n Zurdos, corto que no recibió apoyo del Imcine
Crear un cine de la cotidianidad, apuesta de Eduardo Márquez
n Fue invitado a los festivales de La Habana y de la ciudad de México
Raquel Peguero n Si bien Eduardo Márquez no está seguro de que ''sea censura, pero podría ser", lo cierto es que su cortometraje Zurdos fue rechazado por el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) y no recibirá financiamiento para posproducción, por lo que ahora espera conseguir apoyo y poder terminarlo.
En espera de que eso suceda -se requiere un fuerte desembolso- tiene listo un primer corte en video, en el que ya se miran ''rebanadas de vida" que cuentan el caótico devenir de un pintor. Dicho así pareciera que no habría nada qué censurarle, pero se trata de una historia fuerte en la que, por ejemplo, se observa una escena donde tres hombres entran a un automóvil a ejercer su sexualidad. ''No es una película gay, aunque aparece uno, pero también figuran bisexuales, heterosexuales, mucho en la línea que trabajo: fin de milenio, jóvenes -de alguna forma involucrados con el arte- en las grandes ciudades".
Rebanadas de vida
Márquez explica que en la escena del auto no se ''ven pelos y señales; sí es violenta, pero miramos cómo se empañan los vidrios, una cara que se estrella en la ventana, cosas así. Hay un perro ladrando a manera de mostrar la animalidad, pero no estoy haciendo cine porno; es una propuesta visual" que le es difícil definir con palabras: ''Mi apuesta es lograr un cine de la cotidianidad en el que el punto de vista, desde donde se observe, sea frío como lo veo y lo vivo".
Producida por La Alcachofa Filmes, que el cineasta fundó con dos amigos hace dos años, Zurdos es el cuarto corto de su carrera y, como los anteriores, lo hizo de manera independiente. Filmado en locaciones de esta ciudad el pasado enero, el financiamiento logró reunirlo después de tocar durante meses varias puertas, con inversionistas de México y Los Angeles, que a pesar de que no sabía quiénes eran, les gustó la propuesta presentada de manera profesional. Muchos de la iniciativa privada se entusiasmaban, pero ''después de leer el guión, nos decían, 'no es para aquí'".
Arañando sus recursos -que en apariencia no lo parecía, porque consiguieron buen equipo- hicieron el rodaje al que invitaron a las autoridades de Cortometraje del Imcine, cuya comisión consultiva no aprobó el apoyo para producción, ''pero nadie acudió. La propuesta no es como estamos acostumbrados, en la que se plantea un problema, se desarrolla y se resuelve. Son como muchas rebanadas de vida que al final dejan algo: una emoción y las ganas de saber más".
Cuando la terminaron, entraron al concurso de apoyo a posproducción del Imcine, pero también fueron rechazados, por lo que hablaron con María Inés Roqué, directora de Cortometraje del instituto, para que les explicara las razones y éstas fueron que ''casi habíamos quedado, pero la propuesta era muy radical y no estaba sustentada por obra anterior, mas que mis tres cortos, por lo que mi propuesta en papel no terminaba de cuajarles".
La sensación que les quedó después de esa experiencia -agrega Marcela Ramírez, miembro de La Alcachofa y productora ejecutiva de Zurdos- es que ''sólo apoyan a los de las escuelas de cine, porque ellos, nos dijo, muestran una trayectoria anterior. Todo el tiempo nos preguntaban dónde estaban nuestros compañeros, pero Eduardo es casi autodidacta -estudió en varios talleres en Nueva York- y yo soy egresada de la escuela de San Antonio de los Baños, de Cuba, por lo que mis amigos están alrededor del mundo".
ƑMatar al género?
Lo que parece, señala Márquez, es que las nuevas propuestas no les interesan y con ello ''están matando el género, porque el corto permite más la experimentación. Pudiendo ayudarnos a formar como directores, como pequeños productores independientes, nos dejaron fuera para que ellos pudieran seguir haciendo cortos bonitos para que vayan a los festivales. Si yo hubiera estado en una escuela, hubiera quedado en esta convocatoria.
''No estoy diciendo que hubiera trampa, pero nos encontramos con cosas que no deberían suceder porque la misma Roqué declaró a la prensa que le interesaba apoyar las producciones de tipo experimental y documental."
Zurdos fue invitado a participar en dos festivales, el del Nuevo Cine Latinoamericano, de La Habana, y el Internacional de Cine de la Ciudad de México. Para poder acudir con la calidad que requiere el esfuerzo, deben concluir todavía la posproducción de imagen y sonido en cine y para ello necesitan 16 mil dólares. Por eso solicitan el apoyo de los cinéfilos para recaudar esos fondos.
Los interesados en contribuir con esa causa podrán depositar sus donativos en la cuenta Bital 04014004576. Mayores informes al 55 84 06 00. Vale la pena ayudarles.