Ť En dificultades, productores de maíz y frijol

Consejeros comunitarios piden respaldo a la comercialización

Angélica Enciso, enviada, y David Carrizales, corresponsal, Monterrey, N.L., 2 de agosto Ť Representantes de consejos comunitarios de abasto estimaron que las 23 mil tiendas rurales de Diconsa deben constituirse en una red de comercialización que apoye a los casi 6 millones de productores de maíz y frijol, los cuales, con la desaparición de Conasupo, enfrentan dificultades para la compra y venta de los básicos, además de que en algunas regiones se ha presentado escasez de estos productos.

Actualmente las tiendas proveen de granos a poco más de la tercera parte de la población nacional, que estaría constituida por 36 millones de personas, y 98 por ciento de la misma se localiza en el campo. La meta de la paraestatal es llegar a 25 mil tiendas en igual número de localidades con menos de 4 mil habitantes.

Al inaugurarse aquí el cuarto Congreso Nacional de Consejos Comunitarios de Abasto, los 400 delegados de comunidades rurales e indígenas de todo el país analizan los aspectos de infraestructura y servicios. Por lo pronto se han manifestado por revisar la situación de los caminos rurales, que en general están en mal estado por lo que se dificulta que los alimentos lleguen a las localidades.

Buscarán que en este congreso se apoyen iniciativas de las comunidades para respaldar la comercialización de los productos y se presenten servicios adicionales que fortalezcan los ingresos de las familias.

Franco Torres Blancas, representante estatal de los consejos en Guerrero, explicó que en regiones como la Montaña o Costa Chica, donde no se produce maíz y dependen de la compra, ha escaseado el grano.

Previendo esta situación, agregó, la propuesta para la entidad es integrar a las mil 600 tiendas de la entidad como una red comercializadora, para acopiar el maíz en las zonas donde hay producción excedente como Tierra Caliente, el centro, norte y sur de estado donde es posible acopiar, y transportarlo donde no se cultiva, lo cual ayudaría a la producción y permitiría asegurar el alimento básico a las comunidades.

Esta propuesta ya fue planteada al titular de la Secretaría de Desarrollo Social, Esteban Moctezuma, quien aseguró su apoyo. Con la cadena de tiendas de Diconsa, explicó, en Guerrero se abastece a 1.6 millones de personas, la mitad de la población de la entidad, y al año se podrían llegar a movilizar 56 mil toneladas de frijol, maíz y arroz, que constituye el consumo anual.

Agregó que en la región ''resentimos la desaparición de Conasupo, porque no estábamos preparados y apenas nos estamos preparando para sustituir esa figura con este esquema que cumple con las funciones que hacía la paraestatal''. La propuesta completa considera el acopio, la producción con técnicas avanzadas y paquetes tecnológicos con alta productividad, para lo cual se requieren 32 millones de pesos. Se han solicitado 5 millones para empezar a resolver el problema de maíz.

En Chiapas también se ha observado desabasto de maíz en los municipios donde no se produce, advirtió Seín Gutiérrez, quien dijo que buscarán que se establezca el apoyo para la venta de otro tipo de productos como el cacao. Además, precisó, no es necesario importar de Estados Unidos cuando aquí se produce maíz blanco de primera calidad. Consideró que el frijol que está por cosecharse tendrá problemas al venderse porque se les paga un precio muy bajo que no corrresponde a la inversión.

Por su parte, Juan Francisco Mora, director general de Diconsa, dijo que la cadena de tiendas de la paraestatal es la más grande del mundo y llega a lugares con menos de 4 mil habitantes. Añadió que aunque ahora está orientada a la distribución de productos básicos también podría comenzar a vender medicamentos básicos.

Con el fin de satisfacer las necesidades de las comunidades se ampliarán las líneas de productos en las tiendas, al pasar de 160 a 200, con el agregado de implementos agrícolas, productos para la educación, medicina de libre acceso y artículos básicos para la higiene, explicó David Penchyna, coordinador general de la Unidad de Análisis Sectorial.