n Un director pretende que firmen actas en blanco


Rehúsan profesores entregar evaluaciones finales; "sería ilegal"

María Esther Ibarra n Los profesores e investigadores integrantes de la Magna Asamblea Académica por la Dignidad Universitaria no entregarán actas finales de evaluación, pues además de considerar ilegales y "un fraude" las actividades extramuros, denunciaron que éstas en diversas escuelas y facultades no se realizaron en las sedes alternas establecidas por las autoridades de la UNAM.

En conferencia de prensa realizada en un restaurante capitalino, los integrantes de esa organización académica estimaron que casi 50 por ciento de unos 22 mil profesores de asignatura no están dispuestos a convalidar un acto "totalmente violatorio de la propia legislación universitaria" y "carente de fundamento académico y jurídico".

Margarita Muñoz, de la Escuela Nacional de Música, citó el caso de este plantel, cuyo director "no convocó a clases extramuros, pero ahora pretende que evaluemos a los estudiantes sin tener ningún elemento para ello, e incluso quiere obligarnos a firmar las actas en blanco a fin de que las autoridades pongan las calificaciones".

En la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales hubo consenso de los miembros del Consejo Técnico para no participar en las actividades extramuros, por lo cual "éstas nunca se realizaron y no hay manera de que podamos evaluar a los estudiantes", aseguró Leonardo Figueiras, profesor de ese plantel.

Situación similar ocurrió en la Facultad de Estudios Superiores (FES) de Zaragoza, cuyo consejero técnico Sergio Díaz aclaró que al inició del conflicto se acordó llevar a cabo actividades extracurriculares, pero "ahora las autoridades pretenden darles validez como materias de los planes y programas de estudio".

Explicó que el Consejo Técnico de la FES Zaragoza nunca aprobó las clases fuera de las instalaciones del plantel y que sólo acordó realizar ocho actividades sin valor curricular. Informó que en la última sesión de ese órgano colegiado, citado para dar posesión de manera interina al decano del plantel como director, por la muerte del anterior, ocurrida en jueves pasado, hubo consenso entre los consejeros en rechazar la entrega de las actas de evaluación.

En el caso del Colegio de Ciencias y Humanidades, Ignacio Hernández Saldívar manifestó que las clases extramuros fueron "desestructuradas por las propias autoridades, particularmente en los planteles Sur y Oriente, en donde los profesores se negaron a participar". De tal suerte que, agregó, aunque los docentes hubieran querido evaluar, "carecen de fundamentos para ello".

Alicia Monroy Aguirre, representante de la Asamblea Académica Permanente Preparatoriana -que aglutina a profesores de los nueve planteles de la Escuela Nacional Preparatoria (ENP)-- entregó un documento en el cual los docentes manifestaron su desacuerdo para impartir actividades extramuros, ya que "nos recomendaron llevarlas a cabo en escaleras del Metro, en cafés, restaurantes, domicilios particulares, en la calle o donde se pudiera".

El colmo, agregó Monroy, fue el último llamado a los domicilios de muchos profesores para pedirles que entreguen calificaciones finales a la "brevedad posible, con la advertencia de que si no los hacían se nombrarían maestros sustitutos".

Denunció que el director de la ENP, Héctor Herrera León, y los de los nueve planteles, han dispuesto que se haga la evaluación con profesores sustitutos, pues "nosotros nos negamos tajantemente a dar una calificación al vapor o a ojo de buen cubero, como pretenden las autoridades".

Figueiras destacó que la negativa de los académicos está debidamente fundamentada, tanto en lo académico como en lo jurídico, por lo cual exigieron a las autoridades respetar la academia y a la propia UNAM y desistir de su actitud de intimidar o tratar de obligar a los docentes a regalar las calificaciones con tal de decir que se salvó el semestre.