n Secuestro y acoso sexual en Las Margaritas
Priístas de Chiapas agreden a dos extranjeros y una connacional
Juan Balboa, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 22 de agosto n Una mexicana y dos extranjeros fueron secuestrados durante tres horas por unos 150 priístas del poblado Nuevo Momón, municipio de Las Margaritas. La connacional fue acosada sexualmente y arrastrada por la carretera de terracería durante varios minutos. A los extranjeros les robaron cámaras y rollos fotográficos, libros y objetos personales.
La mexicana Lydia Benita Rangel Lima -médico cirujano y homeópata del organismo no gubernamental Enlace Civil-, la española María José Barcelona, y un vasco, fueron vejados y golpeados por ser presuntos asesores del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
"Te vas a llevar un buen recuerdo de Chiapas; seguro que nunca lo vas a olvidar", recuerda en entrevista la española María José Barcelona. "Nos quisieron quitar nuestros pasaportes", agrega, y "les decíamos que como no estaban uniformados, no teníamos por qué enseñarles nuestra identificación; cada vez que les respondíamos de forma negativa, nos volvían a amenazar a gritos".
La connacional dijo que los priístas los detuvieron después de haber pasado un retén militar en el poblado Vicente Guerrero, el cual, asegura, transmitió la orden para que "fuéramos secuestrados y golpeados" a su paso. Ante el Ministerio Público del fuero común presentó una querella por los delitos de lesiones y amenazas.
En su testimonio ante las autoridades jurídicas (averiguación previa A140/0875/999), la doctora identifica a sus agresores como miembros del Partido Revolucionario Institucional y a algunos sujetos vestidos de soldados que nunca se identificaron.
Señala que a las 23:00 horas del sábado fue interceptado el camión en el que viajaba, a la altura de la comunidad de Nuevo Momón. El chofer se bajó para conocer lo que pasaba. "Los priístas detectaron a dos extranjeros y nos bajaron con violencia". En la oscuridad escucharon los gritos de los priístas: "Los extranjeros son los culpables de la situación actual de Chiapas; son los maestros que vienen a enseñar a los zapatistas".
La doctora Rangel advirtió a los priístas -unos 150, con palos y machetes- que si le impedían el tránsito, "eso significaba un secuestro, al estarme privando de libertades y al obligarme a permanecer en un lugar en contra de mi voluntad". Le respondieron que si de verdad quería conocer el secuestro, la iban a amarrar y la llevarían a la comunidad de El Edén.
Agrega: "Toda la gente que estaba en este bloqueo comenzó a insultarnos y amenazarnos con los machetes que portaban; también dijeron que quienes daban las órdenes eran ellos y no nosotros. Repetían que no querían gente que tenga que ver con los zapatistas".
Cinco personas que se encontraban debajo de un camión jalaron por los pies a la doctora Rangel, tirándola. La arrastraron por lo menos diez metros, la sostuvieron de pies y manos hasta dejarla inmovilizada. La golpearon a puñetazos y patadas, durante 15 minutos; la jalaron del pelo, y empezaron a quitarle la ropa. Un priísta intentó agredirla sexualmente. Otro de los turistas también fue salvajemente golpeado.
Los gritos de la mexicana y el extranjero provocaron que otras personas que se encontraban en el lugar pidieran que los dejaran libres. Sin sus pertenencias, subieron al camión y se dirigieron hacia la cabecera municipal de Las Margaritas.
A escasos 50 metros, un segundo grupo de hombres, con uniformes de militares, los detuvieron; "no eran soldados, son indígenas de la zona que forman parte de grupos de civiles armados", aseguran. Les pidieron entregaran su identificación, lo cual se negaron a hacer. Los dejaron continuar. A varios metros se encontraba otro grupo de diez civiles, que les permitió el paso. Temblorosos, golpeados y cansados, lograron llegar cinco horas después a San Cristóbal de las Casas.