n Gritan, cantan, exigen: "fuera el Ejército"


"Paz con dignidad", el mensaje grabado en frentes zapatistas

n Solidaridad tzeltal y tojolabal con los de Amador Hernández

Hermann Bellinghausen, enviado, Altamirano, Chis., 25 de agosto n Las agresiones contra las comunidades indígenas se han incrementado en cuestión de días en distintas partes del extenso Chiapas indígena. Hoy marchan aquí los tzeltales y tojolabales de este municipio, atrozmente dividido por la inversión social, la contra- insurgencia educativa y el avance sostenido de las posiciones del Ejército federal.

A ellos les pegan, pero hoy están aquí por los de Amador Hérnandez, a quienes les están pegando. Y todavía no saben que en el poblado tojolabal de San José La Esperanza el Ejército, además de pegar, está disparando contra los campesinos.

Por unas horas, esta hostil cabecera municipal, recobrada por el PRI luego de un fugaz gobierno perredista, se llenó de zapatistas, que aquí son despreciados y temidos. Pero no faltó gente de esta ciudad mestiza dispuesta a tender un cinturón frente a la policía antimotines; fue su manera de apoyar y acompañar la manifestación indígena.

En este momento se celebra un acto similar en la cabecera de Ocosingo. En Amador Hernández, el Ejército retira la serpentina cortante del camino y la pone en torno a su campamento, dejando claro que no se retira. En Miguel Alemán, municipio de Tila, Paz y Justicia disputa internamente por el dinero gubernamental (ya hubo un muerto) y enseña los dientes contra los zapatistas. En Chilón unos Chinchulines que no se nombran hacen lo propio, como lo acaban de hacer en Nuevo Momón los priístas de El Edén: bloquear violentamente los caminos. Ahora, en San José la Esperanza son heridos de bala Hermelindo Vázquez López y Francisco Vázquez Vázquez.

Todo, en el mismo momento, o casi.

No obstante, esta marcha es pacífica, conciliadora con los demás indígenas, y pese a su gravedad, algo festiva.

Alrededor de la plaza

"Paz con dignidad" dicen en su frente todos y cada uno de los indígenas con pasamontañas, alrededor de mil 500, que rodean la plaza de esta cabecera municipal. En un trapo, una cinta o un papel de color, blanco, cosido, amarrado o pegado, el mensaje está en todos los pasamontañas. Pues hoy llegaron de los pueblos y ranchos del municipio autónomo 17 de Noviembre, todos y todas con sus diademas.

Proceden pues de una región tzeltal y tojolabal donde las políticas contrainsurgentes se han aplicado con puntualidad y recursos suficientes durante los últimos cinco años. El bombardeo de la política social del régimen ha producido división y un creciente peligro de violencia. Ha sido conspicua la presencia en la región del ex diputado priísta y hoy funcionario de la secretaría de Gobierno, Juan Villafuerte. Varias cartulinas en la marcha de hoy lo mencionan y piden que se vaya. A él se atribuye la coordinación del MIRA (Movimiento Indígena Revolucionario Antizapatista), y en odo caso ha sido el operador civil de los golpes paramilitares, policiacos, y militares sobre Taniperla, La Trinidad y otros lugares de Ocosingo y Altamirano. Estos días se le puede encontrar, operando, en Amador Hernández.

Precisamente la invasión militar de Amador Hernández es la causa de esta concentración, a la que dicen que venía otro tanto de indígenas, pero faltó transporte y se quedaron sin llegar.

Se aproxima un caluroso mediodía cuando ingresan a la plaza de Altamirano los zapatistas, precedidos por dos banderas nacionales y una banda de tambores y flautas de carrizo que dulcifica, inevitablemente, lo que es en principio una protesta airada.

Las clases propietarias de Altamirano, que no quieren nada a estos indios, cierran los comercios. La presidencia municipal tiene un cinturón de policías con escudo y hombro con hombro. Atrás los respalda un destacamento de judiciales. Todos muy alerta.

Frente a ellos se instala un cinturón espontáneo de pobladores civiles de la propia cabecera, sosteniendo un lazo, protegiendo a las bases de apoyo que desfilan en círculo. Gritan, cantan, exigen "fuera el Ejército".

Decenas de cartulinas artesanales, algunas incluso maltratadas del trayecto: "No a la prostitución". "Alto a la violencia generalizada de Zedillo y Albores Guillén". "Aunque quieran destruir nuestro Aguascalientes lo defenderemos con nuestra sangre". "Fuera Avelino" (López Cruz, presidente municipal). "Fuera Juan Villafuerte". "Albores, ponte los pantalones, cumple los acuerdos de San Andrés". "Vivan los compañeros de la UNAM".

Finalmente se detienen, y realizan un mitin en el parque, con un buen espacio de por medio separándolos del Ayuntamiento, y del cerco policiaco que es, nuevamente, la cara que les da el gobierno.

Una manta queda extendida tras las tres mesas de madera que sirven de presidium: "Por la resistencia digna de los hermanos del municipio autónomo Emiliano Zapata".

En sus discursos insistirán: "Manifestamos que se respeten nuestros derechos como chiapanecos y mexicanos". Y también: "Manifestamos nuestro apoyo a nuestros compañeros de Amador Hernández que sufren la guerra del mal gobierno".

Mensaje a los priístas

Todos aquí traen consigo los estigmas de las comunidades divididas. La insidiosa inversión social con fines divisionistas tiene en el ejido Morelia, cabecera del municipio autónomo y sede de un Aguascalientes, un caso modelo. A eso se refieren en un documento que los marchistas distribuyen pero no leen, dirigido a los priístas, de Morelia en particular.

"Si algunos priístas se han convertido feroces contra sus hermanos es porque con el dinero del país les compran conciencia, aprovechándoles su situación económica, su ignorancia y su debilidad".

Un graffiti que pinta un joven encapuchado en el kiosko de la plaza, con spray verde, invita: "Hermano priísta, únete a la lucha zapatista".

El manifiesto a los priístas, firmado "fraternalmente", por los "municipios autónomos", dice también: "Ustedes no son priístas, son indígenas. Lamentablemente el mal gobierno les cambió el pensamiento y les metió en la cabeza denominándolos de otro nombre, nunca les dice la verdad de sus planes que tienen en sus mesas para extinguir a los indígenas y nuestra cultura, por los intereses de ellos aparentan estar preocupados por solucionar tu necesidad te regala bombas aspersoras, machetes, palas y casas de vivienda dizque digna pero al final te quedas endeudado, mientras te necesita te dice hermano y compañero pero cuando sale de su necesidad te desprecia y te humilla, el mal gobierno te distrae con migajas que nada resolverá tu grande necesidad y hace que con este engaño dejas de pensar por el futuro de tus hijos, el tuyo y los demás, hace que con esto se aleja tu esperanza para que algún día puedes vivir como un ser con derecho, y no como estás engañado y manipulado".

El mensaje tiene un tono especial; y no sólo por su sintaxis: "Nuevamente aquí estamos presentes los ancianos hombres y mujeres enseñándoles a nuestros jóvenes cómo se deben defender nuestros derechos. Hoy nos acompañan nuestros jóvenes de esta generación, para que en el futuro ellos y nuestros pueblos gocen lo que aspiramos hoy".

Y pasan al punto:

"Nuestra concentración en este vacío Municipio oficial Altamirano, los que pertenecemos el Municipio autónomo 17 de Noviembre, venimos a manifestar y denunciar pacíficamente nuestra inconformidad por los intentos de provocación de guerra que hacen los Señores Zedillo y Albores Guillén, que junto con los corruptos presidentes municipales y Juan Villa Fuerte planean la guerra entre indígenas. Estos señores no sólo están dispuesto a acabar nuestra organización, también están dispuestos nuevamente ver correr sangre indígena que lucha por el reconocimiento de nuestros derechos. La guerra de baja intensidad que actualmente organizan en las comunidades tzeltales y tojolabales, los constantes sobrevuelos aéreos rasantes entre helicópteros y aviones detectores hostigando a nuestras comunidades, a nuestros niños y niñas".

Los manifestantes también expresan inconformidad con "el patrullaje constante de la policía municipal, mezclados con algunos personales del Ejército federal y la Seguridad Pública, usando como punta de lanza el Ejército federal para intimidar nuestros trabajos normales".

El mensaje, también dirigido a la opinión pública y a la prensa, prosigue de manera elocuente: "Nosotros aquí estamos, y usamos conciencia para defender nuestra patria, hacemos presencia pero nadie estamos por fuerza de dinero". Se refiere en cambio, a "la gente que se mueve con la fuerza del dinero, que ayudan a la sucia guerra que aplican hacia nosotros los pobres".

Y concluye, dirigiéndose al gobierno: "Ustedes son los maestros que enseñan la desviación del fondo mexicano, mañana serán más ladrones que ustedes. La vocación de paz que hablan ustedes es la guerra y la muerte. Ustedes hablan de desarrollo pero para dividir a las comunidades indígenas, y siembran la división y la violencia. Ya no podrán engañarnos, ya entendimos nuestro mundo. Por eso aquí estamos y aquí estaremos".

ƑSerá que es orden?

En el acto ante el edificio del Ayuntamiento Maribel lee: "Venimos a demandar la desmilitarización de todo el país", y pregunta: "ƑSerá que es orden de Zedillo iniciar la violencia contra las comunidades?".

Luego expresa solidaridad con "nuestros hermanos de Amador Hernández", y da inicio un "baile regional". Las flautas y tambores de cuero y madera (o tubos de PVC) acompañan a una decena de hombres de impecable ropa blanca tocando maracas suavemente, y mujeres vestidas de colores fosforescentes.

Entre canciones y discursos, se dejan oír los corridos 17 de Noviembre, La tumba de Zapata, Escuchen señores. En el Corrido de los derechos humanos, un grupo de jóvenes canta: "Seguiremos conociendo, los derechos que tenemos, derecho individual, y también los colectivos".

Se agita una cartulina en letras gruesas: "Observar no es delito". Un orador, un hombre de edad, encapuchado como todos, señala a la policía, los funcionarios municipales y la población de Altamirano: "Todos esos que están enfrente no son nuestros enemigos. La lucha que hacemos es por el bien de ellos después".

Otro orador dice: "Todos los policías son hijos de pobre", y en el cordón policiaco se dejan oír burlas y murmullos. El indígena insiste en el tema de la división de las comunidades. Muchos, dice, "están vendiendo su vida por no tener nada, por hambre". Exije la renuncia del edil, Avelino López Cruz.

Una mujer habla al último, en tojolabal. Estos campesinos siempre suenan más elocuentes en su idioma.

Terminan su mitin, reanudan la marcha, le dan dos vueltas más al parque central de Altamirano y se retiran, ordenadamente, por la avenida Ubilio García, la principal de esta población. Todavía alcanzan a gritar una última consigna: "Tomate, cebollas, Zedillo, ya no jodas".


n Miles de simpatizantes pintaron un mural en el ayuntamiento de Ocosingo


Graffiti zapatistas destacan la locura de Albores

Juan Balboa, corresponsal, Ocosingo, Chis., 25 de agosto n En dos horas, unos 4 mil simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) dibujaron en la fachada del edificio del ayuntamiento un mural popular con graffiti en el que destacan con letras rojas la salida del Ejército Mexicano de las comunidades indígenas y, con letras negras, la ''locura del gobernador interino Roberto Albores Guillén''.

Los zapatistas alarmaron a la población ladina durante 120 minutos, tiempo suficiente para tomar simbólicamente el palacio municipal de Ocosingo, el municipio más importante de la zona de conflicto, y repetir, ''las veces que sean necesarias'', que se retiren de manera inmediata los 80 campamentos militares que se encuentran en comunidades indígenas de los Altos, Selva y Norte de Chiapas.

Las principales autoridades de los municipios autónomos del Ejército Zapatista de Liberación Nacional se sumaron hoy al concierto de voces que exigen la destitución del gobernador interino Roberto Albores Guillén, pues lo acusaron de violar la Constitución de Chiapas y de México y lo culpan de provocar una ''guerra entre hermanos indígenas'' y gastarse el dinero del erario estatal en realizar planes y comprar la ''dignidad de hermanos'' engañados y empobrecidos.

La presencia de los 4 mil zapatistas hizo que Ocosingo quedara paralizado: los bancos cerraron, los restaurantes levantaron mesas y sillas, los comercios bajaron sus cortinas, los militares esquivaron pasar frente al grueso de los manifestantes, el presidente municipal y sus funcionarios huyeron despavoridos y, sorprendidos, los elementos de la policía de Seguridad Pública del Estado simplemente se replegaron a sus oficinas, donde por espacio de 120 minutos fueron unos espectadores más del trabajo peculiar del mural y la ruidosa manifestación en el zócalo.

La marcha fue encabezada por cuatro mujeres que cubrían sus rostros con pasamontañas, como todos los demás. Dos de ellas, las más jóvenes, detenían una bandera mexicana; las otras, maduras, llevaban sobre su pecho una imagen de la virgen de Guadalupe y un Cristo crucificado.

Los 4 mil simpatizantes zapatistas marcharon por las principales calles de la ciudad chiapaneca gritando consignas en contra del gobierno del presidente Ernesto Zedillo y exaltando ''la locura'' del gobernador interino del estado, Roberto Albores Guillén.

Se plantaron frente al palacio municipal ante el asombro de la policía, invadieron de graffitis toda la fachada del ayuntamiento, tomaron el asta bandera e izaron una manta en la que estaban escritas sus demandas y, cinco minutos antes de retirarse, desplegaron frente al balcón principal una segunda manta con la imagen del subcomandante insurgente Marcos y una advertencia: ''Zedillo no provoques a Marcos''.

Una marcha con admirable disciplina, sin incidentes, bulliciosa pero pacífica.

En los principales balcones del palacio municipal fueron desplegados los carteles y mantas y en la parte central del edificio, dos jóvenes zapatistas hicieron las últimas pintas al mural colectivo donde estamparon una cruz y dejaron un mensaje: ''Guillén y Adolfo está lista tu cruz''.

El gobierno sigue hablando

de paz y hace la guerra

Dirigentes regionales del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en Ocosingo acusaron al gobierno del presidente Ernesto Zedillo y al gobernador interino de Chiapas, Roberto Albores Guillén, de continuar hablando de paz cuando en los hechos hacen la guerra.

''La economía del país la están utilizando para la guerra entre hermanos mexicanos; el dinero lo están utilizando para acelerar la violencia entre hermanos indígenas con presencia masiva de soldados, más patrullajes, más aparatos militares para rastrear nuestro territorio, más dinero para pagar gentes con 5 mil pesos mensuales a cambio de tomar fotografía a los que luchan por sus derechos negados por siglos.

''Ahora los mandos federales mandan a sus subordinados que incurran en la zona zapatista y que si salen con vida les dan doble sueldo, en caso contrario les indemnizan con doble seguro de vida'', aseguran.

Acusan al gobernador Albores Guillén de ofrecer dinero de ''nuestros impuestos'' a indígenas empobrecidos para que acepten enfrentarse a simpatizantes y bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

El gobierno del estado, agregan, responde con bombas aspersoras y con construcción de brechas y caminos para que los militares y los paramilitares penetren en los pueblos indígenas.

''Ya es inútil, señores Zedillo y Albores, que se desgasten haciendo planes de cómo gastar el dinero de la nación en contra de nuestra rebelión. Sean un poco humanos por lo menos, si no quieren ser mucho no engañen, no manipulen, no se aprovechen de la ignorancia y la humildad de nuestros hermanos indígenas'', demandan.

Las autoridades de los municipios autónomos zapatistas exigieron el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés; la desmilitarización de las comunidades indígenas y el alto a la persecución y al hostigamiento de militares en la Selva Lacandona.

Expresaron su solidaridad con el pueblo zapatista de Amador Hernández y con la lucha de los estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).


n Autoridades de Montes Azules solicitan informes a los gobiernos


Atravesaría un área de reserva el camino proyectado

Matilde Pérez U. n El proyecto del camino de San Quintín a Amador Hernández, propuesto por el gobierno de Chiapas, y por el cual, presuntamente, se incrementó la presencia militar en esa región de la selva Lacandona, sí se introduce en la reserva de la biosfera de Montes Azules, indicó el coordinador del área natural protegida, Román Pérez.

Agregó que el gobierno estatal tendrá que presentar el estudio de impacto ambiental al Instituto Nacional de Ecología (INE), en caso de mantenerse el trazo original para llegar a dos comunidades que están dentro de la reserva. Pero en caso de que el proyecto se mantenga en los límites de Montes Azules, no tendrá que presentar ningún requisito a la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca.

Comentó que las autoridades de la reserva de Montes Azules ya solicitaron mayor información al gobierno chiapaneco para conocer el estudio, el trazo y si tiene los recursos económicos para la construcción del camino. Pero hasta la fecha no han tenido respuesta a su petición, por lo que -dijo- "no hay ninguna seguridad de que ese camino entre a la reserva", decretada en enero de 1978, y que ocupa dos millones 612 mil 300 hectáreas.

La Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente indica que las reservas de la biosfera se constituirán en áreas biogeográficas relevantes a nivel nacional, representativas de uno o más ecosistemas no alterados significativamente por la acción del ser humano o que requieren ser preservados o restaurados (...) En ellas podrá autorizarse la realización de actividades de preservación de los ecosistemas y limitarse o prohibirse aprovechamientos que alteren los ecosistemas.

En Montes Azules, según información del INE, hay nueve mil 822 habitantes, es decir, 3.7 habitantes por kilómetro cuadrado, y en los últimos 35 años la devastación de la selva ha sido descomunal, fenómeno que se acentúo con la apertura de la carretera fronteriza y la exploración y explotación petrolera.

De la superficie que ocupa la reserva, 76.8 por ciento es propiedad comunal, 18.9, ejidal, y 4.25 por ciento es propiedad nacional.


n José Angel Pescador, subsecretario de Servicios Migratorios


Los extranjeros deben respetar las leyes del país

n A los observadores en Chiapas se les ha permitido hacer su trabajo "sin ningún obstáculo"

María Esther Ibarra y Ciro Pérez n El gobierno mexicano no tiene una actitud persecutoria ni está contra la presencia de observadores extranjeros en el estado de Chiapas, pero sí exige que respeten la legislación del país, aseguró ayer José Angel Pescador Osuna, subsecretario de Población y Servicios Migratorios de la Secretaría de Gobernación.

Pescador Osuna indicó que en la entidad chiapaneca hay entre 300 y 400 observadores extranjeros de organizaciones de derechos humanos, a quienes -precisó- se les ha permitido llevar a cabo su trabajo sin ningún obstáculo o complicación.

Empero, dejó en claro que las leyes del país indican de manera muy específica "qué pueden o no hacer", puntualizó en entrevista, al término de la reunión de trabajo con la Comisión de Población y Desarrollo, en el Palacio Legislativo de San Lázaro.

Explicó que los observadores internacionales pueden recorrer el país, hacer reportes de sus observaciones y hacer contactos con organizaciones mexicanas, pero "no pueden intervenir o provocar problemas en comunidades locales, como tampoco inmiscuirse en actividades que tienen una clara connotación política".

A fin de evitar equívocos, Pescador Osuna manifestó que se ha reunido con diversas organizaciones internacionales para explicarles el marco normativo del país en la materia, y por parte del Instituto Nacional de Migración, "a algunas personas se les cita para conocer su status migratorio, con la finalidad de informarles las restricciones que tienen, especialmente en una zona tan delicada como lo es Chiapas en este momento".

Lo anterior, dijo, se "hace precisamente para garantizar la seguridad de los extranjeros en el país y que tengan las mejores condiciones para realizar su trabajo". Empero, subrayó, en caso de que ingresen como turistas y hagan actividades ajenas a ese fin, pues se debe aplicar la ley.

Aseguró que todo visitante extranjero que ingrese al país en calidad de turista tiene la garantía de poder transitar libremente por territorio nacional, incluyendo el estado de Chiapas.

"Procedimientos normales", los

citatorios a periodistas: Migración

David Aponte n El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Alejandro Carrillo Castro, informó a la agencia de noticias estadunidense Associated Press (Ap) que los citatorios a periodistas extranjeros forman parte de los "procedimientos normales" de la Secretaría de Gobernación, en respuesta a la notificación enviada al fotógrafo de origen chileno, Marco Ugarte. El director de AP para México y Centroamérica, Eloy Aguilar, dio a conocer que habló con Carrillo Castro sobre el aviso migratorio entregado a Ugarte, quien fue enviado a Chiapas para cubrir los eventos en el ejido Amador Hernández, ubicado en el municipio de Ocosingo. "Carrillo Castro dijo que no estaba enterado, pero aclaró que el citatorio forma parte de un trámite normal. El corresponsal es bien conocido por la delegación del INM en Chiapas y, aún así, lo citan a declarar", mencionó el también presidente de la Asociación de Corresponsales Extranjeros en México. Ugarte fue detenido el fin de semana pasado en San Quintín, cuando regresaba de Amador Hernández. Posteriormente, recibió una notificación del INM. Tales eventos ya han ocurrido en el pasado, principalmente en los estados de Chiapas y Guerrero. Los periodistas tienen que presentarse ante la autoridad migratoria. De otra manera, los acusan de violar la Ley General de Población, añadió Aguilar.

No van a la escuela 150 niños de padres

evangélicos en San Juan Chamula

José Antonio Román n Resultado de los largos años de intolerancia religiosa en el municipio de San Juan Chamula, Chiapas, 150 niños de padres evangélicos tzotziles no van a la escuela, violando con ello el artículo tercero constitucional, denunció la Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas Evangélicas (Confraternice). El pastor Arturo Farela y representantes de los indígenas de esa zona de los Altos de Chiapas responsabilizaron al presidente municipal chamula, Pascual Díaz López, de esta acción que atenta también contra los derechos humanos, y exigieron la intervención de las secretarías de Gobernación y de Educación Pública, así como del gobernador de Chiapas, Roberto Albores Guillén, para impedir nuevamente que niños de padres evangélicos se queden sin la oportunidad del estudio. Con ésta, suman ya varias las ocasiones en las que las autoridades municipales de San Juan Chamula, que son católicas tradicionalistas, impiden el acceso a la educación de los niños cuyos padres profesan una religión distinta a la que marcan sus "usos y costumbres", y en las que pocas veces se ha visto la participación de las autoridades.


n Recomendación


Preocupa a la ONU el respeto a derechos humanos en México

David Aponte n La Subcomisión para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos de Naciones Unidas manifestó su preocupación por la situación de los derechos humanos y las libertades fundamentales de los mexicanos, en especial de las comunidades indígenas, por lo que pidió al gobierno de México tomar medidas adicionales para mejorar su promoción y protección e investigar quejas referentes a supuestos actos de tortura, ejecuciones extrajudiciales y desapariciones, informó la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todos.

La delegación mexicana que asistió a la reunión del organismo, con sede en Ginebra, Suiza, anunció que la titular del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Mary Robinson, visitará México del 23 al 27 de noviembre para verificar in situ la situación de los derechos humanos.

De acuerdo con información proporcionada por esa ONG, la Subcomisión de Naciones Unidas expresó su inquietud ''por las persistentes denuncias de tortura, ejecuciones extrajudiciales y desapariciones forzadas, así como otras violaciones a los derechos internacionalmente reconocidos cometidas contra comunidades indígenas.

En un comunicado, la Secretaría de Relaciones Exteriores confirmó el llamado de atención del organismo, pero con el matiz de que hubo un reconocimiento a los ''avances positivos'' en materia de derechos humanos en 1998. ''Asimismo, solicita al gobierno mexicano tomar medidas adicionales para poner en práctica su programa nacional de promoción y protección de los derechos humanos''.