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Zapatistas en Polanco. En un acto de apoyo a un grupo social escandalosamente olvidado ųel de los desplazados de los Altos de Chiapas, refugiados en Polhóų, el miércoles 4, en medio de la lluvia, tres mujeres artistas montaron un campamento de indígenas tzotziles en el corazón de Polanco. Ofelia Medina, Laura Esquivel y Jesusa Rodríguez, al filo de las cinco de la tarde, ocuparon la punta del camellón de la avenida Musset que hace esquina con la avenida Masaryk, y vestidas con la indumentaria típica de las mujeres murciélago se dedicaron a representar la miseria física y la grandeza moral del zapatismo insurrecto.
Con la participación de jóvenes actores de los pedregales de Santo Domingo, encabezados por David Alpízar, que se disfrazaron de soldados y paramilitares, las artistas desarrollaron un happening situado entre la perplejidad, el temor, el desprecio y la burla de la gente bonita, desde la señora incauta que accedió a abrir la cajuela de su carrazo permitiendo que las supuestas fuerzas del orden comprobaran que no llevaba armas para el EZLN, hasta los automovilistas que metieron reversa antes de llegar al borlote y escaparon despavoridos, con toda razón, creyendo tal vez que tratábase de un asalto más o de un secuestro, pasando por el anciano fascista que se declaró partidario de "matar a todos los revoltosos" o por los jóvenes pirrurris que mataban la tarde esperando el futbol en los restaurantes de enfrente.
La iniciativa, ideada por Ofelia Medina a nombre del movimiento SOS Chiapas, que ha surgido para levantar de nuevo el caso de los desplazados zapatistas, cumplió en todo momento con una tarea que fue propuesta por la escritora Laura Esquivel: moler maíz, usando el método tradicional más antiguo, y convertirlo en masa de tortillas. Entrevistada por Las Cabras, el semanario político de Tecamacharco, Jesusa Rodríguez habló al respecto, transformada por la experiencia.
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Maíz se escribe con M de México que algo tiene de W invertida. Habla Jesusa: "Fue Laura Esquivel quien nos explicó el procedimiento y confieso que me avergonzó el haber llegado a estas alturas de la vida sin haber conocido este sistema tan complejo y tan sencillo que da origen a la comida esencial de los mexicanos". Para la directora de El Hábito y El Teatro de La Capilla, las mujeres indígenas y mestizas han hallado en esta práctica ancestral una muy poderosa fuente de energía para afrontar la vida. Cuenta:
"El maíz se pone a cocer en una olla junto con un trocito de cal, hasta que hierve. Después se le deja serenar toda una noche. Al día siguiente agarras un puñito de granos, lo echas sobre el metate y le empiezas a pasar encima la mano del metate, de atrás para adelante, y cada que se reseca lo mojas bañándolo con su propia agüita. Fíjate...". En este punto de la conversación, la actriz se arrodilla en el suelo mostrando gráficamente la postura adecuada en que debe efectuarse el movimiento.
"Los primeros veinte minutos me dio un dolor espantoso en la espalda, pero una mujer indígena que estaba con nosotros me explicó. Es que estás cargando la piedra, me dijo, así no: arrástrala. Y entonces fue muy distinto. Laura Esquivel tenía razón: es un ejercicio maravilloso para la columna, los hombros, las chichis, el vientre. Y después de cuatro horas el cuerpo se te llena de una energía y de una fuerza... No sólo te sientes en paz contigo misma sino que te invade un vigor que no se compara con nada."
Y reflexiona: "Este es un secreto que las mujeres burguesas jamás podrán conocer, por razones clasistas y racistas. Imagínate si una señora de Polanco se va a poner a moler maíz como una indígena. Pero no saben lo que se pierden. Las mujeres mexicanas no sólo hacen gimnasia cotidianamente sino que al final tienen lista la base principal de su comida. Ahora que lo más extraordinario no es eso: lo que está cabrón es sentir cómo lentamente el maíz se transmuta en masa; eso es algo que me gustaría averiguar desde el punto de vista químico, entender lo que sucede con los neutrones y los protones...".
Conclusión final: "En el campamento de Polanco estuvimos en total siete personas, tres mujeres y cuatro hombres. Entre todos hicimos apenas un kilo de masa. Una mujer mexicana que todos los días se levanta y se pone a moler, en dos o tres horas hace cinco kilos, nomás para que veas".
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Moctezuma en la antesala. El número 8 de Las Cabras, que entra en circulación a partir de hoy, revisa la conducta de Moctezuma Barragán, desde el primero de diciembre de 1994: su fallido desempeño durante un semestre en la Secretaría de Gobernación, su etapa en el limbo, su paso por la oficina central del PRI y sus tenebrosas alianzas con Paz y Justicia en la Secretaría de Desarrollo Social, hasta su muy esperada conversión como "coordinador de campaña" de Francisco Labastida.
La revista, en efecto, recuerda que en enero de 1995, después de entrevistarse con Marcos en Guadalupe Tepeyac y anunciar el Pacto de Los Pinos ųque propiciaría las renuncias de Roberto Madrazo y Eduardo Robledo a los gobiernos de Tabasco y Chiapas, así como la reanudación del diálogo con el EZLN y la fijación de reglas claras para la democratización del paísų, Moctezuma conversó en privado con un periodista de Reforma, con el cual sostuvo el siguiente diálogo:
ųEsteban, para instrumentar el Pacto de Los Pinos, Ƒte basaste en el Pacto de La Moncloa?
ųNo exactamente. Yo lo he estudiado muy bien y te aseguro que el Pacto de La Monclova (sic) es otra cosa.
En el artículo que recupera esta anécdota, firmado por Serapio Bedoya, el director del semanario, se asegura: "Las líneas maestras del efímero Pacto de Los Pinos fueron trazadas no por Moctezuma Barragán, sino por el propio subcomandante Marcos. No es que el vocero del zapatismo le hubiese tirado línea al enviado de Zedillo, sino que planteó una serie de condiciones básicas para reiniciar la negociación en busca de una salida política al conflicto, y Moctezuma comprendió que tenía en sus manos una fórmula redonda para resolver un buen número de problemas en el sureste y consolidarse, de paso, como un auténtico jefe de la política interior del país. Sin embargo, Moctezuma hizo gala de una torpeza tan aplastante, que Madrazo lo desplazó con rapidez y, aliado con Hank González y los sectores más duros del Ejército, obligó a Zedillo a lanzar la ofensiva militar del 10 de febrero del mismo año. Meses después, Moctezuma declaró en rueda de prensa: 'Cuando estaba en la selva, en todo momento pensaba, y sigo pensando, que estaba delante de mi enemigo' ".
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ƑSe va Labastida? La alianza de los duros contra el decorativo secretario de Gobernación ųen la cual participaban Hank, Madrazo, Bartlett, Figueroa y otras blancas palomas de la misma calañaų no cesó de golpearlo por arriba y por debajo de la mesa hasta el 17 de junio de 1995, día en que, al enterarse de la matanza de Aguas Blancas en Guerrero, Moctezuma presentó su renuncia. Enfermo aparentemente de una dolencia cardiaca, permaneció en reposo más de un año; cuando recobró el ánimo fue colocado en la Secretaría General del PRI, donde intentó llevar a cabo la misión presidencial de darle a ese partido una directiva más cercana a Los Pinos.
Como la página del tonto del pueblo lo informó en su momento, los planes de Moctezuma chocaron entonces con las aspiraciones de Manlio Fabio Beltrones, flamante ex gobernador de Sonora, protegido por Fernando Gutiérrez Barrios, que deseaba precisamente la cartera de Moctezuma Barragán. ƑCómo fue arreglado el diferendo? Usted lo recuerda: Gutiérrez Barrios fue secuestrado al salir de un restaurante en Coyoacán, Beltrones negoció su liberación con Moctezuma, en el Konditori de Insurgentes sur, don Fernando quedó libre y el sonorense perdió el deseo de incorporarse a la cúpula del PRI.
Después de aquella aventura, Moctezuma Barragán asumió la Secretaría de Desarrollo Social y, continuando con la política de Carlos Rojas Gutiérrez, su antecesor en el cargo, viajó a Chiapas y en persona, delante de fotógrafos y sin rubor alguno, entregó millonarios recursos a los paramilitares de Paz y Justicia, refrendando su profunda convicción en que la guerra de baja intensidad contra el EZLN es la mejor opción para México.
A pesar de su caliginoso comportamiento en todas las ramas de la actividad pública a las que fue comisionado por el mero hecho de ser amigo de Ernesto Zedillo, en 1998, y usando como plataforma de despegue a la revista Milenio, Moctezuma se autodestapó como aspirante a la Presidencia de la República, "un puesto para el que fue educado desde que era niño", según afirman quienes conocen en detalle los intríngulis de su mundo familiar.
Hoy, tal como se esperaba hacía varias semanas ųMilenio de hecho lo anticipóų, Esteban Moctezuma ha sido colocado detrás de Labastida Ochoa, cuya precampaña es, bajo todo punto de vista, un fracaso tan rotundo como previsible. Si el día de mañana don Pancho se enferma...
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UNAM: la línea Coparmex. Un estudio independiente, efectuado por maestros y alumnos de la Facultad de Economía, estima que menos de uno por ciento de la población estudiantil y académica de la máxima casa de estudios participa en las tareas materiales de la huelga: las guardias, la preparación de materiales impresos, la cocina, etcétera. Desde el segundo mes del movimiento, la custodia de las instalaciones ha recaído fundamentalmente en el STUNAM, pues mientras los jóvenes escolares consagran la inmensa mayoría de su tiempo a la "política de masas", los trabajadores protegen, con una mezcla de paternalismo enternecido y explicable precaución, las fuentes de las que obtienen los cotidianos frijoles.
De acuerdo con este cálculo estadístico, el número de profesores y educandos que, a su vez, interviene en las asambleas y brigadas, asciende a 1.5 por ciento de la población total de la UNAM. La huelga aventurera que el tonto del pueblo diagnosticó en abril ha satisfecho a plenitud las expectativas neoliberales, que pretenden la clausura definitiva de la Universidad Nacional, tal como lo expresara hace algunas semanas el capo mayor de la Coparmex.
Estamos ante el juego político más perverso del sexenio. El "gobierno" mantiene congelados a sus títeres de rectoría porque lo único que no desea es el diálogo, sino que todo se acabe de pudrir. Y, en correspondencia, una minoría demagógica y vociferante insiste en que la huelga pone de relieve "una amplia toma de conciencia de la juventud mexicana". Esto es una patraña. Si en un principio los estudiantes hablaron de una huelga activa, para demostrar que la UNAM podía "funcionar sin funcionarios" ųpropuesta que fue duramente reprimida por la ultraų, Barnés, Gobernación, Burgoa y Soledad Loaeza, entre otros, han probado justamente lo contrario: el neoliberalismo puede seguir "neoliberándonos" sin la UNAM.
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Flash de última hora. Fuentes confiables aseguraron a la dirección de Las Cabras que el "gobierno" federal ha vendido el espacio geoestacionario de nuestro país. ƑParece broma, disparate o invención literaria? No es así. Desde 1997, México paga una renta literalmente estratosférica por el espacio que ocupan los satélites mexicanos que flotan a 34 mil kilómetros de altura sobre el territorio nacional.