n Critican PAN y PRD la "intransigencia" priísta

Rechazo definitivo del Senado al proyecto de reformas electorales

Andrea Becerril n Con una sola frase, "archívese, con base en lo dispuesto en el artículo 72 constitucional", el presidente de la mesa directiva del Senado de la República, Ignacio Vázquez Torres, puso fin ayer a un debate de varios meses, después de que la mayoría priísta rechazó por segunda ocasión y, por tanto, de manera definitiva, el controvertido proyecto de reformas electorales.

Y aunque en esta ocasión no hubo la ríspida discusión del pasado 8 de julio, cuando el Senado rechazó por primera vez la iniciativa, PAN y PRD le dejaron muy en claro al PRI que "esa intransigencia", "ese actuar mecánico de aplanadora" para defender los intereses del gobierno de Zedillo, es "lo que empuja y motiva" a construir la gran alianza opositora a la que tanto teme el sistema y en la que habrán de insistir "tercamente".

"No nos mueve el aventurerismo ni la necedad política, sino la convicción. Nadie, en este momento puede lograr la transición a la democracia si va solo", advirtió el senador Alfredo Ling Altamirano, al hablar en nombre de la fracción del PAN, durante la sesión de ayer en esa cámara.

Coincidió con el perredista Héctor Sánchez, que le había antecedido en la tribuna, en que "la piedra de toque" de las reformas al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe), rechazadas por el PRI, es esa posibilidad de integración de fuerzas políticas en alianzas o coaliciones.

Así fracasara ese intento "de transitar la historia" entre partidos disímbolos, con ideologías y doctrinas diferentes, "es un hito y un éxito democrático el haber abierto un espacio de diálogo, de discusión, de consenso, que no fue convocado por el gobierno".

Miedo a la democracia

šQué miedo y qué temor le tienen a que en este país efectivamente se legisle para que podamos transitar a la democracia; qué miedo le tienen a perder sus prebendas y privilegios! Por ello, "el PRI y su gobierno le tienen miedo a la unidad de la oposición", advirtió a su vez Héctor Sánchez, al exponer la postura del PRD.

Fue el primer orador, luego de un acuerdo parlamentario entre las tres fracciones representadas en el Senado, que incluía no abrir el debate, como en la pasada ocasión en que se rechazaron las reformas al Cofipe aprobadas por la oposición en la Cámara de Diputados, sino exclusivamente que cada partido fijara su postura.

Ello motivó incluso un incidente, ya que después de Sánchez el presidente de la mesa directiva, Ignacio Vázquez Torres, anunció el turno del PAN. De inmediato, el vicecoordinador de la bancada albiazul, Juan de Dios Castro, desde su escaño hizo una moción y advirtió que se estaba violando el reglamento, pues correspondía ir a tribuna al PRI, con su postura a favor.

"Moción aceptada", respondió Vázquez Torres, luego de unos segundos de indecisión. Desde su lugar, la coordinadora priísta María de los Angeles Moreno reconvino a Jiménez Remus: "šEso no fue lo que acordamos!

"Hasta en eso nos mienten", replicó a su vez, furioso, el panista. "Nos habían dicho que el orador sería Juan Ramiro Robledo y lo cambiaron, y ahora quieren cerrar ellos las intervenciones", agregó.

Y aunque la discusión parecía ociosa, no era así, ya que el PAN pudo refutar lo expresado por el priísta Gilberto Gutiérrez Quiroz, quien insistió en que la ley electoral actual es mejor que el proyecto de reforma rechazado por su bancada.

Tanto Héctor Sánchez como Alfredo Ling Altamirano recalcaron en sus intervenciones la responsabilidad de los legisladores del PRI al oponerse a las reformas que habrían posibilitado una mayor fiscalización de los recursos de campaña de partidos y candidatos y el voto de los mexicanos en el extranjero.

Sin embargo, insistieron, el punto toral es el de la posible coalición opositora. En 1988, expuso el perredista Sánchez, el PRI admitía las coaliciones de manera libre, sin ningún obstáculo, porque "los partidos satélites al gobierno eran los que conformaban las candidaturas comunes".

Por eso ahora, que la oposición en conjunto representa 62 por ciento de los electores, tiene la obligación de encabezar la transición a la democracia, insistió el legislador del PRD.

Sepultaron esta iniciativa "y no nos parece raro que el PRI asuma esta posición, pero no les parezca raro que la oposición asuma su responsabilidad histórica en estos momentos", sentenció Sánchez.

Y Ling Altamirano cerró la discusión al llamar a la racionalidad de los parlamentarios que anteponen el bien de México a sus intereses particulares. "En este ajedrez que hoy se nos ofrece, insistiremos tercamente por transitar hacia un régimen verdaderamente democrático".

Al final, con 58 votos a favor -de los priístas e Irma Serrano-, y 31 en contra -de panistas, perredistas y el senador independiente Pablo Salazar Mendiguchía-, se rechazó el proyecto de reformas al Cofipe, que quedó archivado definitivamente, conforme a lo dispuesto en la ley.

Los priístas estaban tensos, incluso aprovecharon la indecisión de Irma Serrano, que, como siempre, llegó tarde a la sesión, y a la hora de votar se llevó las manos a la cabeza y no sabía cómo sufragar, para gritarle: "Sí, sí", lo que La Tigresa hizo finalmente, entre felicitaciones de Amador Rodríguez Lozano y Juan Ramiro Robledo. "Vota con nosotros que sí te queremos", le decían entre carcajadas, como para aligerar lo pesado del ambiente y alejar la lluvia de críticas que la oposición les hizo.