n Al menos 20 heridos por petardos y golpes; culpan a los segundos de la agresión
Chocan huelguistas y antiparistas en CU
Karina Avilés n Un enfrentamiento entre estudiantes huelguistas y no paristas dejó ayer como resultado por lo menos 20 lesionados, unos por golpes y otros por petardos que explotaron durante la riña frente a las instalaciones de la máxima casa de estudios.
Tanto los estudiantes huelguistas como los que se oponen al paro se culpabilizaron mutuamente del lanzamiento de los petardos. No obstante, Jimena Bali, una alumna antihuelga, afirmó que existen "porros infiltrados" en ambos grupos.
Algunos de los reporteros que fueron agredidos, así como fotógrafos y camarógrafos, firmaron una carta en la que aseguran que los petardos lanzados "prove-nían del grupo de los no paristas, quienes agredieron también con monedas y piedras a estudiantes en huelga, padres de familia y compañeros del gremio". Incluso, algunos de los estudiantes antihuelga que arrojaron los explosivos se distinguían por llevar en la cabeza un paliacate blanco, afirmaron los fotógrafos.
Los firmantes de la misiva son : Fernando Castillo, de Mic Photo Press; Gustavo Graf, de Imagen Latina; Víctor Mendiola, de la revista Milenio; Jorge Naranjo, de MVS Noticias; Duilio Rodríguez, de La Jornada; Germán Romero, de la agencia Cuartoscuro; Eduardo León, de La Prensa; Jorge Arturo Bermúdez, de México hoy; Jorge Ontiveros, de la revista Siempre!; Germán Canseco, de Proceso; Enrique Hernéndez Alcázar, del noticiario Detrás de la Noticia; Cecilia Reynoso, de CNI 40; Israel Rojas, de la agencia Eikon; Mauricio Laguna, de La Crisis; David González, Brenda Márquez, Guillermo Corre y Maximino Rojas, así como Luis Octavio Silva Hoyos y Edgar Alonso Colexcua, fotógrafos independientes.
"Síntomas del paramilitarismo"
Todo comenzó cuando los antihuelga rompieron el acuerdo que anunciaron en una conferencia de prensa el domingo, en la cual aseveraron que no acudirían a Ciudad Universitaria sino a las instalaciones alternas de la oficina del rector Barnés.
A las 10 de la mañana, los grupos antihuelguistas se reunieron en el monumento a Alvaro Obregón, en el parque de La Bombilla. Allí, diferentes estudiantes repartieron paliacates blancos a los marchistas, como un "símbolo de paz", aunque huelguistas como El Mosh calificaron el hecho de "síntomas del paramilitarismo, como el Batallón Olimpia".
Antes de salir en marcha, los grupos antihuelga realizaron una votación para decidir si iban a CU o a la sede alterna de rectoría. Las divisiones y desacuerdos se hicieron públicos; incluso, un estudiante dijo por un altavoz: "No es momento de divisiones", puesto que había alumnos que rechazaban ir a Ciudad Universitaria.
La gran mayoría se impuso y levantó la mano a favor de la primera propuesta. De inmediato, y antes de las 11 de la mañana, partieron rumbo a la UNAM.
"La gente quiere chocar"
A su llegada, estudiantes antihuelga pedían mantener la calma; sin embargo, los ánimos se desbordaron. Y pese a que algunos exigían a sus compañeros no avanzar más para evitar enfrentamientos con los paristas -quienes para entonces ya habían formado una valla sobre la lateral de Insurgentes, a unos metros de rectoría-, se siguieron de frente. Incluso, Alberto Cabañas, parte del grupo a favor de la devolución de las instalaciones, afirmó: "La gente quiere chocar".
Al ver la avanzada de los grupos antihuelga, los paristas montaron una valla sobre la avenida Insurgentes, donde comenzaron los enfrentamientos verbales y algunos empujones.
Allí, mientras los huelguistas gritaban: "šCongreso, congreso, congreso!", los antiparo respondían: "šLa UNAM es de todos, déjenos pasar". Alejandro Echevarría, El Mosh, quien se encontraba dentro de la valla de los paristas, señalaba a los otros estudiantes: "Si quieren diálogo, por qué queman las barricadas, šculeros!"
El ambiente se tensó. Los alumnos antihuelga siguieron su paso hasta detenerse en la lateral de Insurgentes, a la altura de rectoría. Los paristas formaron de inmediato otra valla. En el lugar, unos y otros se lanzaron fuertes acusaciones y recriminaciones, y comenzaron los jaloneos.
Los estudiantes antiparo gritaban a los huelguistas: "šFósiles! šGüevones! šClases sí, paro no!", mientras que los paristas respondían: "šPorros! šEducación primero al hijo del obrero!"
Enmedio de los jaloneos, un alumno le espetó a El Mosh: "ƑCuánto te están dando por mantener esto?", y recibió como contestación: "El León cree que todos son de su condición".
Los enfrentamientos verbales subieron de tono. Algunos alumnos antiparistas buscaban el acercamiento físico con los huelguistas; incluso, sus mismos compañeros los jalaban para evitar incidentes.
Un grupo de opositores al paro se desprendió del grueso de la marcha para entrar a la explanada de rectoría por el acceso subterráneo que cruza del estadio Olímpico. Detrás del enrejado estaba un grupo de paristas para impedirles el paso. Momentos después, un Volkswagen de Auxilio UNAM llegó hasta el lugar. Del vehículo se bajaron jóvenes con palos, pero se retiraron cuando los paristas pidieron que se fueran.
Comienzo de hostilidades
Tras más de una hora de gritos, jaloneos, altercados y agresiones verbales, los grupos antihuelga decidieron retirarse. Entonces, a la altura de la barricada de la lateral de Insurgentes que corre de sur a norte, cerca de una oficina de Teléfonos de México, tronó el primer petardo, que cayó dentro de las instalaciones universitarias, donde estaban estudiantes paristas.
Un grupo de los antihuelguistas se enfiló hacia el Eje 10, sobre avenida Insurgentes. Allí ocurrió el primer enfrentamiento a golpes entre ambos grupos. Enseguida, se escuchó la segunda detonación, que hizo correr a los huelguistas hacia rectoría.
Enmedio de la confusión, se lanzó el resto de los petardos (fueron entre seis y ocho estallidos). Uno de éstos alcanzó a Juan Manuel Hernández, camarógrafo de Tv Azteca, quien resultó herido en el pecho y fue trasladado a un hospital del sur de la ciudad.
Otro de los cohetes lesionó a Fernando Castillo, de la agencia Mic Photo Press, quien afirmó que un estudiante antiparista le arrojó un petardo a un huelguista, que finalmente lo hirió a él en la parte superior de la ceja.
Uno más de los heridos por petardo fue el alumno parista Alberto Flores, de Ciencias Exactas, quien de acuerdo con testimonios de sus compañeros resultó lesionado en la pierna izquierda y tuvo una "laceración profunda", por lo que fue llevado a la Facultad de Medicina para ser atendido.
Esteban Ayala, estudiante de Filosofía, también fue alcanzado por uno de los artefactos, que le provocó moretones e hinchazón en las piernas. Otros 12 paristas resultaron heridos, dos por petardo y los otros 10 por golpes.
"Fueron los porros de Derecho"
Sergio Méndez Silva, estudiante parista de la Facultad de Derecho, afirmó: "Yo vi a Luis Javier Guerrero, de la Asociación de Alumnos Universitarios, que daba instrucciones a la gente con paliacate blanco, quienes al momento de que se replegaron y dizque se fueron aventaron los petardos".
Y añadió: "Fueron los porros de Derecho; a mí me consta que él (Luis Javier Guerrero) es porro porque siempre lo acompaña gente extraña y corpulenta".
Por lo menos otros tres antiparistas resultaron lesionados, entre ellos Carlos Montaño y Agustín Domínguez, así como un padre de familia y la policía Victoria Parra, quien acudió a una agencia de Ministerio Público para denunciar el robo de un radio y la agresión que sufrió.
Luego de las detonaciones el grupo antiparo se enfiló de nuevo hacia el monumento a Alvaro Obregón, desde donde poco después partió en marcha hacia las oficinas alternas de la Dirección General de Información.