La Jornada miércoles 2 de junio de 1999

ASTILLERO Ť Julio Hernández López

Marco Rubén Nevárez Solano, Camilo Robles Valdez y Gaspar García Lugo pusieron el mayor de sus esfuerzos en que luciera sus mejores galas la plaza de Ahome en la que horas después Francisco Labastida Ochoa encabezaría un mitin más de su precampaña presidencial.

"Trabajaron extenuantemente desde días antes... pusieron todo nuevo, limpiaron la zona, montaron el templete, checaron la instalación eléctrica, pusieron postes nuevos, fumigaron sobre las cabezas de los presentes y finalmente montaron la tramoya", aseguran Luis Roberto Loaiza Garzón, directivo estatal del PAN en Sinaloa, el diputado local Zenén Xóchihua Enciso y el regidor de Ahome, Gustavo Soto Portillo.

Y es que los mencionados en primer término, los afanosos organizadores de la recepción al primer sinaloense del país, son, respectivamente, coordinador de eventos públicos, director de la Casa de la Cultura y subdirector de alumbrado público del ayuntamiento de Ahome.

Los panistas presentaron fotografías en las que se observan vehículos y personas que ellos aseguran que están tocados por el manto gubernamental. Vehículos de gobierno, personal de gobierno, según la denuncia publicada en su edición de ayer por el diario El Debate.

No es esa, sin embargo, la única denuncia pública en la que se menciona que el candidato zedillista a Presidente de la República es apoyado por estructuras de gobiernos priístas. Tampoco es el único caso en el que el asunto de los dineros cobra máxima relevancia.

Díme cómo financias tu campaña y te diré quién eres

En cierta medida, el tema del financiamiento se está convirtiendo en el punto central del debate político actual. El abanico de circunstancias y valoraciones va desde el caso de los amigos de Vicente Fox hasta la reiteración de que Carlos Cabal Peniche dio millones de dólares a las campañas de Luis Donaldo Colosio, Ernesto Zedillo y Roberto Madrazo.

El dinero y sus implicaciones políticas, los compromisos adquiridos, las obligaciones de retribución, el narcotráfico, el lavado de dinero, el poder económico al asalto del político; Carlos Hank demostrando que a fin de cuentas le ha asistido toda la razón cuando afirmó que un político pobre es un pobre político; Roberto Madrazo converso a la austeridad republicana, demandando prudencia en los gastos de campaña y transparencia en sus orígenes y aplicaciones; Francisco Labastida Ochoa peleando contra el sistema para que no lo beneficien con cargadas, acarreos, matracas, mariachis, tortas y refrescos...

Campaña larga, gastos largos

Una de las deformaciones que produjo la alteración zedillista del calendario político (al permitir el acortamiento de su periodo de poder, y precipitar la aparición pública de precandidatos y los virtuales arranques de campañas) es la de alargar el tiempo en el que los aspirantes deben hacer erogaciones para mantenerse en el ánimo público.

Fox y Madrazo han gastado millones y millones, en una abierta competencia por el posicionamiento político temprano. Labastida, que había estado rezagado, va emparejándose a toda velocidad (por cierto, le ha molestado al sinaloense que se le pregunte sobre el propietario del avión que está utilizando para sus traslados. La respuesta que ha dado es de antología: dirá el nombre del propietario cuando otros aspirantes lo hagan pues, se quejó, la prensa nada más lo ha interrogado a él y a otros precandidatos de su partido, y de otros, no. Lo bueno es que don Francisco es economista y no abogado, así es que de alguna manera tiene no excusa, pero sí pretexto).

El financiamiento, un asunto de ética

En ese contexto, nos espera a los mexicanos una larga danza de millones de pesos inexplicados e inexplicables. Lo mismo de empresarios derechistas que apoyan al futuro salvador bigotón de la patria, que de gobernadores amigos que ayudarán al hombre a quien el dedo presidencial amputado ha puesto en el camino adecuado.

Los alegatos defensivos ya están a la vista, tanto en relación con hechos anteriores (el presidente Zedillo y el gobernador Madrazo, quienes advierten que los donativos recibidos no iban contra ninguna disposición legal en aquel momento) como con los futuros. En el fondo, el problema es más ético que jurídico. Nadie que financie su campaña con dineros oscuros podrá ofrecer claridad. Nadie que reciba cantidades comprometedoras podrá eximirse del cumplimiento de las obligaciones que naturalmente conllevan.

Por lo pronto, en Ahome han surgido las primeras evidencias documentadas de ese apoyo económico de gobiernos priístas a su candidato zedillista. En Sonora también hubo quejas, tanto por la presencia de signos de apoyos gubernamentales como por el guarurismo en derredor del señor candidato.

Y faltan trece largos meses.

Astillas: Dijo don José Antonio González Fernández que el 7 de noviembre, cuando se realice la elección abierta priísta de candidato presidencial, los militantes del tricolor deberán llevar a las mesas a amigos, familiares y vecinos para que el ganador lo sea con muchos votos. ƑAmigos, familiares y vecinos? La delicia para cualquier operador de carruseles y ratones locos... Ayer corrió la versión de que Roberto Madrazo pediría licencia al gobierno tabasqueño justamente este viernes 4, dentro del marco de la conmemoración de la muerte de su padre, Carlos A. Madrazo. En caso de pedir licencia, y no renunciar (como pide la convocatoria priísta, en un requisito anticonstitucional hecho con dedicatoria para el tabasqueño), Madrazo designará de entre sus secretarios, o su procurador, a quien le supla por 60 días. Madrazo se ha dedicado justamente en estas horas recientes a preparar una estrategia de defensa de los intereses de su gobierno, dejando a una parte de sus colaboradores en Villahermosa, en sus cargos actuales, y llevándose sólo a unos cuantos a su campaña presidencial.

Fax: 5545-0473 * Correo electrónico:
[email protected]