n Denuncia del PRD desde el Senado
Albores azuza a indígenas de Los Chimalapas contra Pablo Salazar
Andrea Becerril n Ante el pleno del Congreso de la Unión, el PRD responsabilizó al gobernador de Chiapas, Roberto Albores, del ''derramamiento de sangre'' que puede haber, ya que en su afán por desprestigiar y linchar políticamente al senador independiente Pablo Salazar Mendiguchía, el interino está azuzando a un enfrentamiento entre los indígenas de Los Chimalapas que habitan en Chiapas y Oaxaca.
''No entendía por qué esa actitud irracional e irresponsable de Albores, de exacerbar los ánimos en un problema ancestral, que data desde 1947 y en el que hay fuertes intereses de explotadores de madera, ganaderos y hasta narcotraficantes'', comentó en entrevista el senador perredista por Oaxaca, Héctor Sánchez, antes de subir a la tribuna de la Comisión Permanente.
Ahora, agregó, ''me queda claro que Albores lo que quiere es echar encima a los indígenas a Salazar Mendiguchía, con falsas acusaciones, para frenar así la posibilidad de que el senador independiente encabece una coalición opositora que logre ganar la candidatura''.
Después, ante el pleno del Senado, hizo una amplia exposición de la lucha de los indígenas zoques -que existían antes de que se delimitaran los estados de Oaxaca y Chiapas- por las ricas tierras de Los Chimalapas y el apoyo de los gobiernos chiapanecos de Absalón Castellanos, de Patrocinio González y de Elmer Seltzer a madereros, ganaderos y narcos, para que saquearan la riqueza maderera y el café de la zona, pese a las resoluciones presidenciales en favor de los campesinos.
En la Colonia de San Isidro la Gringa se asientan los ganaderos y narcos más poderosos de la región, y hay elementos para suponer ''que el propio Patrocinio González tenía intereses en esos terrenos a través de prestanombres''.
El perredista agregó que hay una imagen de satélite de la zona donde se ubica una pista clandestina en las estribaciones de la sierra ''El espinazo del diablo'', por donde cruzó el proyecto de autopista que González Blanco defendió hasta el final.
El senador Sánchez denunció, asimismo, que fue el propio ex gobernador y ex secretario de Gobernación González Blanco Garrido quien ''en forma silenciosa y unilateral'', a través del Congreso local, reformó la Constitución estatal, borrando el artículo tercero que se refería a los límites con Oaxaca.
Al poco tiempo, agregó, el INEGI publicó nuevos mapas de ambas entidades, ''con límites totalmente irreconocibles, pero que coinciden con la ubicación de las propiedades privadas ganaderas de origen chiapaneco''.
Aludió a la gravedad del asunto, ya que, precisó, se borraron de la Constitución de Chiapas los puntos limítrofes y ''se trata de cerros que no se mueven''. ƑPor qué lo hicieron?, se preguntó el perredista, y él mismo respondió: ''porque hay intereses que pretenden despojar al territorio oaxaqueño de tierras de primerísima calidad y selvas con gran potencial''.
Pero, agregó, mas grave y delicado es que el gobernador Albores, ''de manera cínica y deshonesta, está utilizando un problema limítrofe y de origen agrario para enfrentar a comunidades indígenas zoque, tzotzil y tzeltal en Los Chimalapas''.
A Albores ''no le importa que haya derramamiento de sangre'', porque su intención real es provocar el linchamiento de Pablo Salazar Mendiguchía, para tratar de desprestigiarlo, sin importar las consecuencias.
Además, añadió, Albores ha impulsado también que los medios periodísticos de Chiapas azuzan a campesinos e indígenas para invadir territorio oaxaqueño.
Aunque en la sesión de la Comisión Permanente se encontraba el senador chiapaneco Sami David, el PRI decidió que subiera a tratar el tema el sonorense Gilberto Gutiérrez Quiroz, quien pidió no manipular el conflicto en Los Chimalapas con fines políticos, aunque no respondió a las acusaciones que el perredista formuló contra Albores.
Gutiérrez Quiroz señaló que ''la intervención oportuna de las autoridades federales ha propiciado un encuentro conciliatorio entre ambos gobiernos'' e insistió en que ''no tiene caso nutrir odios de ningún tipo'', sino buscar una solución al problema mediante el diálogo.
No pudo responder a un cuestionamiento de Sánchez sobre los límites entre Chiapas y Oaxaca, ''deben estar en alguna enciclopedia geográfica'', dijo, y el perredista subió a la tribuna para señalar que coincide en que hay vías legales para resolver el problema, entre ellas que el gobierno oaxaqueño acuda a una controversia constitucional, pero lo fundamental es que se frene la actitud belicosa de Albores.
''Desde aquí hago responsable al gobernador Albores de cualquier enfrentamiento violento y sangriento que pueda darse en la zona, porque él personalmente fue con policías y autoridades estatales a tratar de apoderarse de tierras oaxaqueñas.