuyo secretario de Finanzas en 1994 era Oscar Espinosa Villarreal.
Los recursos que Cabal dio al priísmo habrían sido absorbidos por el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa), según ha documentado el Partido de la Revolución Democrática, motivo también de una controversia constitucional entre la Cámara de Diputados y el Poder Ejecutivo.
En Veracruz, Alfonso Ramírez Cuéllar, presidente de la comisión investigadora del rescate bancario, informó que integrantes de este grupo de legisladores acudirá ante la PGR para solicitar que ésta declare como "tercera afectada" en el fraude en cuestión.
"También Miguel Alemán ųgobernador de Veracruzų está involucrado en el manejo irregular de los recursos de Aeroméxico con fines electorales y de comprobar las acusaciones de De Prevoisin tendrá que renunciar al cargo que actualmente ostenta", aseguró.
Luego de la orden de aprehensión en su contra, el ex director de Aeroméxico huyó del país en diciembre de 1994. Inicialmente viajó a Francia, donde eludió dos solicitudes de extradición del gobierno mexicano con fundamento también en su doble nacionalidad (franco-mexicana).
En París argumentó que los ocho millones de dólares entregados a un fideicomiso del PRI habían sido bajo presión y que la persecución de la PGR obedecía a razones "altamente políticas".
Posteriormente huyó a Suiza, donde finalmente fue detenido por las autoridades de Lousanna, a petición del gobierno mexicano en abril de 1998. El Tribunal Federal de Suiza rechazó la última solicitud del presunto defraudador, con lo que procedió la extradición.
Por su parte, la PGR reforzó sus acusaciones de que el empresario había utilizado como garantía las propiedades y acciones de Aeroméxico para obtener diversos créditos a título personal.
En total, Gerardo de Prevoisin produjo un quebranto patrimonial de casi 57 millones de dólares y 35 millones de pesos, aunque los abogados de Aeroméxico exigen una reparación de daños y perjuicios cercanos a los 123 millones de dólares.
Tras la intensa persecución, el ex director de Aeroméxico pisó suelo mexicano ayer alrededor de las 19:45 al descender con las manos esposadas al frente, del boing 767, vuelo 002 procedente de Madrid.
El presunto defraudador fue presentado ante los medios de comunicación durante un minuto y medio, a unos 30 metros de distancia de los reporteros y alumbrado apenas por un reflector de cámara de video casera. Luego, el personal de la PGR lo sometió al examen médico de rigor y 45 minutos después inició el viaje por tierra hacia el Reclusorio Sur.
Por la tarde, el procurador Jorge Madrazo Cuéllar había confirmado la llegada de De Prevoisin a la ciudad de México. Durante su comparecencia en la Cámara de Diputados y a pregunta expresa de la perredista Guadalupe Sánchez Martínez, el procurador externó su confianza en que el juez no otorgaría la libertad caucional al ex directivo.
A su vez, el panista Diego Fernández de Cevallos pidió para Gerardo de Prevoisin una investigación y un proceso apegado a derecho para que al final una sentencia justa sea la que diga la última palabra.
Abogado del ex director de Aeroméxico durante un breve periodo, Fernández de Cevallos demandó también distinguir entre las responsabilidades penales o civiles de su ex cliente con lo que pueda ser "todo un proceso de investigación y de rectificación por el atascadero que hizo el PRI con recursos públicos en la campaña presidencial de Ernesto Zedillo". José Galán, Juan Manuel Venegas, Ciro Pérez, Olga Valenzuela y Andrés Morales, corresponsal)