n Aguascalientes del ejido Morelia


Señalan zapatistas inminente agresión de fuerzas castrenses

n Bloquean con piedras y troncos accesos para impedirla

Juan Balboa, corresponsal, Morelia, municipio de Altamirano, Chis., 3 de septiembre n Simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) fortalecieron la vigilancia alrededor del Aguascalientes del ejido de Morelia, ante la amenaza, aseguran, de una inminente agresión del Ejército Mexicano y de la Policía de Seguridad Pública del Estado, a uno de los centros políticos-culturales más importantes del movimiento rebelde.

La carretera que comunica a la Cañada de Altamirano fue bloqueada con troncos y piedras para evitar la circulación de vehículos militares o policiacos; a la entrada principal del Aguascalientes, una centena de indígenas tojolabales se mantienen alertas ante cada movimiento de los priístas, y una muralla humana, integrada por mujeres, se organiza en el interior para defender las instalaciones de uno de los cinco Aguascalientes construidos por los zapatistas en 1995.

Unos 500 hombres de aproximadamente 15 comunidades tojolabales vigilan las montañas cercanas, supervisan cotidianamente el alambrado que protege el centro político cultural del EZLN y se concentran impacientes cerca del auditorio esperando, "en cualquier momento", un desenlace faltal. "Lo defenderemos hasta con nuestra vida", asegura a los periodistas Gabriel, uno de los dirigentes del municipio autónomo zapatista 17 de Noviembre.

Junto con otros tres miembros del ayuntamiento rebelde, Gabriel advirtió que cualquier intento militar de tomar y destruir el Aguascalientes tendrá una respuesta por parte de los indígenas zapatistas; "si entra el Ejército Mexicano va a tener resistencia".

Los dirigentes del municipio autónomo zapatista "17 de Los dirigentes del municipio autónomo 17 de Noviembre informaron que los pobladores han detectado movimiento militar y policiaco en los alrededores del ejido Morelia y no titubean al señalar que los gobiernos federal y estatal "prepararon el plan desde hace mucho tiempo".

Los simpatizantes del EZLN bloquearon por segundo dia consecutivo la carretera de la Cañada de Altamirano y decidieron, en asamblea popular, no permitir la construcción de carreteras ni el paso de unidades de transporte de los gobiernos municipal, estatal y federal.

La situación es tensa en Morelia. El ruido de los helicópteros pone en alerta a los cientos de simpatizantes que protegen las instalaciones zapatistas. La casa donde se ubicaba el Campamento Civil por la Paz se encuentra abandonada, sus inquilinos fueron amenazados y la dejaron para evitar una agresión. Las oficinas del municipio zapatista 17 de Noviembre, ubicado en el centro del poblado, es saqueado por los militantes del PRI.

"Las agresiones han sido constantes. Los priístas y el gobierno quieren que caigamos en las provocaciones y nos enfrentemos con nuestros hermanos indígenas, eso no va a pasar. Lo que no permitiremos es que los ejércitos y la policía del estado quieran destruir el Aguascalientes", reafirman.

Acusan a Juan Villafuerte, uno de los funcionarios del gobierno interino de Roberto Albores Guillén identificado como asesor del grupo paramilitar Movimiento Indigenista Revolucionario Antizapatista (MIRA), de entregar dinero a varios priístas para que acepten la intervención del Ejército Mexicano en el ejido Morelia.