* Reportan descubrimientos significativos de crudo ligero y condensado, y gas


Desde 1992, Pemex informó en EU del hallazgo petrolero en Ocosingo

* Problemas políticos en Chiapas impedirían la extracción de hidrocarburos: publicaciones especializadas

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 20 de agosto * La reducción de la producción petrolera en Tabasco ha llevado a Pemex a acelerar su exploración de depósitos en la zona de Ocosingo y hacia la frontera de Chiapas con Guatemala, según el prestigioso Oil and Gas Journal y expertos en asuntos petroleros entrevistados en Estados Unidos.

Es difícil obtener datos precisos sobre montos y ubicación de los yacimientos de crudo en la región chiapaneca, pero segmentos de un mapa confidencial del sector privado obtenido por La Jornada e informes de fuentes de la industria petrolera sugieren que podría haber sustanciales depósitos en una zona denominada por Pemex como "Sierra de Chiapas" o campo "Petén".

Esta zona incorpora un campo petrolero conocido como Nazareth, a 8 kilómetros de Ocosingo, así como varias zonas y operaciones de perforación petrolera más cercanas a la frontera guatemalteca conocidos como los pozos Lancantún.

 

Las nuevas exploraciones se

concentran hacia el sur del país

 

Las áreas de mayor rendimiento petrolero en México han sido la plataforma marítima de la Sonda de Campeche y los campos Reforma en Tabasco y Chiapas. En documentos registrados por Pemex ante la Comisión de Valores e Intercambios de Estados Unidos (US Securities and Exchange Commission), la instancia encargada de supervisar los mercados bursátiles, Pemex declara que esta región ha producido cerca de 77 por ciento del crudo mexicano. Pero según Oil and Gas Journal, el enfoque de las nuevas exploraciones de Petróleos Mexicanos se encuentra más al sur.

"Después de 10 años de exploración y desarrollo, el enfoque de la atención se ha movido hacia la costa y la Sierra de Chiapas, resultando en un rango de descubrimientos significativos de petróleo ligero, condensado y gas", escribieron Pablo Cruz Helú y Javier J. Meneses Rocha en su artículo publicado en junio de 1998 en Oil and Gas Journal.

Los objetivos de Pemex a corto plazo, según los autores, incluyen incrementar la perforación experimental en estas nuevas zonas para poder documentar el monto preciso de hidrocarburos disponibles en esta área. También informan que la paraestatal está utilizando "datos sísmicos de tres dimensiones" recién adquiridos para identificar zonas de exploración adicional, pero no brindan detalles específicos sobre dónde se están realizando este tipo de operaciones en la zona chiapaneca.

Una de las complicaciones para identificar y analizar los depósitos petroleros en México es que gran número de éstos tiene nombres que no corresponden a ubicaciones geográficas conocidas por el público en general, o identificadas en mapas no especializados, y Pemex difunde muy pocos datos precisos sobre sus exploraciones.

Uno de los primeros informes sobre la existencia de depósitos importantes de petróleo en el sur de Chiapas fue el ofrecido por la Oficina General de Contabilidad de Estados Unidos (GAO, por sus siglas en inglés) en 1992, cuando preparaba un documento sobre Petróleo Mexicano para el Congreso estadunidense, en el que explícitamente se discutió acerca de los significativos depósitos en la zona de Ocosingo. "Funcionarios de Pemex nos informaron que recientemente han descubierto un campo grande en el estado de Chiapas, cerca de Ocosingo", reportó la GAO.

Esa región, aproximadamente a 8 kilómetros de Ocosingo, es conocida por Pemex como el campo Nazareth. En junio de ese mismo año (1992), Oil and Gas Journal reportó que los campos de petróleo y gas "recién descubiertos" en la zona que incluye a Ocosingo habían sido denominados como la provincia petrolera "Sierra de Chiapas".

Los mapas más precisos que existen sobre los depósitos de crudo mexicanos son producidos por el grupo suizo de consultoría privado Petroconsultants, que tiene un acuerdo exclusivo con Pemex para realizar ese tipo de documentos, los cuales después comercializa a las grandes empresas petroleras del mundo por miles de dólares. Un segmento de uno de estos mapas obtenido por La Jornada identifica una cuenca conocida como la región "Sierra de Chiapas", la cual se extiende desde Tuxtla Gutiérrez, a través de San Cristóbal de las Casas, continúa por Ocosingo y después hacia el sur.

La sucursal de Petroconsultants en Houston no respondió a una solicitud telefónica de este diario para brindar más información.

"Hay dos nombres que se usan para esta área petrolera", explicó el experto George Baker, de la empresa Energía, entrevistado hoy vía telefónica desde Houston. "Llaman a esta zona la cuenca Petén o Sierra de Chiapas", detalló Baker. Actualmente, Energía está compilando un banco de datos sobre las principales reservas petroleras de México, y una sección del borrador sobre la Cuenca Petén ofrecida a este diario califica a esta zona como de "alta promesa".

El banco de datos de Energía identifica los campos Nazareth, cerca de Ocosingo, y el llamado Lancantún, que al parecer se encuentra más cerca de la frontera guatemalteca, dentro de esta área.

Los documentos públicos de Pemex no ofrecen datos sobre las dimensiones precisas de los depósitos petroleros de esta zona. Estos campos chiapanecos forman parte de la "región sureña", como lo describe la paraestatal en sus informes a la Comisión de Valores e Intercambios de Estados Unidos, una amplia zona que comprende 9 mil millas cuadradas en los estados de Tabasco y Chiapas. "En 1998, la producción en esta región sureña fue de 621 mil barriles por día. Esta área de producción incluye 88 pozos petroleros con una profundidad promedio de pozo de 5 mil 500 metros", informó Pemex en el documento que se registró ante la SEC como el reporte 20-F, recibido el 30 de junio de 1999.

Las reservas totales conocidas en esta región, según Oil and Gas Journal, fueron calculadas por Pemex en 11 mil millones de barriles, de los cuales, 7 mil 699 millones son "reservas comprobadas", 2 mil 57 millones son "probables" y mil 330 millones son "posibles". Sin embargo, gran parte de este crudo dentro de la "región sureña" se refiere al que se ubica en Tabasco, pero tanto el experto Baker como Oil and Gas Journal creen que Petróleos Mexicanos ha descubierto ahora depósitos "prometedores" en los altos orientales de Chiapas.

Algunos geólogos estiman que hay yacimientos significativos bajo los altos orientales, y mapas geológicos del área Petén-Sierra de Chiapas revelan "formaciones" ricas en esta zona. Los depósitos típicamente se clasifican por las eras prehistóricas en que se generaron, y un mapa obtenido por La Jornada señala formaciones de la era Cretáceo con los nombres de la formación Santa Amelia, formación Lancandón y formación Campur en esta zona fronteriza con Guatemala.

Ha habido pocos comentarios en Estados Unidos sobre los depósitos petroleros en esta zona, pero tanto Oil and Gas Journal como la publicación World Oil han señalado que los "problemas políticos" en Chiapas podrían presentar impedimentos para extraer los hidrocarburos de la zona. "Los disturbios políticos son más importantes que cualquier factor geológico" como obstáculo para el desarrollo del área de Sierra de Chiapas, según observó un reportaje de Oil and Gas Journal publicado en 1996.

El comentarista Bob Scott, en un escrito en la publicación World Oil del año pasado, lamentó los problemas ocasionados por "los revolucionarios" en las regiones de Chiapas y Tabasco.