n González Fernández
En 94, Cabal sólo entregó al tricolor
un millón de pesos
Enrique Méndez n La aportación económica de Carlos Cabal Peniche a la campaña presidencial de 1994 fue ''poco significativa'' porque sólo entregó un millón de pesos (poco más de 300 mil dólares al tipo de cambio de entonces), y no 25 millones de dólares como él asegura ahora para ''amedrentar y atemorizar'' no sólo al presunto beneficiario de su donativo, el presidente Ernesto Zedillo, sino ''a todos'' los mexicanos, ''pero no hay que dejarse engañar'', dijo el dirigente nacional del PRI, José Antonio González Fernández.
''Tal y como consta en todos los recibos'' que el PRI extendió entonces a los particulares que entregaron recursos al partido, así como en los documentos en poder del IFE, el ex banquero sólo aportó esa cantidad, aseguró el directivo priísta, aunque más adelante aceptó: ''Las aportaciones que dio antes de septiembre de 1993, las pudo haber dado mayores''.
En entrevista, González Fernández informó que antes de esa fecha, cuando todavía se permitían aportaciones de empresas mercantiles -en febrero de ese año ocurrió el pase de charola a prominentes empresarios-, el tricolor abrió dos fideicomisos públicos en Banca Cremi y en Banca Unión, ''en donde llegaban los aportantes y daban los recursos. El PRI siempre actuó con legalidad; las donaciones físicas las folió, se dieron recibos. Esa es la verdad, el que nada debe nada teme'', expresó.
Incluso, bajo esa perspectiva, planteó que su partido continuará pasando la charola entre el sector privado. ''Nosotros vamos a pedir donativos, que son legales, a todos los que quieran aportar recursos, hasta donde lo establecen los topes''.
Para el presidente del PRI, la idea de la oposición de constituir una fiscalía especial que investigue el financiamiento privado del tricolor en 1994 es ''una estrategia político-electoral que no ayuda porque tratan de sacarle jugo a este tema, que no tiene sentido y está dictaminado por el IFE''.
Recalcó que su partido no tiene nada que ocultar. ''Ahí están -dijo- los dos hombres que fueron secretarios de Finanzas, Carlos Sales y Oscar Espinosa, y ahí está también cómo el gobierno priísta no protege a ningún delincuente, aunque en ese entonces no se sabía que había cometido algún ilícito, y que hoy lo persigue''.
La mañana de ayer, la dirigencia nacional del PRI había instruido a los secretarios de finanzas del CEN y de los comités estatales a vigilar ''con lupa'' los ingresos y los gastos, especialmente en lo que se refiere a las campañas políticas, así como respetar ''escrupulosamente'' los lineamientos del IFE.