Ť Festival de ajedrez, otro récord de la ciudad para el Libro Guiness


Un domingo con lances de inteligencia

Ricardo Olayo Ť Cuauhtémoc Cárdenas abrió la partida con las piezas blancas. Peón 4 Rey, tiró al frente. La celebración en el Zócalo empezaba, el lance de la inteligencia, como le llamó el director del Instituto de Cultura de la Ciudad de México, Alejandro Aura, estaba en marcha.

Un nuevo récord para el libro Guiness estaba en curso. Si el 6 de enero fue el de la Rosca del Milenio, ahora el Gobierno del DF convocó a 5 mil 49 jugadores, quienes, simultáneamente, compitieron con 192 maestros del ajedrez, todo distribuido en forma de un gran tablero de 80 por 80 metros sobre el Zócalo, lo que hizo ver minúscula a la llamada concentración contra la impunidad.

El Primer Festival de Ajedrez de la ciudad de México inició a las 10 de la mañana. Con un breve discurso del jefe de Gobierno, Cuauhtémoc Cárdenas, quien dijo que el "juego del pensamiento" es oportunidad para juntos lograr transformaciones en la convivencia social, y deseó a todos los jugadores "mucho éxito".

Bajó del estrado a un gran tablero, y ahí decidió su jugada con el peón y vino la respuesta de un menor que era su contrincante.

ajedrez-zocalo-jpg Empezó a destilarse destreza en el resto de las partidas. Cárdenas se quedó quieto sobre el tablero, cerca del alfil, para responder a los reporteros y lanzar una crítica a Vicente Fox por el uso que hace del estandarte de la Virgen de Guadalupe. Avanzó hacia el rey, y salió del escenario.

Como en ocasiones anteriores, surgió la sonrisa entre los funcionarios por la respuesta ciudadana por este tipo de actividades.

Para la secretaria general de Gobierno del DF, Rosario Robles, el acto fue un éxito, y es una prueba de que es posible tener otra relación con los ciudadanos

Más allá de los 5 mil 49 jugadores registrados ante notario público, llegaron otros mil 500 que participaron en una segunda ronda, y que fueron muestra de que la respuesta rebasó la expectativa de participación. En ese público, 30 por ciento eran niños, según el reporte entregado por las autoridades al final de la actividad.

La Plaza de la Constitución, rebosante, lucía un toro mecánico para niños; conferencias de expertos en ajedrez; cursos de manualidades para que los menores elaboraran sus propias piezas; poemas y prosa para el deporte ciencia; talleres de pinturas; cuentistas y, sobre todo, miles de movimientos meditados en cada partida.

Para relajar el músculo, más tarde llegó a cantar Tania Libertad para dar el cerrojazo al festival.

A las primeras de cambio unos jugadores salieron del escenario por una mala jugada, pero se llevaron consigo el ajedrez que regaló el gobierno y que significó el gasto, en total, de un millón de pesos. Muchos de ellos, y quienes llegaron sin registro, se tendieron sobre la plancha de concreto a jugar: el Zócalo era un avispero.

Otros jugadores que dieron más batalla, duraron varios movimientos e hicieron dudar a los maestros. Uno de éstos, Marcel Sisniega, nueve veces monarca nacional, disputó más de 30 partidas y perdió una. En tanto que Gilberto Hernández, el mejor colocado entre los mexicanos ranqueados en la Federación Internacional, ganó los 30 encuentros en que participó.

A los concursantes el gobierno les regaló playeras, gorras y les dio un certificado por su participación. Algunos de los jugadores fueron más allá y pidieron autógrafos a los maestros de ajedrez.

Sin aspavientos, los derrotados recogían sus piezas y se retiraban, siempre caballerosos. Por cierto, no muchas mujeres estaban sentadas tomando parte de las simultáneas.

Casi al concluir, Adolfo Llubere, funcionario del área de Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, animador del festival, levantaba las mesas y sillas para dar espacio a la manifestación convocada por México Unido contra la Delincuencia, que tuvo una discreta cantidad de ciudadanos reunidos por su causa.

Robles, dijo que el festival tuvo "una connotación cultural" y de constitución de una nueva cultura ciudadana. Las actividades que se han realizado en este gobierno, resumió, tienen la intención de poner "una nueva pauta de convivencia cívica y pacífica".

Adelantó que el 2 de noviembre habrá nuevamente Zócalo lleno, con motivo de la conmemoración del Día de Muertos.

Al referirse al mitin contra la impunidad, dijo que "la magna concentración estuvo en el ajedrez, que es la mejor muestra de la lucha contra la violencia: la convivencia", y dijo que se respetó el derecho a la manifestación.

Por su parte, el secretario de Turismo, Agustín Arroyo Legaspi, dijo que el festival mostró a una ciudad en paz, a pesar de los hechos diversos que ocurren cada día en la nación.


Ť 5 mil 49 participantes, nuevo récord Guinness


El Zócalo albergó la más grande partida de ajedrez del mundo

Más de cinco mil ajedrecistas se reunieron en el Zócalo de la ciudad de México en el primer festival de ajedrez, para al unísono estimular su imaginación, su espíritu de lucha y su creatividad, en la más grande partida simultánea de ajedrez en el mundo, que rompe la marca Guinness establecida en Valencia, España, en 1998, con 3 mil 926 jugadores.

En esta gigantesca manifestación del deporte-ciencia participaron 192 maestros ų76 con clasificación internacional de más de 2 mil puntosų, quienes se enfrentaron ante 5 mil 049 aficionados en esta verbena, organizada por la Federación y la Fundación Mexicana de Ajedrez, el Gobierno del Distrito Federal, así como el Centro Cultural El Juglar. Además hubo conferencias, teatro y música (con un concierto de la cantante Tania Libertad).

Los maestros Marcel Sisniega, quien ha sido nueve veces monarca nacional y quien inclusive ya ha derrotado al maestro indio Viswanathan Anand, disputó más de 30 partidas, perdiendo una; mientras que Gilberto Hernández, quien es el mexicano mejor colocado en la clasificación de la FIDE, con 2 mil 568 unidades, jugó también 30 partidas, saliendo avante en todas.

"Estoy sorprendido por el poder de convocatoria de este festival. En ninguna parte del mundo había visto algo similar", afirmó Hernández. Quizá por la formación de las mesas de juego, que era en realidad un tablero gigante de 80 por 80 metros, con 64 escaques blancos y negros; en cada uno hubo distribuidos 92 módulos con un maestro que enfrentó simultáneamente a 30 jugadores.

El encargado de dar la jugada inicial fue el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas, quien dijo: "Quiero agradecerles su participación en este primer festival de ajedrez No se trata de romper sólo una marca Guinness, sino de demostrar que entre todos podemos lograr transformaciones muy importantes en la vida de nuestra cuidad, y en particular en la convivencia social de la misma". (Juan José Olivares)