n Piden investigadores eméritos el fin de la huelga
La universidad decaerá si no se le defiende del "populismo"
Karina Avilés n En la huelga que enfrenta la UNAM "hubo" elementos "interesantes" y "válidos", reconoció Jaime Litvak, profesor emérito de esa institución, quien junto con un grupo de investigadores exhortó a los estudiantes en paro a levantar la huelga a la "brevedad posible", ya que de lo contrario la máxima casa de estudios corre el "peligro" de que no se concluyan los proyectos de desarrollo personal y académico.
Los investigadores eméritos rechazaron que la UNAM sea un lastre -- pues produce 52 por ciento de la investigación en México--; no obstante, dijeron: "podemos caer y ser un lastre si no la defendemos contra estas tendencias populistas" en donde la calidad sea inferior a una formación aceptable.
En conferencia de prensa conjunta, Jaime Litvak, Elisa Vargas Lugo, José Rubén Romero, Luis Esteva Maraboto y Eduardo Chávez coincidieron en señalar que la huelga que vive la UNAM "deja una gran lección" y abre la posibilidad de repensar "la universidad que queremos".
Jaime Litvak, director fundador del Instituto de Investigaciones Antropológicas, señaló que el problema no es si valió la pena el paso de más de 40 días para que se llegara a una propuesta por parte del rector, sino "hasta dónde nos fallaron los mecanismos que debieron haber permitido que no hubiera estallado la huelga por la buena".
Por su parte, José Rubén Moreno, del Instituto de Investigaciones Históricas, enfatizó que el planteamiento formulado el pasado lunes en el Consejo Universitario para buscar una solución al conflicto, "es el último paso que puede dar la universidad sin vulnerar los principios fundamentales que la rigen", pues ir más allá "sería poner realmente a nuestra universidad en una situación peligrosa".
Respecto a la participación democrática en los órganos de gobierno de la UNAM, Luis Esteva, investigador del Instituto de Ingeniería, expresó por su parte que "las políticas académicas deben decidirlas quienes tienen una formación académica y una visión de largo alcance".
En ese sentido, Romero, consideró que el sentir de la mayoría de los universitarios "está en esta otra postura que quiere una universidad institucional", a lo largo de cuya historia han existido cuerpos de administración y gobierno que "hasta ahora han funcionado bien". No obstante, expresó, esos órganos pueden mejorar, pero sin perder el principio de autoridad. Elisa Vargas Lugo, del Instituto de Investigaciones Estéticas, dijo que la UNAM "no puede hacerse una universidad populista porque no está en la naturaleza de la vida universitaria".