n Reunión Woldenberg-González Fernández


No hay deterioro en la relación con

el IFE; sólo es un diferendo: PRI

n Descarta el tricolor que planee recurrir a un juicio político

David Aponte y Alonso Urrutia n El consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), José Woldenberg, y el dirigente del PRI, José Antonio González Fernández, sostuvieron ayer una reunión privada en las oficinas del partido para limar asperezas y acabar con cualquier mal entendido, provocado por el diferendo sobre el consejero electoral Jesús Cantú.

Aun cuando la reunión en las oficinas del dirigente priísta fue "distante" y ambas partes ratificaron sus posturas jurídicas respecto a la decisión del ex contralor Carlos Muñoz, González Fernández manifestó a Woldenberg la "confianza y el apoyo" del PRI al órgano electoral federal, con el propósito de alcanzar comicios transparentes y con alto grado de credibilidad en el año 2000, los presidenciales y del Congreso.

Si bien no hubo ningún acuerdo explícito, el PRI dejó claro al consejero presidente del IFE que su querella en contra de Cantú la dirimirá exclusivamente por la vía legal y dentro de los cauces administrativos. Esto es, se externó que el PRI no iniciaría ningún juicio político ni contra Woldenberg ni contra el propio Cantú.

El representante priísta ante el IFE, Enrique Ibarra, dio a conocer a la prensa que la directiva priísta dejó en claro al presidente consejero que no tiene ningún "pleito" con el órgano electoral, sino un desacuerdo por el caso del consejero Cantú.

"Hay voluntad política de las dos instituciones, del IFE y del PRI, de dar un cauce apegado a la ley rumbo a la elección del año 2000. Y desde luego la visión de Woldenberg, y nosotros la compartimos, es de que el consejo (del IFE) es una institución con capacidad en todos los órdenes para celebrar una eficaz y funcional elección en el año 2000", dijo el legislador priísta.

La reunión privada, el "encuentro saludable" --según Ibarra--, en las oficinas centrales del PRI no pasó de 30 minutos. En la oficina de González Fernández estuvieron también la secretaria general del PRI, Dulce María Sauri Riancho, Ibarra y Luis Farías --este último representante suplente ante el consejo general del instituto--. Los presentes utilizaron el lenguaje diplomático y el manejo político para dar por concluida cualquier "suspicacia" sobre algún eventual pleito entre el priísmo y el IFE.

En la reunión, Woldenberg planteó al PRI que las diferencias entre ambas partes deberían dirimirse dentro de los cauces jurídicos y siempre en la búsqueda de que sea por la vía de la ley como se solucionen los diferendos. En este contexto, el consejero presidente ratificó la legalidad en la actuación del IFE tras la resolución ilegal del ex contralor interno.

Bajo este argumento, dijo a los priístas que no deberían confundirse los diferendos sobre un asunto en particular con el conjunto del vínculo entre PRI e IFE, a fin de evitar que por un caso se involucre toda la relación.

Ibarra dijo a los periodistas que las partes dialogaron sobre el funcionamiento del órgano electoral. En realidad no limaron asperezas, porque no existe un enfrentamiento como tal entre el partido y el instituto. "Se reiteró el respeto del PRI al IFE, de éste hacia el partido. En ese clima se desarrolló la reunión", matizó.

El afán de la directiva priísta está encaminado a disipar cualquier suspicacia o duda respecto de una relación "inconveniente" entre el PRI y el IFE, siguió.

-- ƑPara usted no hubo una tal crisis entre el PRI y el IFE?

--No, no ha habido una crisis en esa relación. Ha habido un diferendo concreto, específico, que está plenamente acotado. Es un diferendo del PRI con el comportamiento de un consejero electoral que, a juicio de quien era el contralor, incurrió en conductas ajenas a la legalidad y a la probidad que debe de tener toda autoridad electoral.

El diputado Ibarra argumentó que el partido de ninguna manera puede asociar a una institución de un andamiaje tan amplio y complejo con un caso personal, como el del consejero Cantú. "Eso sí queremos nosotros precisarlo: el PRI gustosamente tuvo este encuentro con la presidencia del IFE para procesar dentro de los cauces de la normalidad, de la regularidad, del buen entendimiento, las diferencias que puedan o que estén vinculadas con conductas de algún servidor público".

--ƑDiputado, hubo algún pronunciamiento de su dirigente hacia José Woldenberg?

--La reiteración de la voluntad política del PRI como parte interesada, componente integrante del consejo general, de estar atento, participativo en esta proximidad del inicio del proceso electoral. Por supuesto, sin renunciar al ejercicio de los derechos legítimos que, como partido político, tenemos. Pero sí contribuir en todo lo que nos competa a un buen clima, que nos dé una elección con certidumbre y apegada a derecho en el año 2000.

El representante priísta mencionó que el tono del presidente consejero del IFE en el curso del encuentro fue similar al del PRI, principalmente en la disposición de tener una relación respetuosa y productiva con todos los partidos políticos.

Del caso del consejero Cantú, las partes manifestaron su apego a procesar el asunto en forma administrativa, por los cauces de la ley, agregó. Así, bajo la perspectiva que seguirán las vías legales y administrativas, Ibarra dijo que en caso de que hubiera inconformidad con la decisión del nuevo contralor interno respecto de la revocación solicitada por Cantú, "acudiríamos a la instancia superior, esto es el Tribunal Fiscal de la Federación".

González Fernández y Woldenberg sostendrán un nuevo encuentro en las próximas semanas, ahora en las instalaciones del IFE. La primera invitación al encuentro de ayer por la mañana corrió por cuenta de la presidencia del PRI.

 

Discuten ya sobre perfil de contralor

 

Por otro lado, los consejeros electorales ya están analizando el perfil de quien pudiera asumir el cargo que actualmente ocupa de manera interina Alfonso Niebla. Las posturas que se manejan al interior oscilan entre quienes plantean que este debe provenir de la iniciativa privada y quienes proponen que debe surgir del sector público, o incluso de alguna institución como podría ser la UNAM, todo en función de que quien llegue al cargo debe dar confiabilidad para el desempeño del cargo.

Se espera que sea hasta la próxima semana cuando se decida el nombramiento que si bien es facultad del consejero presidente, se ha buscado el consenso entre los consejeros para su selección.

Una vez consensado se convocaría a sesión extraordinaria del Consejo General para que sea aprobada por el pleno y con ello cerrar una parte del conflicto con el PRI, que el lunes pasado impugnó la facultad del contralor interino.