Ť Reunión de ministros


Necesario, preservar y favorecer la pluralidad cultural

Renato Ravelo, enviado, Oaxaca, Oax., 21 de septiembre Ť ''Los ministros (de Cultura) consideran que los bienes y servicios culturales, incluidos los medios audiovisuales, merecen un tratamiento especial en virtud de que son reflejo de las identidades culturales nacionales y regionales", se concluyó en la segunda reunión informal de la Red Internacional sobre Políticas Culturales.

Con representación de 18 países, además de la UNESCO, esta reunión hizo coincidir a los participantes en ''la necesidad, en la sociedad de la información, de preservar y favorecer la pluralidad de las culturas y de las lenguas por la riqueza que representan".

Estuvieron representados, en este encuentro que llegó a su fin, Barbados, Brasil, Canadá, Colombia, Costa de Marfil, España, Francia, Grecia, Hungría, Noruega, Reino Unido, Rusia, Senegal, Sudáfrica, Suecia, Suiza y México. Se contó, además, con un representante del fondo para las artes, de Estados Unidos.

Se acordó, de igual manera, fortalecer los vínculos con el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y la Unión Europea, si bien no se especificó la finalidad de tal estrechamiento:

''La red es un mecanismo flexible, no pretende inmiscuirse en las políticas culturales de cada país", indicó al respecto Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.

Reconocer la diversidad

El encuentro se llevó a cabo en el ex convento de Santo Domingo y la reunión con la prensa, a su vez, se citó en lo que antiguamente era el depósito de desechos, como todavía lo atestiguan los ductos de barro negro en el techo. ƑQué garantías hay, se preguntó, de que la reunión no sería un desecho?

Correspondió a la ministra de Cultura de Canadá, Sheila Copps, contestar que el reconocimiento a la diversidad cultural, como una estrategia contra la globalización, es de suyo una garantía de que la reunión tiene frutos.

El documento, dijo, será llevado en los primeros días de noviembre a la UNESCO, en París, y cuenta con el compromiso implícito de los representantes de ser llevado a sus respectivos países.

Asimismo, se reconoce la responsabilidad de los gobiernos nacionales en la ''protección y promoción del patrimonio material e inmaterial" el cual debe constituir un punto central en las políticas culturales a largo plazo.

Coincidieron, también, en que el concepto de patrimonio ha evolucionado sustancialmente y ''hoy debe incorporar una visión al futuro y comprender la creación cultural contemporánea, así como la participación activa de otros sectores de la sociedad".

El texto en cuestión señala: ''Los ministros consideran necesaria la movilización cada vez mayor y más concertada de la sociedad civil para lograr todos estos propósitos. Por lo cual, además de redoblar sus esfuerzos para democratizar el acceso a los bienes y servicios culturales, se debe ampliar los procesos de consulta con la sociedad para recibir sus prioridades e intereses.

''De igual manera, se ratificó la importancia de la participación de la sociedad en los proyectos culturales. El reto es lograr una acción unificada y establecer una asociación provechosa, con base en intereses y criterios compartidos."