Ť Espectáculo de Zotto y Plebs en el Salón 21

El hombre propone y la mujer dispone, esencia del tango

Ť La Iglesia católica prohibió ese baile por considerarlo obsceno

Mónica Mateos y Jaime Whaley * ''ƑBailás?", esa no será pregunta obligada esta noche en el Salón 21 cuando se escuchen los primeros acordes de bandoneón. Bastará con cabecear para ser aceptado como compañero de baile, siempre y cuando la candidata a ser pareja sostenga la mirada del caballero. Pero si ella castiga con el látigo del desprecio, si pasa de largo el mirar, no quedará más que disfrutar Tango x 2, un espectáculo que trae a México lo mejor de la milonga bonaerense.

Espalda erguida y cintura floja, casi flotante podría decirse, destreza en el entrelazamiento de piernas y el corazón alerta son los principales requisitos para interpretar el tango, única danza que regala a la vista figuras que se trenzan con apasionada gallardía.

De Gardel a Piazzola

Sensual y arrabalera, la puesta en escena dirigida por Miguel Angel Zotto y Milena Plebs recreará la atmósfera tradicional del tango en sus diferentes épocas y expresiones, desde Gardel hasta Piazzola, pasando por la influencia del modelo hollywoodense y el refinamiento francés.

Cuatro parejas de bailarines profesionales estarán acompañadas por una orquesta de siete músicos y una cantante.

En sus orígenes, bailar tango ''nunca fue un espectáculo hasta que llegó a Hollywood", explicó Zotto, creador del montaje Tango x 2 que esta noche presentará desde ese chamusgo (cotorreo) que acompaña los ligues en el barrio, hasta las coreografías más estilizadas ''en las que los pasos se tienen que alargar para que el público, incluso los que están en última fila, puedan apreciarlos".

Hace muchos años, la palabra ''tango" se utilizaba como sinónimo de baile de negros o reunión festiva de las personas de color. La milonga se sumó al nuevo ritmo y con figuras del candombé se gestó una manifestación coreográfica que a poco se transformó en una danza de pareja abrazada, sensual, vistosa, pero que tuvo como origen generador la actitud del negro ante la música.

Hubo entonces quien tocó esta nueva música y quien la bailó sin advertir seguramente el acto trascendental que estaban realizando: fueron los hijos de aquellos emigrantes que llegaron al Río de la Plata. Una nueva generación de argentinos, por el año 1880, nació bailando el tango.

Ochos, laterales, boleos, sacadas, ganchos y otras florituras conforman los ires y venires de este baile que fue prohibido por la Iglesia católica por considerarlo obsceno, allá por 1915, cuando los hombres empezaron tímidamente a incorporar al tango la presencia de las mujeres.

Este baile fue adoptado en principio por personas de escasos recursos económicos, y seguramente no se bailaba sino en locales muy mal vistos por la sociedad de la época.

''Es la vida''

Es habitual mencionar 1917 como el año del nacimiento del tango-canción, cuando Carlos Gardel estrena los versos de Mi noche triste, escritos por Pascual Contursi con música de Samuel Castriota. El dato es cierto, pero también que desde su origen, el tango se había cantado infinidad de veces.

Angel Villoldo y Alfredo Gobbi se encargaron de escribir y grabar en discos una cantidad muy grande de obras en un repertorio en el que el tango era el sustento básico. Estos tangos estaban escritos en primera persona y generalmente contaban con humor las hazañas del protagonista, sus conquistas amorosas, su habilidad como bailarín.

El Porteñito, tango que Villoldo dio a conocer en 1903, es un claro ejemplo de este estilo primitivo de letra de tango que tiene mucho de couplé.

''El tango es la vida", afirmaron Mora Godoy, esbelta bailarina porteña que dio el salto del ballet clásico a este compás, y Zotto, para luego ofrecer en rueda de prensa una probadita de su espectáculo:

''El hombre propone y la mujer dispone. Por eso es mentira que el tango sea un baile machista. Si ella me quiere hacer fracasar lo hace, y si ella no quiere bailar yo no bailo", dijo el director de esta puesta en escena que lo mismo ha sido aplaudida en París, que en ciudades como Londres, Nueva York o en Guanajuato, en el contexto del Festival Internacional Cervantino.

Con un montaje creado para recuperar el concepto de gran centro nocturno, se presentará además a Acerina y su danzonera, para que ambos bailes típicos de salón (el tango y el danzón) despierten el entusiasmo de los asistentes.

(El espectáculo Tango x 2 se escenificará en el Salón 21, ubicado en Moliére esquina Andrómaco, colonia Granada, este sábado a partir de las 21:00 horas. Mañana domingo la función será a las 18:00 horas, en una atmósfera más familiar a la que pueden asistir menores desde ocho años.)