ASTILLERO Ť Julio Hernández López
La señora Isabel de la Parra, esposa de Roberto Madrazo Pintado, asumió ayer una postura de abierta participación en la contienda priísta por la candidatura presidencial. Ya antes, en Tabasco, la dama en mención había actuado con decisión en favor de los programas políticos y sociales desarrollados por su esposo. Según los publicistas del madracismo, es tanto el cariño de algunos niños rescatados de su miseria por las labores de la señora De la Parra que ellos la llaman mamá Isabel.
Ahora, la esposa del aspirante priísta entró al foro de la contienda interna en un papel inmejorable en cuanto a concitar simpatías y adhesiones: ha denunciado las maniobras con las que supuestamente se agravia a su esposo, cortándole el suministro de energía eléctrica en algunas de sus reuniones públicas y robándole piezas de su propaganda política. Sería, de acuerdo con un posicionamiento publicitario al estilo Alazraki, la esposa de un perseguido político, de un mártir por la democracia, que se decide a denunciar los excesos que el poder comete contra su compañero.
El arribo de doña Isabel al crudo intercambio de golpes bajos llamado elección de candidato presidencial priísta se da luego que la esposa de otro de los precandidatos, doña Teresa Uriarte de Labastida, ha hecho algunos señalamientos y ha organizado reuniones de promoción en favor de su marido. Doña Teresa es, por lo demás, directora del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM.
La postura de ambas damas, esposas de los dos punteros de la contienda tricolor, contrasta con la discreción de las compañeras de los otros dos aspirantes, Manuel Bartlett y Humberto Roque. Es posible que estos dos precandidatos deseen preservar a sus esposas a salvo de los sinsabores que de manera natural acompañan a quienes participan en la política activa, sobre todo teniendo a la vista el tono elevado de agravios que se vive en la contienda por la candidatura presidencial priísta.
Ya antes, Francisco Labastida Ochoa ha conocido de los comentarios adversos que produce el hecho de que su esposa sea, al mismo tiempo que promotora del voto en favor de un aspirante presidencial, directora de un instituto de la UNAM.
Ahora, con su incursión abierta en el foro de las discordias priístas, doña Isabel de la Parra, la esposa de Roberto Madrazo, habrá de recibir de inmediato una cosecha amarga que, entre otras cosas, llevará la mención de que, según los datos antes difundidos y hasta ahora no desmentidos, fue esposa de Cuauhtémoc Hank Rhon, hijo de Carlos Hank González, fallecido años atrás en un accidente de buceo.
De aquella relación, la señora De la Parra tendría un descendiente que ahora forma parte de la familia Madrazo De la Parra. Tal emparentamiento es tenido por muchos como una clara muestra de la urdimbre política y económica habida entre Madrazo y Carlos Hank; un tejido llevado hasta el plano matrimonial, a un grado máximo de fidelidad y agradecimiento, a niveles de intereses defendidos en común.
(Por cierto, aunque sea un dato de menor envergadura: la esposa de Maximiliano Silerio Esparza también ha entrado a la moda de las cónyuges promotoras del voto, ella en favor de Labastida Ochoa en el estado de Durango que mal gobernó su marido.)
Madrazo, Ƒal PRD?
Pero no es sólo en el terreno de la intimidad familiar donde están las especulaciones y la polémica: continúan las reuniones entre Roberto Madrazo Pintado y perredistas a punto de dejar de serlo, como Porfirio Muñoz Ledo y Layda Sansores. El tabasqueño está buscando la apertura de puertas de salida ante la creciente posibilidad de que el 7 de noviembre resulte derrotado por el presidencialismo en la contienda priísta por la candidatura a la sucesión.
Una de sus alternativas es el Partido Democracia Social, que dirige Gilberto Rincón Gallardo y que se perfila como el espacio hacia el que tenderá la escisión perredista encabezada por Muñoz Ledo.
Pero no es esa la única opción que está buscando Madrazo Pintado, pues, aunque usted no lo crea, pretende entablar diálogo con los directivos del partido del sol azteca, en busca de que le hagan un lugar en sus filas. La versión, que en una primera lectura parece absolutamente inverosímil, tiene, sin embargo, argumentaciones políticas que defienden los madracistas: aseguran que Roberto se ha deslindado clara, oportuna e insistentemente de los vicios de la antidemocracia priísta (como el dedazo, la cargada y el tapado), que se ha manifestado abiertamente contra las políticas neoliberales, y que no se asume ni se reconoce como salinista.
Por otra parte, con un pragmatismo absoluto, los madracistas que defienden la tesis de la alianza con el PRD se preguntan, Ƒcon quién debe unirse el cardenismo para repuntar y poder enfrentar al priísmo labastidista, y al panismo foxista, sino con una fuerza escindida como es la de Madrazo? Planteado de otra manera, Ƒcon quién preferirían los perredistas hacer alianza, con Fox o con Madrazo?
Una fuente confiable del PRD aseguró a esta columna que el tabasqueño ha enviado mensajes a la oficina de Cuauhtémoc Cárdenas en busca de concertar una plática privada. Según algunos elementos del equipo de Madrazo, éste no recibió, como temía, una negativa rotunda ni una respuesta grosera. Ni sí ni no, simplemente se dejó el asunto un poco al tiempo, a las circunstancias venideras... (Por cierto, afirman las fuentes perredistas que la única condición puesta por Madrazo es que, en las eventuales negociaciones, no participe su paisano López Obrador)
Astillas: Don Fernando Gutiérrez Barrios está patinando sobre hielo. Tiene elementos firmes para actuar en contra de precandidatos que han violado la normatividad de la elección interna del tricolor, pero no puede porque crearía mártires, en el caso de Madrazo Pintado, o generaría un caos en el sistema PRI-gobierno, en el caso de Labastida Ochoa. Por ello, con las mejores frases posibles, y la mejor caracterización, el veracruzano trata de hacer creer que prudencia y tolerancia no son debilidad, sino sensatez... Por cierto, el tabasqueño sigue teniendo la suerte en su favor, pues consiguió el mejor lugar en las boletas electorales que se usarán el próximo 7 de noviembre... En el PRI se lanzan contra José Woldenberg, anunciando que pedirán juicio político contra él, por el asunto del contralor destituido, y luego reculan... Cuauhtémoc Cárdenas desestimó el programa de gobierno de Vicente Fox, diciendo que es demasiado general, con objetivos compartibles pero sin decir cómo se alcanzarán... Francisco Labastida ha cambiado el tono de su discurso relativo a Cárdenas. Hace días todavía se producían referencias cuidadosas, pero ahora se lanza abiertamente contra el gobierno capitalino, al que considera malo, ineficiente, inepto y abandonado... Pepe Toño se lanza, a su vez, contra Foximiliano. Con tales ocurrencias verbales, el dirigente nacional del PRI podría entrar en competencia con Porfirio Muñoz Ledo, en una especie de juegos florales del 2000... Pero no todo es negativo u oscuro. También hay noticias buenas, aunque sean de otro orden: Francisco Labastida se mostró ayer, en el Salón Riviera del Distrito Federal, como un buen bailador de danzones. Acompañado de su esposa, el sinaloense se movió al ritmo de, entre otras, la pieza clásica, Nereidas. Por cierto, y para demostrar la naturalidad y la sinceridad con la que se fabrican los escenarios políticos priístas, el aspirante a la candidatura al GDF, Roberto Campa Cifrián, esperó veinte minutos afuera del Riviera para entrar y encontrarse de manera "casual" (según nota de la reportera Laura Gómez) con Labastida y, así, intercambiando inclusive parejas a la hora del baile, demostrar que son amiguísimos y que no es cierto que el candidato oficialista Labastida apoya al subcandidato oficialista Jesús Silva Herzog. Si no hay candidato oficial del candidato oficial ųsería la premisa buscada por Campa Cifrián en su encuentro "casual"ų, entonces no habría candidaturas de relleno como la de él mismo... Hoy rendirá su último (al fin) informe de gobierno Rigoberto Ochoa Zaragoza. Habrá qué ver cuántas ocurrencias tiene frente a un Congreso local sin mayoría priísta y un sucesor al que él vetó y combatió.
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