PANORAMA
Alternativa contra la artritis reumatoidea
En México, más de 3 millones de personas padecen artritis reumatoidea, enfermedad crónica que ataca una o varias articulaciones y provoca desde una inflamación hasta la inmovilización de los miembros afectados por la destrucción del cartílago y el hueso. Los pacientes con esa enfermedad sufren severos dolores en las etapas de agudización.
Por ello, el grupo de investigación de radiofarmacia, del Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ), trabaja en el diseño de partículas radioterapéuticas ųllamadas macroagregados de samario-153ų como alternativa de tratamiento para los pacientes con artritis reumatoidea, con la finalidad de realizar sinovectomía (destrucción de la membrana articular inflamada) por radiación, la cual, mediante una simple inyección intrarticular, es capaz de eliminar el tejido o sinovio inflamado.
Generalmente, los enfermos son tratados en su fase inicial con analgésicos y antinflamatorios, y en las etapas avanzadas son sometidos a la cirugía llamada sinovectomía quirúrgica, ya que la membrana sinovial inflamada de la articulación es eliminada.
El poder de ionización de las radiaciones nucleares puede ser aplicado para destruir tejidos enfermos. Por ello, a nivel mundial existe renovado interés en el uso de los radionúclidos con propósitos terapéuticos, pues los desarrollos bioquímicos y farmacéuticos ofrecen moléculas cada vez más sofisticadas y selectivas.
Al mismo tiempo, los avances tecnológicos en las diferentes metodologías de radiomarcado de biomoléculas, partículas biodegradables o coloides son puntos clave para contribuir de manera significativa al incremento de la especificidad del radiofármaco hacia las células blanco. Es decir, la radiación es depositada selectivamente en tejido enfermo, por lo que a esas técnicas se les conoce también como radioterapia dirigida.
De hecho, en Europa la sinovectomía por radiación ųempleando radiofármacos con disprosio-165 y holmio-166ų es la primera alternativa de tratamiento para la artritis y ofrece varias ventajas sobre la cirugía tradicional: no requiere hospitalización ni rehabilitación, por lo que el costo se reduce significativamente.
En una cirugía, la recuperación posoperatoria es de unos tres meses, mientras que en la sinovectomía por radiación es de uno a dos días. Asimismo, el riesgo en la cirugía convencional es más alto por el uso de anestesia y la posibilidad de formación de coágulos que pudieran provocar una trombosis.
Además, se pretende que las partículas radioterapéuticas de samario-153 puedan también ser empleadas en México para tratar otras enfermedades que cursan con artropatías (articulación atrofiada) inflamatorias en los pacientes con hemofilia, sobre todo en niños. Si bien el tratamiento en éstos puede no ser una cura definitiva, sí les proporcionaría una mayor movilidad y una importante disminución del dolor.
Los estudios en animales de experimentación con las partículas radioterapéuticas de samario-153 ya concluyeron. Ahora se iniciarán los preclínicos en el Centro Médico Nacional Siglo XXI, por lo que se espera que a mediano plazo esos nuevos radiofármacos estén a disposición del sector salud.
Los datos obtenidos por el grupo de radiofarmacia respecto a la preparación de partículas radioterapéuticas fueron presentados durante el 31 Congreso Nacional de Medicina Nuclear (1997), y el equipo médico obtuvo el primer lugar del premio Dr. Santos Briz Kanafany, otorgado al mejor trabajo libre de investigación.