n A prueba, la capacidad de la UNAM para gobernarse

Llama Limón Rojas a flexibilizar posiciones en el paro universitario

n Cuestionan diputados el resultado del programa educativo

n Mientras el PRD lo reprueba, el PAN dice que es muy pobre

Juan Antonio Zúñiga n El secretario de Educación Pública, Miguel Limón Rojas, hizo un llamado a " no temer al diálogo", flexibilizar sus posiciones y a no permitir "que intereses ajenos intervengan en las decisiones que sólo a la UNAM le conciernen".

Al comparecer ante las comisiones unidas de Educación, Ciencia y Tecnología y de Cultura de la Cámara de Diputados, Limón Rojas dedicó casi una tercera parte de su intervención a discernir sobre la huelga que tiene paralizadas las actividades en la UNAM por más de cinco meses.

Estoy convencido, planteó ante diputados de las cinco fracciones parlamentarias, "de que se requiere un análisis profundo y objetivo de la situación que guarda nuestra universidad nacional", la cual, como en todo conflicto -puntualizó- presenta puntos de vista divergentes, "por lo que sólo el análisis conjunto podrá esclarecer las causas que le dieron origen para dar paso al encuentro de soluciones".

Precisó que es altamente preocupante que este diálogo no haya podido establecerse "en una institución que tiene como sustento el ejercicio de la razón", y aclaró: "Al otorgar el Estado la autonomía a la universidad, se confió en su capacidad de autogobernarse, y precisamente esa capacidad es la que ha estado a prueba durante cinco meses".

La presentación central del secretario de Educación Pública, que le llevó escasos 15 minutos en una comparecencia de casi cuatro horas, permitió al funcionario expresar que la inactividad en la UNAM "es frustrante y dañina no sólo para la universidad, sino para la nación, por lo que es indispensable encontrar una vía que considere la necesidad de replantear todos aquellos temas que tienen que ver con la vida de la institución, con la necesidad de actualizar su estructura y formas de tomar decisiones, pero que se recobre cuanto antes la vida académica universitaria".

Luego, Limón Rojas dedicó un breve espacio a analizar en términos generales las posturas encontradas en el conflicto universitario.

En ese sentido, señaló que "hay estudiantes, maestros e investigadores que sostienen posiciones intransigentes porque consideran estar luchando a favor de la justicia y por la construcción de un mejor futuro. Pero es indispensable que reflexionen acerca de que la universidad no puede cumplir con el papel que ellos desean asignarle como bastión de algún tipo de activismo político".

Sobre esta posición abundó: "La experiencia histórica ha probado que ese no es el rol de la universidad, la cual es un espacio para la discusión libre de las ideas, en el que se forman profesionales e investigadores que contribuirán, por medio del conocimiento, a solucionar los grandes problemas nacionales".

En cuanto a la caracterización de la otra postura en pugna expresó: "Hay estudiantes, maestros, investigadores y autoridades que sostienen su posición en algunos principios y prácticas que se han considerado indispensables para mantener la disciplina propia de la academia. Sin embargo, los nuevos tiempos y la creatividad exigen hacer compatibles la disciplina, que requiere conocimiento, y la investigación, con formas más amplias de participación",

Una vez hechos esos planteamientos, el titular de la SEP exhortó a las partes en conflicto a buscar "la manera de acercarse, no temer al diálogo ni pensar que la conciliación es claudicación". Son tiempos nuevos, agregó, "en que los liderazgos autoritarios de cualquier signo no deben tener lugar".

Limón Rojas, quien enfrentó a una oposición tenue, postuló que "la imposición unilateral no soluciona los problemas", y una vez más reiteró que se deben establecer mecanismos que permitan plantear y analizar las circunstancias, factores y elementos que se presentan en el conflicto universitario para elaborar propuestas de solución.

Sin mencionar la propuesta formulada por ocho reconocidos profesores eméritos de la UNAM, el funcionario gubernamental planteó que "la vuelta a la vida académica no implica que las reformas necesarias no se vayan a realizar", y concluyó su disertación con el siguiente exhorto: "Esta es la gran oportunidad de la comunidad universitaria. No permitamos que intereses ajenos intervengan en las decisiones que sólo a ella le conciernen".

Asignaturas pendientes

Los planteamientos de los partidos de oposición se centraron en debatir las cifras que presentó el presidente Ernesto Zedillo en su quinto Informe de Gobierno, y por el lado del PRI se respaldó la política seguida en materia educativa.

Por parte del Partido del Trabajo, Ricardo Cantú planteó que el gasto presupuestal en educación ha resentido una constante caída desde hace 20 años, hasta representar 4.1 por ciento como proporción del producto interno bruto (PIB), cuando la recomendación de la UNESCO establece como mínimo 6 por ciento. Limón Rojas aseguró, por su parte, que esa proporción representa 5.5 por ciento del PIB, a lo que el diputado petista refutó que esa cantidad sería así si se incluyen, como hicieron, los gastos que realizan las escuelas privadas. Por lo que propiamente quedaron tablas.

La legisladora Leticia Villegas Nava, de Acción Nacional, calificó de "pobres" los resultados alcanzados en educación durante este gobierno, en particular en lo que se refiere a la calidad de la enseñanza; pero el secretario de Educación tampoco coincidió con esa óptica, y enlistó por lo menos ocho acciones emprendidas por este gobierno, que casi de manera natural debieran dar como resultado un mejoramiento de la educación.

Por parte del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el diputado Primitivo Ortega Olays de plano reprobó al sistema educativo nacional. Aseguró que se sigue una política privatizadora, sistemática y gradual "a espaldas de la población, que la educación especial para jóvenes y niños con aptitudes disminuidas ha sido prácticamente abandonada, y acusó al rector de la UNAM, Francisco Barnés de Castro, de entorpecer la solución al conflicto.

Pero Limón Rojas reprobó al legislador perredista, y aclaró que no coincide ni con los planteamientos ni con las cifras de Primitivo Ortega.

En representación del PRI, el legislador Lino Cárdenas Sandoval aprobó con MB tanto al sistema educativo nacional como a Limón Rojas, y se limitó a externar su preocupación porque los recursos que se destinan al fomento de la investigación científica equivalen a 0.47 por ciento del PIB. Inquietud que compartió Limón Rojas.