n Escribió el libro Crítica de la razón arrogante
Pereda: el silencio es el peligro más serio, pero debe asumirse
n La historia es siempre del dolor y del engaño, dice el filósofo
César Güemes n La filosofía, la razón, el conocimiento y la arrogancia que los envuelve, lejos de ser parte de un mundo externo, tienen los pies en la tierra. Es por ello que Carlos Pereda se abocó a escribir Crítica de la razón arrogante (Taurus), libro en el cual aborda cuatro variantes del asunto a las que llama panfletos civiles. Con el autor de Conversar es humano y Razón e incertidumbre, es la charla.
ųLa arrogancia de la razón, como se plantea en el libro, se parece mucho a la actitud arrogante de la ignorancia. El caso es que la arrogancia es un mal generalizado.
ųDiría quizá que la razón arrogante, por más razón que sea, siempre es una forma de la ignorancia. En el primer apartado trato de mostrar que la arrogancia es un elemento de los más bien repartidos del mundo. Está presente en la academia y en la antiacademia o en los intelectuales.
''La arrogancia de la academia se caracteriza por cierto analfabetismo disciplinario; sólo se puede leer lo que la corriente de pensamiento en la que se está permite leer. Se da un vocabulario prestablecido que no entienden las personas ajenas a esa secta. El analfabetismo de los intelectuales es el otro: en recientes tiempos se manifiesta a partir de que sólo se lean diarios y revistas, pero hay incapacidad para acudir a textos de largo aliento.''
ƑVicio solapero?
ųƑEste analfabetismo entre la capa intelectual, lo detecta en México?
ųEn todas partes, en México, América Latina, Europa y Estados Unidos. Hay una especie de vicio solapero. Hay quien, cuando mucho, se limita a leer reseñas en las revistas de ''alta cultura" y con eso se participa en una conversación.
ųƑPudo hacer un libro de título Crítica de la humildad de la razón?
ųSí, pero es más interesante hablar de la patología y de la enfermedad que de la salud. Los seres felices no tienen historia, decía un escritor. La historia es siempre del dolor y del engaño.
ųƑQué lo lleva a escribir este nuevo libro?, Ƒel cansancio de la arrogancia intelectual?
ųSi bien el tema general es la arrogancia de la razón, la estudié de diferente manera en los cuatro apartados. Cada uno respondió a una motivación diferente. Por ejemplo, el que aborda la defensa de la primacía de la moral intenta mostrar cómo a lo largo de casi todo el siglo XX la moral tuvo mala prensa, tanto práctica como teórica. Nadie se atrevía en los medios a hablar de moral para no sonar como la tía soltera o como hipócrita. En la teoría tampoco se abordó porque el marxismo consideró a la moral como supraestructural, lo importante eran los procesos económico-sociales. El neopositivismo, por su lado, tampoco le hizo espacio a la moral más allá de lo emotivo, o sea nada.
''En los años ochenta y principios de los noventa, el tema comenzó a recobrar prestigio. Si hoy uno se fija en cualquier diario o programa de televisión, incluso los cómicos, de nuevo se habla de volver a los valores, de la ética pública y demás. En la teoría, por todas partes, se publican libros de moral. Vuelve a ser un personaje favorito. Mi trabajo fue preguntarme si ganamos con ese columpio y qué es lo que se ha ganado."
ųA los capítulos les llama ''panfletos civiles", de modo que hay autoironía al abordar todo esto que se relaciona con la arrogancia del conocimiento.
ųSé que eso suena a contradicción. Por panfleto uno entiende algo que se impone, mientras que la civilidad nos hace pensar en diálogo o discusión. Quise titularlos así porque me gustaría que fueran el comienzo de una discusión. Creo que son esto que señalo en cuanto a que muchos de los problemas que tocan son muy complicados y se acercan a ellos de manera brutal, sin caer en disquisiciones demasiado elaboradas.
Intentar la crítica desde adentro
ųƑQué tan arrogante, Carlos, es escribir un libro sobre la arrogancia?
ųEso no me preocupó, pues pensé que no escribía estos panfletos desde afuera; no me sitúo a un lado de la arrogancia y desde ahí señalo a ''los otros". No, sino que me vi como un participante más de esa zona arrogante e intenté la crítica desde adentro.
ųAlgo que forma parte del tema de su tercer capítulo, el que analiza la identidad.
ųAsí es. Traté de ver cómo todos en algún momento caemos en formas de la arrogancia respecto de nuestra identidad, individual o colectiva. Es fácil llegar al individualismo torpe o un colectivismo ciego. No quise nunca situarme fuera del fenómeno, sino como alguien que es arrogante y por eso puedo autocriticarme y criticarnos. Parto, por ejemplo, de quiénes somos cada uno de nosotros, a lo cual respondo con el planteamiento de problemas contemporáneos como el multiculturalismo, que en México y en América Latina se da en relación con los pueblos indígenas. Ahí trato de analizar cómo la arrogancia incide en la problemática.
ųƑQué piensa de la arrogancia de la crítica, que puede operar sobre el libro?
ųExiste, y lo peor no es que hablen mal de un trabajo, sino que no hablen. El silencio es el peligro más serio, pero todos tenemos que asumirlo cuando se da.