PANORAMA
Cultivo de células cancerígenas
Por primera vez, un grupo de científicos, tras 15 años de investigación, logró producir dos tipos diferentes de células humanas cancerígenas en una probeta, introduciendo tres genes alterados en su ADN.
Con ese conocimiento, el equipo liderado por Robert Weinberg, del Instituto Whitehead de Investigación Biomédica en Cambridge, contribuye con un paso vital para entender la enfermedad, ya que las células cancerígenas presentan ciertas modificaciones genéticas típicas que les permitirían crecer de manera incontrolada.
Los científicos lograron programar en tubos de ensaye células humanas para que crezcan ilimitadamente y continúen dividiéndose sin que mueran o envejezcan.
Ello se logró tomando células del tejido conjuntivo y del riñón, a las cuales se les inyectaron tres genes mutados: uno que divide las células rápidamente, otro que desactiva dos sustancias destinadas a controlar la división excesiva y el último que promueve la producción de telomerasa y hace que las células se vuelvan prácticamente inmortales.
De acuerdo con un informe publicado en la revista Nature, a pesar de que las condiciones son más complicadas en el cuerpo humano, los investigadores aseguran que a partir del trabajo en el laboratorio podrán ampliar su visión de la investigación oncológica general, y al mismo tiempo proponer nuevas terapias.
Con los conocimientos acerca del efecto en conjunto de los tres genes se podrá investigar de manera más precisa cómo adquieren las células cancerígenas las características con las que logran sobrevivir en el cuerpo, y probablemente promover la creación de medicamentos para cada tipo de cáncer, lo que disminuiría el uso de la quimioterapia y la radiación, que destruyen también el tejido normal. (Dpa/Time magazine).