n Cierran pistas de aterrizaje


50% de los pueblos de Las Cañadas quedarán

aislados: López y Rivas

María Esther Ibarra n Con la clausura de las dos únicas pistas de aterrizaje en Comitán y Ocosingo, Chiapas, el gobierno de Roberto Albores Guillén dejará incomunicadas a casi 50 por ciento de las comunidades de Las Cañadas, lo cual forma parte de su ofensiva contra los pobladores asentados en la zona de conflicto, denunció ayer Gilberto López y Rivas, diputado del PRD e integrante de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa).

A su regreso a la ciudad de México, luego de visitar diversos municipios de la entidad, López y Rivas informó que a los propietarios de las pequeñas compañías aéreas se les ordenó desocupar los terrenos porque se iban a instalar ferias permanentes en "beneficio" de la población.

El legislador perredista explicó que ambas pistas de aterrizaje son el único puente aéreo para que los indígenas de Las Cañadas se transporten ellos mismos y a sus mercancías y productos de primera necesidad. Además, indicó que a esa zona sólo se puede llegar por avioneta, tal como hicieron los integrantes de la Cocopa y del PRD, y miembros de ONG que llevan a ayuda humanitaria a los poblados.

Por ello calificó de "diabólico" el propósito de Albores Guillén de "ahogar" aun más a las comunidades de la zona de conflicto, en las cuales hay un campamento militar al lado de cada comunidad.

De acuerdo con los testimonios que recogió en el poblado de Amador Hernández, los militares destruyeron milpas y sembradíos de frijol, se apropiaron de las fuentes de agua y contaminaron el lugar con desechos biológicos y comida. Consideró aterradora la situación, pues "prácticamente es una versión de Pantaleón y las visitadoras, ya que con cada soldado llegan mariguana, alcohol y prostitución. Este impacto en la convivencia de los indígenas aún no se ha analizado, pero tendrá efectos devastadores en sus costumbres", dijo.

Durante su estancia en la entidad, López y Rivas comentó que ante los cuestionamientos formulados al general Fermín Rivas por asentar efectivos del Ejército Mexicano en terrenos ejidales, el funcionario militar se negó a responder, y dijo que eso era competencia del "negociador" político.