Ť John W. Smith, director de los archivos del museo del artista pop

Las cajas de Warhol, ''cápsulas del tiempo'' y registro de su cotidianidad

Ť Fue un maestro en la promoción de su imagen, dice Ť La muestra del creador se abrirá el día 17

Merry Mac Masters Ť Al parecer, el artista pop Andy Warhol nunca tiró algo. Coleccionista obsesivo, a raíz de la mudanza de su estudio al 860 Broadway, de Nueva York, Warhol, a principios de los años ochenta, comenzó a utilizar las cajas de cartón desempacadas para guardar los muchos objetos que a diario cruzaron por su vida. Sentado en su escritorio, abría su correspondencia y revisaba la gama de cosas que llegaban a sus manos. Por eso, cartas de admiradores, recados telefónicos, invitaciones a cenar en la Casa Blanca o a una fiesta en un club neoyorquino, revistas terminadas de leer, reseñas de sus exhibiciones, se mezclaron con regalos y objetos tan extraños como un pie momificado y un par de botas vaqueras de cuero blanco. Una vez llena la caja, ésta era sellada, fechada y almacenada.

Preservar el sentir de una época

Si Warhol llamó a esas cajas ''cápsulas del tiempo", fue con ironía porque por lo general estos receptáculos son empleados para conmemorar sucesos de especial trascendencia. Unos cuantos objetos seleccionados con cuidado son sellados especificando la fecha en que la cápsula deberá ser abierta, con el fin de preservar el sentir de la época para las generaciones futuras. Para Warhol, sin embargo, las cápsulas del tiempo no sólo funcionaban en el sentido tradicional, sino como un registro de su vida cotidiana. Al morir, el 22 de febrero de 1987, el artista dejó más de 600 cajas que luego pasaron a los archivos del Museo de Andy Warhol, fundado hace cinco años en Pittsburgh, Pennsylvania, su ciudad natal. Hasta el momento se han abierto cerca de un centenar.

Aunque las cajas sólo forman una cuarta parte del material que integra los archivos, son su ''médula" y la parte ''más fascinante", dice en entrevista John W. Smith, director de los mismos, quien se encuentra aquí con motivo de la exposición Andy Warhol, que será inaugurada en el Museo del Palacio de Bellas Artes.

Aparte de las cajas, está la ropa del artista, objetos que coleccionaba como cerámica, plata; la totalidad de los ejemplares de la revista Interview, que fundó en 1969; los estados financieros relativos a la publicación, información sobre sus películas, sobre las personas que lo rodeaban, los que él llamaban sus superestrellas, así como una biblioteca personal de unos dos mil libros y varios miles de revistas y boletines.

La lista continúa porque se trata de material que Warhol empezó a juntar desde niño. Un antecedente de su interés en las ''celebridades" y la industria fílmica sería el álbum de estrellas de cine que armó cuando tenía once o doce años. Escribía a los estudios de Hollywood solicitando fotografías de sus actores y actrices favoritos, mismas que fueron autografiadas y enviadas de regreso al muchacho. También están las más de 30 pelucas platinadas que se volvieron su emblema inconfundible.

Smith es de la opinión que el material de archivo realza la muestra y ''humaniza" al artista, proporcionando al espectador ''otra manera" de adentrarse en su obra. En la exposición de Bellas Artes, las piezas de cada sala se harán acompañar por material de archivo del periodo correspondiente, complementado con fotografías y carteles de sus películas. Una vitrina, por ejemplo, incluye curiosidades como un disco de la pista sonora de la película Rocky IV y un calendario 1986 de la modelo Jerry Hall, aparte de un estado de cuenta del hotel Bel-Air.

Desde hace un lustro el trabajo de los archivos Warhol consiste en abrir y revisar metódicamente el material de las cajas, catalogando y documentándolo. Si por un lado, mucho del material ''no es de un gran valor investigativo", Smith explica que, por otro, ''sí lo es" debido a la misma importancia de Warhol como artista internacional y figura ''clave" de todo lo que sucedía en los años sesenta hasta los ochenta, en términos de arte, cine, música y moda. El entrevistado acota que Warhol guardó cosas que, en el momento, no tenían valor para otras instituciones, material efímero como hojas informativas underground, periódicos y boletines poéticos, a tal grado que en la actualidad ''nos visitan personas procedentes de instituciones mayores como Harvard, Yale y la Universidad de California, en Los Angeles, que no encuentran estos materiales en sus propias bibliotecas".

Pequeñas revelaciones

Hasta el momento no se ha descubierto nada ''sacudidor" acerca del expositor. No obstante, Smith asegura que el sinnúmero de ''pequeñas revelaciones" respecto de la manera en que trabajaba, las relaciones que mantenía con las personas, el tipo de vida que llevaba, contradicen la idea que se tiene de Warhol, como un ser ''distante, reservado y sin emociones". Si se solía pensar que el artista producía con un estudio lleno de asistentes que en esencia hacían todo el trabajo, eso tampoco es cierto. Se descubrió que estaba involucrado de manera directa con todo lo que hizo y que nada salió de su estudio sin su revisión.

Leyenda viviente como fue, alrededor de Warhol siempre existieron mitos. Para Smith, el artista pop fue un ''maestro" en el fomento y el control de su propia imagen. Fue capaz de manipular su calidad de ''forastero" (outsider) al grado que se volvió ''miembro del grupo" (insider). Por ejemplo, en las entrevistas que daba solía no revelar el lugar exacto de su nacimiento, la fecha o dónde había estudiado. Para Warhol esto era parte de un gran juego cuyo objetivo era mantener a los demás interesados en su persona. Luego, en los libros que publicaba hacía comentarios acerca de cómo le gustaría ser una máquina, aseveraciones que se asociaban con la frialdad. Smith indica: ''Pienso que Warhol gustaba de aquella mala interpretación de sí mismo. Por medio de los archivos encontramos que aquellas explicaciones tal vez conduzcan por el sendero equivocado. Sin embargo, el mundo está activamente ocupado en tergiversarlo. En cualquier comunidad, y ciertamente en el mundo artístico del que Warhol formaba parte, había todo tipo de envidias. Los críticos de arte tenían sus propias agendas que querían promover como sucede hoy día.

''Surgen los mitos, en especial en torno de personas como Warhol, con quien la comunidad crítica, en particular, mantenía una relación tan incómoda. Les fue difícil aceptar que aparte de producir su obra artística, sus películas, editar la revista Interview, Warhol podría estar todas las noches en el Studio 54, cenando con la crema de la sociedad internacional o haciendo retratos que, desde principios de los años setenta, fueron el pan y la mantequilla de su carrera. Resultó difícil reconciliar, por un lado, su evidente genio y grandeza como artista, y, por el otro, su acercamiento práctico y de negocios al quehacer artístico. Fue y sigue siendo difícil aceptarlo debido a esa idea del artista como alguien que siempre debe estar afuera, sufriendo. Ese tipo de mitos no se aplican a Warhol, quien mantuvo un control extraordinario de su propia carrera desde un principio. Fue un hombre de negocios increíblemente astuto."

ųƑFue el primero en este sentido?

ųEn muchas maneras, sí. Es cierto que artistas como Dalí o Picasso fueron legendarios y famosos durante su propia vida, pero creo que Warhol lo llevó a otro nivel. Apareció en la televisión en los años setenta y fue capaz de extender los límites de lo aceptable para un artista serio. Por eso pienso que Warhol significó y continúa significando tanto para los artistas jóvenes, porque les abrió muchas puertas. Hubo quienes argumentaron que fueron puertas que no debieron abrirse, pero eso era inevitable que sucediera y resultó que Warhol fue quien lo logró. Marcel Duchamp fue una influencia obvia. Jean Cocteau, artista que escribió libros, hizo películas y se metió en la moda, fue capaz de desenvolverse en varios mundos, desde el de la sociedad hasta aquellos más decadentes. Ellos fueron precedentes, pero en Warhol todas esas cosas confluyeron de una manera como no lo habían hecho antes para ningún artista.

Mantener un aura de juventud

En términos de legados, Smith señala que el artista pop dejó uno muy concreto con la Fundación Andy Warhol para las Artes Visuales, en Nueva York, cuyo objetivo es proporcionar becas a artistas emergentes y a instituciones que exhiben la obra de estos jóvenes. En cuanto a su legado artístico, el entrevistado siente que éste todavía está bajo revisión en el museo que lleva su nombre y en los archivos: ''Estamos al comienzo de evaluar su carrera completa de manera honesta y abierta. La exposición de México será una adición importante en este proceso".

Smith enfatiza la necesidad de ver el alcance de la producción de Warhol. Apunta que hay 15 años, desde finales de los años cuarenta hasta principios de los años sesenta, que no han sido documentados con detalle porque la mayoría de los historiadores se han concentrado en su trabajo como ''artista serio" a partir de los años sesenta.

Indudablemente, habrá Andy Warhol para rato. A pesar de sus 71 años, este icono de la cultura popular mantiene un aura de juventud eterna y energía que resulta atractivo para las generaciones de nuevos admiradores.

(Andy Warhol incluye 80 obras del artista pop, entre pintura, gráfica, instalación, fotografía y dibujo. La retrospectiva se abrirá el día 17, en Bellas Artes.)