La Jornada lunes 30 de agosto de 1999

N de la R

En la edición del domingo 29 de agosto se publicó en la página 21 de este diario el artículo Los detractores de la coalición, del colaborador Arnaldo Córdova. En ese texto el firmante cita, sin entrecomillar ni dar crédito, una opinión vertida en estas páginas por nuestro colaborador Adolfo Gilly, para, acto seguido, calificarla de "una estupidez y una villanía de provocadores muy bien conocidos en toda América Latina y que han venido a asentarse en México para medrar impunemente...".

Esos insultos y expresiones xenofóbicas no son admisibles en el debate que pretende La Jornada.

Ofrecemos disculpas a todos nuestros lectores y, en particular, al colaborador aludido por Córdova.

Solidaridad desde Argentina con Chiapas

Señora directora: Vemos con preocupación cómo la escalada militar se va ya convirtiendo en un ataque descarado y total contra las comunidades en resistencia. Vemos con impotencia cómo los grandes medios ignoran o deforman los hechos que se van sucediendo. No sólo se ha hecho natural el conflicto de Chiapas, el despojo, la injusticia, la indignidad, la exclusión, la mala muerte, sino que además se procura echar un manto de silencio, haciendo que estos hechos clamantes de denuncia, de pedidos de informes y explicaciones, de acciones solidarias, de condenas internacionales, ocupen mínimos espacios, negándoseles la calidad de noticia.

Vemos con dolor, cómo en un mundo que se proclama globalizado, que dice estar cada día más comunicado, más informado, nos haga sentir que Chiapas está a miles de kilómetros de distancia y que lo que allí sucede no nos afecta ni nos modifica. En el horizonte de las urgencias cotidianas, el reclamo de los excluidos, la vida de los indígenas del sudeste mexicano, el genocidio que está llevándose a cabo, su heroica resistencia, son hechos que no merecen tan siquiera una mención.

ƑPreocupación, impotencia, dolor?, Ƒno son acaso estas las sensaciones que nos acompañan durante muchas horas del día?, Ƒcómo convertirlas en solidaridad y esperanza?

Mientras el corazón siga latiendo la vida, mientras la sangre siga corriendo carreteras de sueños de justicia, mientras las lágrimas puedan seguir siendo registro del dolor y la alegría y mientras la voz y la palabra sigan tejiendo cordeles para unir solidaridades, Chiapas no será vencido. Seguirá mostrando que la libertad se construye con esfuerzo generoso, que la justicia es un derecho universal que nos asiste y que la dignidad es un hermoso rompecabezas de acciones cotidianas sembradas a lo largo y ancho de nuestra América Latina.

Los zapatistas abrieron una senda opuesta al camino del poder. Los indígenas chiapanecos que resolvieron caminarlo contruyéndolo, están pagando un precio muy alto en estos días. Miles y miles de desplazados, comunidades acorraladas, territorios atenazados por enormes cantidades de armamentos y fuerzas militares, intentos de aislamientos, destrucción, muerte. El cerco pretende asfixiar el aire cargado de resistencias, de solidaridades nacionales e internacionales. Es necesario que cada voz sea eco del dolor, de la denuncia clara, del compromiso con la verdad.

Cada palabra que se pronuncie puede servir para que una bala menos se dispare. Cada espacio que se garantice puede ser un cerco menos que se cierre.

De nosotros depende. De usted depende. Abra un micrófono, tome su pluma, mueva las rotativas, no esconda la cámara.

El gesto es concreto, la vida lo reclama.

Red de Solidaridad con Chiapas en Argentina

Comunidad del Instituto de Geografía, con la propuesta de los eméritos

Señora directora: Trabajadores administrativos y estudiantes del Instituto de Geografía deseamos manifestar nuestra adhesión a la propuesta suscrita por los ocho profesores eméritos, por considerar que sienta las bases de una salida constructiva al conflicto. Por un lado quedaría suspendido el reglamento que dio origen a la huelga, y por otro, permitiría que la lucha estudiantil fructifique en una discusión mucho más amplia y profunda a favor de una verdadera reforma universitaria que incluya en sus decisiones a todos los sectores de la UNAM. Además de rechazar el uso de la fuerza pública, la propuesta tiene la virtud de haber hallado un mecanismo de seguimiento para revertir la comprensible desconfianza de los paristas.

Jorge López, Arturo García, Salvador Adame, José Juan Zamorano, Mario Arturo Ortiz, José Manuel Figueroa, Ana Patricia Méndez, Cuauhtémoc J. Torres, Francisco Cruz, Oralia Oropeza, Armando Sánchez, Héctor Mendoza, Estela Carmona Jiménez, María del Consuelo Gómez y 44 firmas más.

Opinión sobre un artículo de Adolfo Gilly

Señora directora: Entre las múltiples reflexiones publicadas en las semanas recientes sobre la huelga de la UNAM, la de Adolfo Gilly en La Jornada del miércoles 26 de agosto destaca por su agudeza en el análisis, y al mismo tiempo por la enjundia con que aboga por una salida democrática al conflicto.

Comparto plenamente la propuesta de los maestros eméritos, y me parece que el ver en ese documento intenciones de apoyo a las posturas de la rectoría (como el sector más integrista de los paristas ha manifestado, en un intolerante ejercicio de paranoia maniquea), es suplantar la verdadera responsabilidad política y moral con teorías de la Conspiración. Estas últimas, como escribió Adolfo, "...excluyen tanto la política como la realidad material de las fuerzas en conflicto".

Las ideas y el comportamiento excluyentes del sector que en varias ocasiones ha ganado en las asambleas de los huelguistas de manera antidemocrática debiera ser motivo de una crítica sin ambages por parte de quienes políticamente tenemos el corazón a la izquierda. Por ello me parece un ejemplo de agandalle caciquil la pretensión de los fundamentalistas en el CGH de que en las próximas asambleas sólo participen los activistas comprometidos con la huelga. Suscribo la afirmación de Adolfo Gilly sobre el punto: "Pero tanto el inicio como la solución (de la huelga) deben por fuerza ser decididos por la comunidad de todos los participantes e interesados. Es hora de realizar grandes asambleas sin exclusiones ni manipulaciones y de tomar las decisiones entre todos".

Por último, prefiero que me señalen por no guardar las formas de la "corrección política" que caer en el facilismo que ve en todos los estudiantes no paristas porros manejados por Barnés, o que concibe a todos los huelguistas como heroicos combatientes de la toma de La Bastilla, y por eso reivindico el derecho de sublevación intelectual ante quienes dicen que nada más hay de dos sopas: el cumplimiento irrestricto de los seis puntos del CGH antes de levantar la huelga, o la toma policiaca de las instalaciones universitarias para salvaguardar el principio de autoridad. Los polarizadores creen que todos son de su condición.

Carlos Martínez García

Construyen una barda sin permiso de la delegación

Señora directora: El 23 de agosto los copropietarios del edificio ubicado en la calle de Concepción Béistegui 619, colonia Del Valle, denunciamos ante las autoridades de la delegación Benito Juárez que el locatario Jorge Lamas Carbajales construyó una barda en la vía pública, sin el consentimiento de los copropietarios y, estamos seguros, sin el permiso correspondiente de las autoridades de la demarcación a cargo del señor Ricardo Pascoe Pierce.

El señor Lamas Carbajales tomó una porción considerable de la vía pública para tratar de ampliar su negocio de venta de alimentos y bebidas alcohólicas, lo que afecta el tránsito peatonal y el desempeño cotidiano del resto de los locatarios y copropietarios del inmueble antes mencionado.

El locatario ha aprovechado los dos últimos sábados y domingos -días en que descansan las autoridades de la delegación- para continuar con sus obras de construcción en la vía pública.

María de Lourdes Hurtazo, Amalia González, Juan Martín Puente, Beatriz Almaraz, y 18 firmas más

Rechazan llamados a la violencia vía Internet

Señora directora: Profundamente preocupados por la circulación de un correo electrónico en el que se incita al enfrentamiento entre universitarios, convocando a tomar por la fuerza las instalaciones de CU el primero de septiembre, exortamos a no generar enfrentamiento entre universitarios, no caer en provocaciones, no promover la violencia, y a reflexionar sobre las funestas consecuencias de estas acciones.

Instamos a todos los universitarios a involucrarse en el proceso de diálogo, que es sin duda la única forma de solucionar favorablemente para la UNAM este conflicto.

Invitamos a la difusión y reproducción de este comunicado, así como a tomar iniciativas similares.

Omar Arellano, Verónica Solares, Roberto Garibay, Scarlett Galván, Quetzali Sotelo, Roberto Cozatl, Alejandra Cabrera, Hugo Beraldi, Juan Carlos Hernández, Claudia Wolf, Azalia Servín, Rigel Sotelo, Diana Servín, Iván Reyes y Renato Ramos