* Semana de actividades sobre esa zona de la urbe


Convenio INAH-Gobierno del DF para rescatar el Centro Histórico

* Escaso éxito del Fondo de Salvamento, reconoce Coulomb

Arturo Jiménez y Ricardo Olayo * Con la firma de Cuauhtémoc Cárdenas como testigo de honor, el gobierno capitalino y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) signaron ayer un convenio que formaliza la colaboración en el rescate del patrimonio histórico y arquitectónico del Centro Histórico de la ciudad de México.

Durante la ceremonia, con la que comienza la Semana del Centro Histórico, René Coulomb, director general del Fideicomiso del Centro Histórico, reconoció el poco éxito del llamado Fondo de Salvamento, que busca la colaboración de la iniciativa privada en el rescate de 88 edificios del centro de la ciudad ''a punto de caerse", habitados por 880 familias de escasos recursos.

También, el jefe del Gobierno del DF entregó reconocimientos al cineasta Jorge Fons, al dramaturgo Emilio Carballido y al cronista Guillermo Tovar y de Teresa ųentre otros intelectuales, artistas, investigadores y promotoresų por su labor de apoyo y difusión de la cultura de la ciudad. En la lista figuraban, además, Alex Lora, José Emilio Pacheco y José Luis Cuevas, pero no estuvieron presentes.

Cárdenas reconoció el trabajo realizado desde distintas posiciones y enfoques para el rescate y recuperación del Centro Histórico y dijo que hacer habitable ''las 24 horas del día" esta zona que se ha venido despoblando, tendrá un impacto positivo en la calidad de vida de la ciudad. La intención es, agregó, que el Centro vuelva al esplendor de épocas anteriores.

El acuerdo fue firmado por Teresa Franco, directora del INAH, y Roberto Eibenshutz, secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda del gobierno capitalino.

centro-historico.1 El convenio establece la creación de una mesa de trabajo permanente que deberá atender todas las solicitudes de uso del suelo y de proyectos específicos en el Centro Histórico para "acelerar" la respuesta de las autoridades federales y capitalinas a los interesados en colaborar. Además, se elaborará un programa de trabajo conjunto.

Franco señaló que el CNCA, a través del INAH, suscribe este acuerdo con ''verdadero beneplácito". Resaltó que el trabajo conjunto ya se realizaba con una ''espléndida relación" entre los funcionarios del instituto y los del gobierno de la ciudad.

Dijo que con la mesa de trabajo el convenio logra algo que por muchos años se había deseado: mecanismos que permitan una convergencia de políticas en materia de desarrollo urbano y de protección del patrimonio cultural.

''A nadie escapa que los problemas graves vividos en los últimos tiempos en materia de preservación del patrimonio arqueológico e histórico están envueltos en una serie de inconsistencias de las legislaciones, de ausencias de mesas de diálogo y del examen de los problemas técnicos que permitan dirimirlos en beneficio del patrimonio y de la ciudadanía, que es su verdadera usufructuaria".

Agradeció a Cárdenas la ''sistemática colaboración" de los funcionarios capitalinos en la realización del "delicado trabajo" de peritajes y otorgamiento de licencias.

La Semana del Centro Histórico ųque tiene el lema ''Pon tu corazón en el centro"ų incluye foros, exposiciones, presentación de diversos proyectos de remodelación, restauración, rescate de áreas y edificios y vivienda, así como actividades culturales para niños y adultos, con bailes populares y, al final, el domingo 25, un concierto masivo de Mercedes Sosa en el Zócalo.

ƑColaboración o apropiación?

Coulomb dijo que a seis meses de surgido el Fondo de Salvamento, ''debe reconocerse que no hemos tenido el éxito buscado". La razón: los inversionistas privados están de acuerdo en adoptar uno de estos inmuebles, pero si son para sus oficinas corporativas. Sin embargo, el fondo plantea el apoyo privado en forma gratuita a fin de beneficiar a mil 500 familias.

No obstante, mencionó que de los 88 inmuebles se han comenzado a rescatar cinco en: Academia 14, Belisario Domínguez 76, Las Cruces 12 y Del Carmen 87. También está en proyecto el rescate de la llamada Casa de la Covadonga, en Belisario Domínguez 44-50, con un donativo de la Junta de Andalucía, España.

Durante la ceremonia se proyectó un video informativo que abordó aspectos como el deterioro físico y social de la zona; se citaron los casos de los antiguos barrios de San Sebastián, San Pablo y San Juan. Ante los inmuebles atendidos por ser propiedad pública o privada, se recordó el olvido de los habitados por familias de escasos recursos.

Con estímulos fiscales y facilidades administrativas, instituciones públicas y propietarios privados han intervenido mil 445 inmuebles en siete años, con una inversión superior a 2 mil 700 millones de pesos. En enero pasado concluyeron 77 obras, mientras que 120 continúan, con una inversión superior a 600 millones de pesos.

Sin embargo, se aclaró, la mayoría de las obras se han limitado al reacondicionamiento de locales y al remozamiento de las fachadas, concentrados en el llamado corredor financiero, que va de la Alameda Central al Zócalo y representa 10 por ciento del Centro Histórico.

De 1970 a la fecha, el Centro Histórico ha perdido la tercera parte de su población: más de 100 mil habitantes.

A lo largo del corredor financiero, 80 por ciento de las plantas altas están desocupadas, cuando podrían alojar a una población de ingresos medios. En el barrio de San Sebastián, al norte de la Catedral, hay 159 inmuebles de "alto riesgo" habitados por más de mil 500 familias.

Con la participación gubernamental y de sectores sociales como académicos y vecinales, el Fideicomiso del Centro Histórico elaboró un plan para regeneración habitacional y desarrollo integral de la zona mediante medidas jurídicas y financieras.

Vía créditos, el Instituto de Vivienda del DF impulsa un programa de adquisición y rehabilitación de viviendas para familias de bajos ingresos, pero los recursos oficiales son escasos.

El Fondo de Salvamento busca subsidiar la tercera parte de los costos (130 de 390 millones de pesos) de restauración de inmuebles en áreas pobres, habitadas por 880 familias, y cuyo deterioro requiere de una intervención urgente. Una vez rehabilitados podrán alojarse mil 500 familias.