* Comentaron Los inolvidables, libro de Landeros

Una buena entrevista debe tener el don de la profecía: Carballo

* Carlos Monsiváis y Francisco Toledo no acudieron a la cita

Raquel Peguero * ''Quisiera creer que soy todo eso que dicen de mí", señaló Carlos Landeros antes de agradecer a los presentadores de su libro de entrevistas, los cordiales comentarios que hicieron de Los inolvidables, pues como dijo Manola Saavedra al inicio: ''Cualquier cosa que diga es sospechosa de amistad".

Justo 45 minutos después de lo programado, de las peripecias de algunos colegas reporteros que eran impedidos de usar el elevador, junto con el resto de los usuarios del Club de Industriales ųpor ''no llevar corbata"ų y ser conminados a usar la escalera de servicio de la cocina para que pudieran subir al salón a cumplir con su trabajo, comenzó la presentación del volumen a la que faltaron todas las luminarias que se dijo asistirían al acto.

Anunciados por editorial Diana como comentaristas Carlos Monsiváis y Francisco Toledo, la mesa sufrió un cambio y ellos dos no estuvieron. En su lugar se puso el nombre de Hugo Argüelles que tampoco acudió. No faltaron Silvia Pinal, Beatriz Pagés, Ricardo Rocha, Emmanuel Carballo y Saavedra.

Saber preguntar y escribir

Carballo habló de que en una entrevista es importante no sólo ''saber preguntar, sino también escribir", porque debe estar bien escrita si se quiere que sea perdurable. Señaló la calidad de las entrevistas de Landeros, en especial las de Juan Rulfo, Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes, porque daban luces de lo que serían estos hombres de letras: ''Una buena entrevista debe tener el don la profecía ųacotóų pero me hubiera gustado que Landeros les añadiera un posdata a sus textos para saber qué ha pasado con sus entrevistados, porque el libro corre la mala suerte de que por ser entrevistas de hace 30 años, renueven la nostalgia pero no hablen del presente. Así que Carlos ponte a trabajar".

Pinal señaló que una virtud del libro es que ''podemos entender el significado de la versatilidad" y que el autor presenta a los entrevistados no como ''mitos sino como personas, eso sí nada comunes porque han marcado la historia de México y por ello se constituye como una memoria". Rocha habló de su sentir respecto de lo que debe ser una entrevista y manifestó que este volumen es también una clave ''para desentrañar el enigma del alma humana". Finalmente, Pagés dijo que Landeros es como un ''torero afortunado porque ha entrevistado a todos aquellos que han dejado huella: pintores, toreros, los que inventan y reinventan la literatura, y hasta la frivolidad".