n Nuestros buques también patrullan la zona limítrofe, señala Lorenzo Franco


Descarta Marina actitud hostil de EU en la frontera

Jesús Aranda n El secretario de Marina, José Ramón Lorenzo Franco, rechazó ayer que el eventual emplazamiento de soldados estadunidenses en la zona fronteriza constituya un acto "hostil" para México; consideró que los vecinos del norte están en su derecho de actuar como consideren conveniente en su territorio.

Nosotros tenemos al Ejército Mexicano en nuestra franja fronteriza y a los buques de la Armada patrullando la zona limítrofe, y la relación entre ambas naciones se da en un marco de mutuo respeto, dijo Lorenzo Franco, sin embargo, reconoció que en algunas ocasiones se han suscitado incidentes cuando soldados mexicanos cruzan al territorio del vecino país por error, debido a la falta de señalamientos claros en la zona.

Lamentó que los logros alcanzados en el combate al narcotráfico, particularmente en lo que respecta a evitar el ingreso de droga por el mar Caribe y el Golfo de Cortés, contrasten con el incremento en el consumo interno de estupefacientes, lo cual, dijo, es sumamente grave y peligroso para la juventud mexicana.

Entrevistado al término del desayuno que ofreció a los medios de comunicación con motivo del pasado Día de la Libertad de Expresión, el almirante descartó que el emplazamiento de tropas estadunidenses en la frontera pudiera acarrear problemas en la relación bilateral, ya que hace dos años buques guardacostas de Estados Unidos ingresaron a la zona exclusiva mexicana, lo que motivó una protesta enérgica del gobierno y el compromiso de Estados Unidos de que el incidente no se repetiría.

Precisamente, dijo, desde 1994 la Armada inició el proyecto de construcción de los buques Holzinger (apenas el pasado primero de junio se abanderaron dos de ellos, con los que suman seis), los cuales, por su capacidad de desplazamiento (de hasta 22 nudos, a diferencia de otros barcos que apenas alcanzan 8 y permanecen en activo), y por contar a bordo con un helicóptero y una lancha rápida de intercepción, equivalen a por lo menos cuatro buques de los anteriores.

De seguir con este programa de construcción para el próximo sexenio, aseguró, en cuatro o cinco años se quintuplicará la capacidad de vigilancia en el mar. Para evitar que se presenten incidentes en la zona limítrofe de México y Estados Unidos, añadió, deben fortalecerse los vínculos de cooperación y comunicación entre ambos gobiernos, como son las reuniones de autoridades estatales y municipales fronterizas, y como el reciente encuentro que sostuvo personal de la DEA con elementos del Ejército Mexicano en el estado de Chihuahua ųinforme sobre el que, por cierto, la Secretaría de la Defensa Nacional mantiene total hermetismo.

Avances y retrocesos en el combate al narcotráfico

Por otra parte, Lorenzo Franco aseguró que gracias a los esfuerzos coordinados entre la Armada de México, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Procuraduría General de la República, se ha logrado reducir el ingreso de droga por el mar del Caribe y el Golfo de Cortés, principalmente.

Sin embargo, dijo, es preocupante el incremento del consumo de estupefacientes en el interior del país, sobre todo en los alrededores de las escuelas.

Comentó que aun cuando las secretarías de Educación Pública, Desarrollo Social y Salud hacen mayores esfuerzos para prevenir el uso de drogas, éstos, hasta la fecha, no han dado los resultados necesarios.

A consecuencia del avance alcanzado en la intercepción de droga que se pretendía introducir en México, Lorenzo Franco comentó que, seguramente, los traficantes de estupefacientes están utilizando rutas alternas para transportar la droga al mercado de consumo más grande del mundo, que es el de Estados Unidos.

Finalmente, el almirante recordó que el reciente incidente en el que un transbordador fue asaltado por "piratas" cerca de Cozumel, dejó en claro las irregularidades que persisten en el tráfico marítimo, tanto de carga como de personas, y la necesidad de que sea reformada la Ley de Navegación y Comercio Marítimo, porque incidentes como éste podrían acarrear un grave problema no sólo nacional, sino internacional, por el creciente tráfico de transatlánticos a los puertos mexicanos.

Rechazan militarización

Organismos no gubernamentales y legisladores de ambos países externaron su rechazo a la posible militarización de la frontera de Estados Unidos. La abogada Pilar Noriega, el humanista Adrián Ramírez y el legislador Benito Mirón Lince coincidieron en que el gobierno de México, por cortesía diplomática, tuvo que ser informado del acuerdo tomado por la Cámara de Representantes del Congreso estadunidense, en el sentido de militarizar su frontera con nuestro país bajo el pretexto de lucha contra el narcotráfico y la guerrilla, por lo que la Secretaría de Relaciones Exteriores debe aclarar, de inmediato, hasta dónde esa determinación representa un potencial peligro para la seguridad nacional.

"Aceptamos que se trata de una decisión de soberanía, pero no cabe cuando nuestro país mantiene una lucha paralela contra el narcotráfico y cuando los grandes capos se encuentran en Estados Unidos", dijo el diputado Benito Mirón, para quien "no es justificable querer militarizar la frontera bajo el pretexto de un mayor combate al tráfico de drogas desde México, y menos considerar que desde aquí se puedan planear operaciones terroristas al interior de esa nación. Eso es absurdo".

Asimismo, Mónica Oropeza, de la Casa del Migrante, advirtió que estas acciones afectarán a los trabajadores que intentan cruzar hacia Estados Unidos, pues podrían ser confundidos con narcotraficantes, lo que aumentaría el número de muertes de connacionales.

En el mismo tenor, el congresista por El Paso, Texas, Silvestre Reyes, quien creó la Operación Bloqueo en 1993 ųque dio pie a otros operativos antinmigrantes similaresų, aseguró que autorizar a militares a vigilar la frontera con México es anticonstitucional, y por ello la disposición será rechazada en el Senado.

Construirán malla metálica en la frontera con Ciudad Juárez

Por otra parte, autoridades de Estados Unidos, coordinadas con las del estado de Nuevo México, anunciaron la construcción de una malla metálica de 8 kilómetros de largo y 3 metros de altura en la frontera con Ciudad Juárez, con la finalidad de impedir el tráfico de indocumentados y drogas. (Con información de Triunfo Elizalde y los corresponsales Rubén Villalpando y Hortencia Martínez Báez)