n Pide eliminar el dedazo


Preocupan a Manuel Barttlett los usos y costumbres del PRI

Luis A. Boffil Gómez, corresponsal, Mérida, Yuc., 26 de mayo n Manuel Bartlett Díaz, precandidato del PRI a la Presidencia de la República, aseguró estar preocupado por la cultura de 70 años de hegemonía priísta, de seguir líneas e imposiciones, y afirmó que se debe romper con la costumbre del dedazo.

En conferencia de prensa que dio luego de participar en la asamblea ordinaria estatal de la CROC, presidida por el líder nacional Alberto Juárez Blancas, el ex gobernador de Puebla señaló que su principal "temor" es que continúen las viejas formas del PRI de hacer política, y apuntó: "El dedazo ya no sirve; al PRI le urge democratizarse con mayor participación de los ciudadanos".

De buen humor, Bartlett Díaz incluso bromeó cuando se le cuestionó sobre su fama de duro, y respondió: "ƑManuel Bartlett, el político duro? Ƒexistió? Ƒquién es ése?", y abundó: "Soy firme, eso sí, siempre he privilegiado en mi vida de político el estado de derecho".

Respecto del famoso sindicato de gobernadores, el ex mandatario poblano manifestó que ya no existe, y responsabilizó al ex titular de Gobernación de ello. "Francisco Labastida me lo expropió y después puso a los gobernadores a disposición de él, cuando era secretario de Gobernación, y ahora en su precampaña", acusó.

Asimismo, minimizó la conformación de una eventual alianza opositora entre el PAN y el PRD, al indicar: "Es un afán enfermizo de derrotar al PRI, pero no veo el momento en que la derecha apoye a la izquierda, y la izquierda a la derecha. Son como el agua y el aceite".

Entonces arremetió: "El PAN representa a la ultraderecha y a todos los principios antirrevolucionarios, mientras que el PRD es un partido que se alimenta de los desechos que nosotros (los priístas) arrojamos"; además, calificó la campaña de Vicente Fox, como "política chatarra", y criticó la gestión de Cuauhtémoc Cárdenas al frente del Distrito Federal.

De igual forma, insistió en que Francisco Labastida no es el candidato del presidente Ernesto Zedillo, y confió en que éste no tenga preferencia por algún aspirante.