La Jornada Semanal, 29 de agosto de 1999



Para documentar una amistad literaria


Alfonso Reyes, vigilante y generoso, publicó, al año de la muerte de Nervo, la primera recopilación de la poesía y la prosa del más popular de nuestros modernistas. Las cartas que aquí publicamos aclaran algunos aspectos del minucioso trabajo de recopilación y de valoración realizado por Reyes. El notable estudioso de Nervo, Gustavo Jiménez, gracias a la generosa ayuda de Alicia Reyes, nos entregó estas cartas que documentan la decadencia, caída y resurrección de la obra de Amado Nervo.



Al otro año de la muerte de Amado Nervo (1870-1919), Alfonso Reyes emprendió en Madrid la primera recopilación de la poesía y la prosa del escritor nayarita. Los veintinueve tomos de la Biblioteca Nueva de José Ruiz Castillo cumplieron sobradamente los propósitos de exhaustividad, limpieza y rigor en el establecimiento y cuidado de una obra que -declaró el editor desde la ``Advertencia'' del proyecto- merecía publicarse a la altura de los clásicos. En repetidas ocasiones, Reyes se enorgulleció de esa labor filológica, sin duda la etapa más encomiable de su ``amistad literaria'' con Nervo; gracias a ésta, el riguroso editor asumiría -ad honores- el cargo de agente literario del ``más amado de los poetas'', para decirlo con el joven Pellicer. Agradecemos a Alicia Reyes la generosidad de permitirnos documentar con estas epístolas inéditas la compleja recepción de Amado Nervo.

Madrid, 1o enero de 1932.

Señor D. Alfonso Reyes

Río Janeiro

Mi querido amigo:

Encantado de la acogida que dio usted a mi pequeño envío de libros. Pídame todos los que quiera, sabiendo que con ello me proporcionará siempre una viva satisfacción. Yo le debo a usted servicios que valen mucho más. Sin contar con el derecho ¡ilimitado! que le dan mi vieja amistad y mi gran admiración a que yo le sirva y complazca siempre.

Me ha hecho gracia esa noticia de la zarzuela de Nervo.(1) ¡Pero aquel hombre ``picaba'' en todo! ¿Y dónde demonios encuentra usted esas cosas? Lástima que este hallazgo y el del material indicado por Genaro Estrada no hubieran tenido otra fecha: aquella de la primera edición de las Obras, en la que todo lo que hubiésemos publicado se habría vendido. Ahora no sé. Tengo el miedo de que sea tarde, de que el mercado de Nervo haya llegado al máximo de saturación. Casi no se venden ya más que los versos, y no todos, ni mucho. En fin, seguiré pensando sobre esto y le consultaré lo que decida. Por hoy creo que quizás no fuese viable más que una selección de todo eso en uno o dos tomos, cuando más.

Primera mañanita del año nuevo y primera cosa que yo hago ésta, tan grata, de comunicarme con usted. ¡Que el 1932 traiga a usted y los suyos todo género de venturas!

Un cordial abrazo.

J. Ruiz Castill

10 de septiembre de 1920.

Al Sr. D. José Ruiz Castillo

Director de la Biblioteca Nueva

Lista, 66, Madrid.

Mi buen amigo: Se sirve usted consultarme sobre la conveniencia de adquirir ciertos papeles de Amado Nervo que don Claudio Santos le propone a usted a título de libro póstumo, cuya propiedad adquirió dicho señor Santos en vida del poeta. Ante todo, y para que dé usted su justo valor a las consideraciones que han de seguir, opino que dichos papeles deben adquirirse. Ahora vamos a cuentas:

Ya sabe usted que por tratarse de tan gran poeta mexicano, y haber tenido usted la bondad de confiarme el cuidado literario de la edición de sus ``Obras completas'', la Legación de México ha tomado bajo su guarda el asegurar la garantía jurídica de esta edición cuya propiedad es de los herederos de Nervo. Al gobierno de mi país interesa que la obra se lleve a buen término sin obstáculo de ninguna clase. He consultado con el señor embajador, que precisamente acaba de llegar, y él me advierte que ningún derecho sobre obra particular tiene validez contra el derecho del autor o sus herederos sobre las ``Obras completas''. Esto, por lo que a la propiedad respecta.

La obra misma de cuya adquisición se trata no es inédita. Parte de ella se publicó en la Revista de América, que publicaban en París mis amigos García Calderón, y parte de ella está formada por artículos que Nervo publicó dispersos, y, en determinado momento de apremio económico, les cambió los títulos para formar con ellos una suite al Tello Tellez. En cuanto al prólogo, no es más que la ``Cabeza'' que Darío publicó en el Mundial Magazine, de París, y que a la muerte de Nervo han reproducido las revistas literarias con profusión.

Pero hay más: en Montevideo, año de 1919, el editor Claudio García dio al público en un tomo in-8o, las Ideas y observaciones filosóficas de Tello Tellez(2) que, como usted comprende, no es más que otra versión, quizá con variantes, y con tal o cual edición o supresión, de la obra cuya venta le han propuesto a usted.

Por lo anterior comprenderá usted que, aunque estimo, por respeto a los papeles de Nervo, y por el deseo de que nuestra edición conserve todas las variantes y formas de los libros que éste dejó a mediohacer o en formas varias, que debe usted adquirir los papeles de que se trata, creo que el precio de venta debe ser proporcionado al valor puramenteÊadjetivo que estos papeles tienen. Ante todo, le aconsejo a usted la adquisición por no lesionar ``intereses ajenos'', por muy secundarios que sean, y para dejar mejor puesto el nombre, ya muy alto, de su editorial.

Creo que con estos elementos de juicio, puede usted discutir con el vendedor las condiciones y precio de venta.

Me pondré de acuerdo con [Enrique Díez] Canedo, y juntos iremos a verlo a usted el sábado por la noche para pasar el domingo a su lado.

Un afectuoso saludo a usted, y mis respetos a su familia.

Alfonso Reye

México, D.F., a 17 de agosto de 1939.

Sr. Don Alfonso Méndez Plancarte

Calle del Fresno, número 193.

CIUDAD.

Mi muy estimado amigo:

He recibido una carta de Buenos Aires, en que Don Santiago Glusberg, de la Editorial ANACONDA, me pide que le ponga en relación con los interesados para hacer una reedición de las Obras de Amado Nervo, antes publicadas por la Biblioteca Nueva de Madrid. Se ve que él ignora que esto se está ya haciendo aquí, y por muy buenas manos.(3) De todos modos, yo me he permitido decirle que se dirija a usted, autorizado como ninguno para explicarle la situación.

Otro asunto: el poeta cubano francés Armando Godoy (Villa Argentina, 12 Bd. De la Foret, La Rosiaz, Lausanne Suiza) me ha mandado el artículo que acompaño, pidiéndome que, traducido al español, se publique en México. Si a usted y a su hermano les parece bien, podrían darle acogida en Abside. Sin compromiso, naturalmente.

Asunto final: cuando usted tenga una tarde libre, avíseme por teléfono en la mañana, al 22209, para tener el gusto de esperarle en casa y examinar juntos algunos papeles de Nervo.(4)

Le saluda muy afectuosamente y queda a sus órdenes su amigo y servidor.

Alfonso Reyes.

Av. Industria, 122.

(1) El 14 de octubre de 1899, en el estreno de Consuelo, Nervo fue ovacionado repetidamente en la Ciudad de México. Desafortunadamente la obra sigue perdida, a pesar de las noticias y reclamos de Francisco González Guerrero en 1951. En su crónica dominical del 22 de octubre de 1899, Nervo dejó una nota sobre su paso irrepetible sobre los tablados.

(2) Un par de variantes de esta edición se utilizaron, en efecto, para el establecimiento del volumen XIX de la Biblioteca Nueva: Las ideas de Tello Tellez y Como el cristal.

(3) Se refiere a las segundas Obras completas de Nervo; éstas, publicadas en México por Ediciones Botas, bajo el cuidado de Gabriel Méndez Plancarte y con el mismo establecimiento filológico de Reyes en Madrid. Sobre sus avatares con ``las barajas que Nervo hacía de libro a libro'', véanse las amenas cartas a Enrique Díez Canedo y Genaro Estrada (volumen IV) y a Juana de Ibarbourou, volumen VIII de las alfonsinas Obras completas del FCE.

(4) Los poemas postreros de Amado Nervo, escritos en Buenos Aires para Carmen de la Serna, tía del Che Guevara. En 1943, Alfonso Méndez Plancarte los publicó con el título La última luna en las Poesías completas de Espasa-Calpe.